Amnist¨ªa denuncia la desprotecci¨®n de los menores en el acceso a los videojuegos

Amnist¨ªa Internacional (AI) denuncia la falta de protecci¨®n de los menores, que tienen acceso a cualquier tipo de videojuego, a pesar de que tengan la clasificaci¨®n de para adultos, seg¨²n el informe que ha presentado su director en Espa?a, Estaban Beltran.

Beltr¨¢n ha dicho que la protecci¨®n de los ni?os y adolescentes frente a contenidos que pueden vulnerar sus derechos "es una responsabilidad, una obligaci¨®n, del Estado espa?ol" y que un a?o despu¨¦s del compromiso del Gobierno para proteger a la infancia en este ¨¢mbito "no ha impulsado ninguna iniciativa".

Seg¨²n AI, no se ha creado la "comisi¨®n de seguimiento del sector y de la aplicaci¨®n del c¨®digo PEGI" (sistema de clasificaci¨®n de los viodeojuegos impulsado por las empresas del sector), que anunci¨® el a?o pasado el Ministerio de Sanidad y Consumo, ni se ha puesto en marcha la campa?a informativa que se anunci¨®, ha a?adido.

Esteban Beltran se ha quejado de que el Gobierno apuesta por la autorregulaci¨®n voluntaria de las empresas sin establecer normas de ¨¢mbito estatal que impidan el acceso de los menores a videojuegos con clasificaciones no aptas para ellos, en los que se banalizan los derechos humanos y se induce a la violencia o al delito.

Libertad total

El estudio revela que los menores pueden adquirir cualquier videojuego con toda libertad en cualquier punto de venta, ya sean grandes superficies o tiendas especializadas, en las catorce ciudades de las nueve Comunidades Aut¨®nomas visitadas por los voluntarios de AI.

Al no existir legislaci¨®n, las comunidades tienen diferentes tipos de control: diez de las 17 leyes auton¨®micas de protecci¨®n de la infancia y adolescencia incluyen prohibici¨®n expresa de venta y alquiler de videojuegos con contenidos no adecuados; en cuatro la normativa es ambigua, y en tres no se hace ninguna menci¨®n, pero en ninguna se cumple la ley, ha dicho Eva Aguilera, responsable del ¨¢rea de menores de AI.

Aguilera ha explicado que tambi¨¦n se ha comprobado que en los puntos de venta los videojuegos no est¨¢n separados por edades, ni por contenidos, y que la mayor¨ªa de los vendedores desconocen lo que significan los iconos descriptores que incorporan, incluso uno de los vendedores, se?al¨®, interpret¨® que la edad recomendada se refer¨ªa al nivel de dificultad.

El informe recomienda al Gobierno que establezca un marco legal para proteger a los menores, y a las comunidades aut¨®nomas, que cumplan sus leyes y activen mecanismos de denuncia, ha a?adido Beltr¨¢n.