Juan Mari Arzak: "Hay que meter ca?a a la Thermomix"

Juan Mari Arzak, cocinero donostiarra con tres estrellas Michelin, un logro a la altura de muy pocos, ha ido m¨¢s all¨¢ de la gastronom¨ªa vasca explorando texturas, procesos, ingredientes... Esa curiosidad tambi¨¦n la explota con la tecnolog¨ªa

No tiene MP3, el m¨®vil lo usa apenas para hablar y recibir mensajes, porque no los contesta pero s¨ª critica la tardanza con que llegan muchos adelantos al mercado: "?Por qu¨¦ habiendo cds segu¨ªan haciendo vinilo? Porque ten¨ªan que seguir vendiendo tocadiscos".

Le gusta Internet, aunque no es aut¨®nomo en la navegaci¨®n. En el restaurante tiene m¨¢s de 15 ordenadores. Todo tiene una explicaci¨®n: "Soy un poco como Alejandro Magno, s¨¦ rodearme de gente que sabe. Uso el ordenador para todo, pero no lo manejo yo, sino que tengo quien se mete en Google y busca lo que pido o manda los mensajes". Empleo tiempo en crear y llevar el restaurante y me falta tiempo para dormir

Cuenta con p¨¢gina web del restaurante desde hace bastantes a?os, pero la verdadera utilidad la ha encontrado desde hace poco m¨¢s de un a?o. "Recibimos much¨ªsimas reservas a trav¨¦s de nuestra web, para la gente es m¨¢s c¨®modo. No tenemos un equipo como para contestar dudas o curiosidades. Nos organizamos como una familia y hacemos lo que sabemos hacer: cocinar", explica Juan Mari con su habitual vehemencia.

Su relaci¨®n con la tecnolog¨ªa es generalmente buena, aunque reconoce que hay que saber usarla: "No es igual cocinar con gas que con inducci¨®n, se trata de saber adaptarse a cada cosa".

Los robots de cocina son cada vez m¨¢s populares en los hogares, un adelante que a Juan Maria Arzak le parecen "fruto de nuestro tiempo; son remedios a enfermedades". Aunque a?ade algunos consejos para los fieles a la tecnolog¨ªa en sus cocinas: "Hay que meterle ca?a a la Thermomix e inventar, no s¨®lo seguir la receta".

Un v¨ªdeo en el que debate con Ferran Adri¨¤ sobre c¨®mo y cu¨¢ndo se deben consumir las anchoas se convirti¨® en un fen¨®meno viral en la red por lo acalorado de la discusi¨®n. Con una sonrisa pone fin a la discusi¨®n: "Ferran y yo somos como hermanos, por eso nos podemos hablar as¨ª". Al tiempo que vuelve a la carga: "De lo que ¨¦l no se quiere enterar es que la anchoa del Cant¨¢brico no es igual que la del Mediterr¨¢neo. No es porque nos estuvieran grabando, somos as¨ª siempre, nos calentamos y rega?amos".