Realidad aumentada para arreglar el motor de un coche
"No hace falta que la gente sepa de motores: con el tel¨¦fono inteligente y este 'software' se resuelve el problema en menos tiempo y sin errores", dicen sus creadores, del Instituto Valenciano de Rob¨®tica (IRTIC)
Ser mec¨¢nico lleva su tiempo. Se sale del aula con el t¨ªtulo de formaci¨®n profesional bajo el brazo, pero no con la experiencia para enfrentarse a un motor BMW 10 de hace una d¨¦cada y resolver un problema concreto de motor, o saber donde est¨¢ una de las cuatro buj¨ªas estropeada y cambiarla o c¨®mo conectar un conector de forma correcta, en el menor tiempo y sin errores. Una aplicaci¨®n de Realidad Aumentada (RA) gu¨ªa al mec¨¢nico en cada paso, a partir de una imagen sint¨¦tica basada en la real. El engorroso manual para montar un mueble y hasta el v¨ªdeo explicativo pasan a la historia con esta aplicaci¨®n realizada por seis investigadores del Departamento de Investigaci¨®n del Instituto de Rob¨®tica y Tecnolog¨ªa de las Comunicaciones (IRTIC), que se ha presentado hoy en la Feria Tecnol¨®gica Bonatel / Vodafone.
"Cuando te dan un cat¨¢logo en Ikea puedes ver el montaje en un v¨ªdeo o seguir las instrucciones en el texto y la imagen en el manual de papel. En este caso, la aplicaci¨®n en m¨®vil es la que te dirige hacia la pieza del motor que hay que reparar o el accesorio a colocar", explica Pedro Morillo, profesor y responsable del proyecto con Marcos Fern¨¢ndez. "En cada paso, el mec¨¢nico sabe exactamente d¨®nde est¨¢ y ad¨®nde tiene que ir", se?ala Rub¨¦n Tal¨®n, otro de los j¨®venes investigadores del grupo. Una llave mec¨¢nica se desplaza en la pantalla del iPad hacia la carcasa del motor, te indica que la abras y reconoce la buj¨ªa, de entre las cuatro, a cambiar.
La aplicaci¨®n, que todav¨ªa no tiene nombre comercial, es una especie de power point, que en vez de tardar hasta 400 horas en reproducir el motor entero de un veh¨ªculo, las tripas de una maquinaria pesada de la industria sider¨²rgica o de un ascensor permite realizarlo en s¨®lo 3 o 4 horas, seg¨²n describe Pedro Morillo, profesor titular y responsable del proyecto con Marcos Fern¨¢ndez.
El editor se ha desarrollado para tel¨¦fonos inteligentes, como iPhone y los que funcionan con la plataforma Android. Y lleva un identificador de papel que el usuario, en este caso el concesionario valenciano Bertol¨ªn de BMW a?ade a un veh¨ªculo concreto. Se trata de una especie de chip de bajo coste que encripta los datos del propietario o propietarios del coche, qu¨¦ mantenimiento se le ha dado y el mec¨¢nico que lo revis¨®.
Entre las ventajas de la aplicaci¨®n est¨¢ el que se puede usar directamente para formar t¨¦cnicos. La Realidad Aumentada entra, as¨ª, por esta v¨ªa en el ¨¢mbito del aprendizaje. Y su ventaja es que lo hace desde el m¨®vil. NO solo reduce costes de reparaci¨®n (porque agiliza los tiempos de trabajo), sino que minimiza el margen de errores. "Si tienes que manipular una buj¨ªa y el veh¨ªculo lleva cuatro y te equivocas, te puedes cargar el sistema electromec¨¢nico", apunta Morillo.
La desventaja: en la actualidad la RA es tremendamente cara y solo para soluciones muy concretas. "El objetivo era hacer una aplicaci¨®n generalista y de bajo coste. Y esta es una herramienta generalista", subrayan los padres del proyecto.
El equipo de seis investigadores ha trabajado dos a?os en esta aplicaci¨®n cofinanciada por el Ministerio de Ciencia e Innovaci¨®n y el Ministerio de Educaci¨®n, con un coste aproximado de 450.000 euros, entre tecnolog¨ªa y la mano de obra de los investigadores dedicados en exclusiva.
La Universidad negocia ahora con BMW (junto con Volkswagen han sido marcas precursoras en el uso de la RA) su comercializaci¨®n. Tambi¨¦n aspira a vender sus servicios a otras firmas o sectores industriales. Si ahora se tarda entre 300 y 400 horas de trabajo en crear un editor, desarrollar este para una tarea concreta cuesta en 4 o 6 horas. Si el trabajo del investigador se cobra a 120 euros la hora, el precio final del servicio se abarata de forma considerable hasta por debajo de los 600 euros. "Algo impensable en el mundo de la Realidad Aumentada", puntualiza Morillo.
Mediante Bodetel, el principal distribuidor de Vodafone en Espa?a orientado a la b¨²squeda soluciones de datos y de voz en el mercado, el equipo de investigadores de la Universidad de Valencia ha podido trabajar con m¨®viles de alta gama. "Acaba de salir iPad, y ellos ser¨¢n los primeros en usarlo", certifica David Barea, del Departamento de Desarrollo de Bodetel. Barea reconoce que la RA est¨¢ poco generalizada en el mercado (por el elevado coste), pero afirma que es "el futuro", por ejemplo, para dar clases avanzadas de mec¨¢nica. "No hace falta que la gente sepa de motores: con el aparato y este software se desmonta el motor y resuelve el problema".
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