?Qui¨¦n sube las pel¨ªculas al BitTorrent?
Un centenar de internautas aporta el 75% del contenido en redes P2P, seg¨²n un estudio de la Universidad Carlos III
Lo que empez¨® como una charla de bar se ha convertido en un estudio universitario que ha tratado de desvelar qui¨¦nes son los internautas que suben contenidos a las redes P2P, las m¨¢s populares para descargar pel¨ªculas de Internet. "Estas redes no son tan altruistas como en principio parece. No mantienen la filosof¨ªa del P2P, es decir compartir archivos entre iguales", explica el jefe del proyecto, Rub¨¦n Cuevas. Durante los ocho meses que ha durado el an¨¢lisis advirtieron que el 75% de los contenidos los suben 100 personas.
Cuevas, responsable del departamento de Ingenier¨ªa Telem¨¢tica de la Universidad Carlos III, junto con los investigadores Carmen Guerrero, ?ngel Cuevas en colaboraci¨®n con Michal Kryzcka, del Instituto IMDEA Networks, Sebastian Kaune, de la Universidad T¨¦cnica de Darmstadt (Alemania) y Reza Rejaie, de la Universidad de Oreg¨®n (EEUU), han realizado el trabajo.
La investigaci¨®n analiza c¨®mo se comportan los internautas que subieron m¨¢s de 55.000 archivos a dos de los principales sitios para compartir contenidos: Mininova y The Pirate Bay. El estudio ha usado el programa BitTorrent para hacer seguimiento y tomar las muestras. Aunque saben su IP (protocolo de Internet, el n¨²mero asignado a cada uno de los puntos de la Red) no pueden saber exactamente qu¨¦ personas se encuentran detr¨¢s de ese n¨²mero. "Un proveedor de ADSL s¨ª podr¨ªa saberlo, pero nosotros no, por motivos de privacidad", explica el acad¨¦mico Cuevas, cuyo equipo ha desarrollado una herramienta de seguimiento de IPs para este estudio.
Estos cien internautas que subieron el 75% de los contenidos tienen un perfil muy concreto. "Estos 100 iniciales son los que sacan beneficio. Al subir los archivos a Pirate Bay incluyen enlaces a sus webs, llenas de enlaces y publicidad por la que se lucran". En el estudio incluyen la cantidad media que obtienen por las p¨¢ginas de enlaces: 300 d¨®lares diarios. "Aunque algunas llegan a los 4.000 diarios. Es un gran negocio porque el mantenimiento es m¨ªnimo pero el beneficio grande", seg¨²n el profesor.
En esta misma l¨ªnea hace una reflexi¨®n con respecto a la Ley Sinde. "Me llama la atenci¨®n que se quieran poner puertas al campo. Estudios como ¨¦ste demuestran que la tecnolog¨ªa no tiene l¨ªmites y que hay un modelo de negocio por explorar. Estas plataformas son una oportunidad".
En su opini¨®n esta ley es in¨²til porque "los contenidos van a estar fuera de Espa?a. Aunque intenten limitar la entrada, los internautas pueden usar programas para falsear su IP y navegar libremente por estos servicios. Antes de lanzar leyes que no encajan tendr¨ªan que hacer un esfuerzo y consultar a los expertos".
En su investigaci¨®n, financiada en parte por el IMDEA (Instituto Madrile?o de Estudios Avanzados) tambi¨¦n reflejan que las t¨¦cnica m¨¢s com¨²n para obtener los estrenos ya no es comprar una entrada de cine y grabar con disimulo. As¨ª se creaban los denominados 'screeners'. La vigilancia en las salas ha hecho que, habitualmente, se descarguen las pel¨ªculas en otro idioma y se acuda al cine con grabadora. Despu¨¦s se edita la pista de sonido para poner lo que se ha registrado en espa?ol. "Es artesanal", dice el profesor, "pero se usa". Otra t¨¦cnica, sobre todo para los cl¨¢sicos y las series, consiste en convertir el contenido del DVD a un formato exportable. Esta t¨¦cnica se conoce como 'ripeado', de ingl¨¦s 'rip', ara?ar.
Dentro de los internautas que suben contenidos a la red hay otras tipolog¨ªas: los que ponen un nombre de archivo que no se corresponde con el contenido, o solo el principio de lo que se espera descargar. El responsable del estudio no tiene la certeza pero s¨ª una intuici¨®n: "Pensamos que se hace desde la industria audiovisual para proteger su contenido. Ver que aparece una imagen en bucle o algo que no se espera, crea frustraci¨®n y disuade a los que se descargan sin l¨ªmite. Estos archivos afectan al sistema porque el porcentaje de contenidos falsos se mueve entre el 25% y el 30%".
En casi todos los casos solo son archivos con contenido que no se corresponde con los deseos del que quiere ver una pe¨ªcula concreta, pero en algunos es peor. "Nos hemos encontrado con software malicioso (malware o spyware), son aparentemente contenido que hace de se?uelo pero infecta el ordenador".
El estudio arroja una conclusi¨®n: aunque las redes P2P se pensaron para compartir archivos sin ¨¢nimo de lucro, al menos en esencia, y entre iguales, solo el 11% del contenido es original o creado por los propios usuarios que, por ejemplo, hacen un cortometraje o m¨²sica que quieran dar a conocer.
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