Chris Csikszentmih¨¢lyi : "Los peri¨®dicos son los medios c¨ªvicos por excelencia"
El director del Future Civic Media Center del MIT defiende la funci¨®n social de la prensa escrita como pilar de la democracia
Grassroots mapping es un proyecto de cartograf¨ªa participativa de bajo coste. Con un globo y una c¨¢mara digital, cualquiera puede tomar im¨¢genes a¨¦reas de un territorio. Desde mayo un ej¨¦rcito de ciudadanos est¨¢ retratando el devastador efecto del vertido petrol¨ªfero del Golfo de M¨¦xico. Las im¨¢genes, actualizadas semanalmente y bajo dominio p¨²blico, pueden ser usadas por los afectados para reclamar indemnizaciones a BP. La misma tecnolog¨ªa, que cuesta unos 100 d¨®lares, sirve en Per¨² para que sean los ni?os quienes pongan en el mapa a sus 100 familias, originarias de la amazon¨ªa, residentes en Lima desde hace nueve a?os. Como en los mapas oficiales su comunidad no existe, no pueden exigir luz o agua y "menos a¨²n reclamar t¨ªtulos de propiedad sobre la tierra que ocupan", explica Chris Csikszentmih¨¢lyi, director del Future Civic Media center del MIT , de vista en Barcelona invitado por la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) . Este grupo multidisciplinar promueve tecnolog¨ªas abiertas, econ¨®micas y reutilizables, como Grassroots maping, para "fortalecer comunidades geogr¨¢ficas".
La prensa escrita es, seg¨²n Csikszentmih¨¢lyi, el modelo de medio c¨ªvico por excelencia. "Ayuda a la comunidad a estar informada, a comprometerse pol¨ªticamente, a reflexionar....". Sin embargo, Internet y la tecnolog¨ªa digital han transformado el sector, que se desengra econ¨®micamente y corre el riesgo de desaparecer. Algunos servicios digitales suplen algunas de las funciones de los diarios. Por ejemplo, Craiglist con los anuncios clasificados. "Es un servicio web geogr¨¢fico perfecto para el intercambio y la compra venta de todo tipo de cosas, pero poco m¨¢s".
A pesar del panorama, Csikszentmih¨¢lyi est¨¢ convencido de que las funciones que hasta ahora cubr¨ªa el peri¨®dico "regresar¨¢n, pero de manera diferente y, probablemente, suministrada por otros". Ya hay algunos ejemplos. Como Little sis , "un gran hermano al rev¨¦s donde son los ciudadanos quienes controlan al poder". El sitio detalla las conexiones entre la gente influyente y las organizaciones, que inciden en la pol¨ªtica. Little sis recopila informaci¨®n p¨²blica, pero dispersa. Los empleados de la p¨¢gina y los voluntarios actualizan los perfiles de los ejecutivos de las empresas, miembros de grupo de presi¨®n y representantes electos con datos biogr¨¢ficos y financieros. El resultado, como ellos mismos lo definen, es "un Facebook involuntario de la gente influyente".
En Councilpedia se sigue el rastro del dinero. El sitio, en formato wiki, fiscaliza qu¨¦ cargos electos reciben dinero, y de qui¨¦n en la ciudad de Nueva York.
"No todo el mundo es periodista"
Csikszentmih¨¢lyi diferencia estas tecnolog¨ªas, los civic media, del periodismo ciudadano. "El t¨¦rmino ya es un contrasentido en s¨ª mismo, porque no todo el mundo es periodista. El periodismo es una profesi¨®n, que debe ser remunerada. Si no pueden realizar su tarea, evidentemente lo tendr¨¢n que hacer los ciudadanos, pero no ser¨¢ nunca lo mismo porque el trabajo que desempe?a un periodista no lo pueda realizar cualquiera. En el caso de Councilpedia, donde siguen a un cargo electo, lo hacen porque tienen inter¨¦s en ello. Sin embargo, ?c¨®mo convierten esta tarea en algo ¨²til para el resto de la comunidad incluso cuando no se comparten las mismas ideas pol¨ªticas? Y esto es uno de los secretos de nuestra aproximaci¨®n a los civic media: no podemos transformar un mill¨®n de ciudadanos en periodistas. Nunca funcionar¨¢. Sobre todo porque el periodista no debe s¨®lo pensar en su propio inter¨¦s, sino en el de la sus lectores, de ideolog¨ªas y procedencias diversas. Y los ciudadanos no tienen por qu¨¦ hacer esto. Es una de las claves de las civic media, que sean ¨²tiles de manera individual, pero a la vez sirvan a la comunidad".
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