Colonia, capital europea del videojuego

El que no puede ir a al Tokio Game Show a mediados de septiembre, viene a Colonia a GamesCom, la segunda convenci¨®n de videojuegos m¨¢s importante del mundo y primera en asistentes. Aunque las grandes novedades ven la luz en el E3 de Los ?ngeles (California), la industria siempre se reserva alguna sorpresa para estas dos citas porque, a diferencia del evento estadounidense, en estas dos el p¨²blico general cuenta.

En GamesCom se espera que desde este mi¨¦rcoles, d¨ªa reservado para los profesionales del sector, y hasta el domingo, m¨¢s de 250.000 entusiastas recorran los pasillos de la feria de Colonia probando los t¨ªtulos que en pocas semanas estar¨¢n en las estanter¨ªas de las tiendas, luchando por el trono navide?o. Precisamente, la afluencia de p¨²blico hizo que en 2008 GamesCon cambiase de sede. Con el este de Alemania luchando por igualarse con el oeste, en Leipzig, lugar d¨®nde naci¨® este encuentro en 2002, no sent¨® nada bien el cambio. El argumento tiene mucho de comercial: los grandes medios prestan m¨¢s atenci¨®n a Colonia, tiene mejor comunicaci¨®n y, sobre todo, m¨¢s plazas hoteleras. A¨²n as¨ª se quedan cortas.

La zona Campus de GamesCom se parece mucho a lo que en Espa?a se entiende por Campus Party: acampada en un pabell¨®n, mucha cafe¨ªna y bolsas de patatas. Todo vale para probar t¨ªtulos antes que lleguen a la tienda.

La primera toma de contacto es la prueba de fuego para el producto. Sobre todo cuando la crisis tambi¨¦n pasa factura al videojuego. De hecho, una vieja demanda del sector es formar parte de la industria cultural en Espa?a, como ya pasa en gran parte del continente y disfrutar de un IVA m¨¢s reducido. Los jugadores compran entre 4 y 6 novedades al a?o. "M¨¢s que nunca la calidad de los t¨ªtulos es primordial porque se ha reducido la adquisici¨®n de t¨ªtulos. No podemos defraudar tras el esfuerzo de compra", relata Lidia Pitzalis, responsable de prensa y eventos de XBOX, la consola de Microsoft, para Espa?a.

Este ¨¢nimo por no defraudar se refleja en las ¨²ltimas apuestas de esta firma, una mezcla de innovaci¨®n y viejos conocidos. Kinect, el sensor de movimiento que prescinde del mando de control, tendr¨¢ juegos basados en cl¨¢sicos de la cultura pop: Star Wars, Disneyland y Barrio S¨¦samo. La intenci¨®n es clara, buscar una experiencia m¨¢s social, interactiva y, sobre todo, que permita compartir un rato en familia.

Sony intenta dejar atr¨¢s la desconfianza de los usuarios tras los ataques a su red de juego online, PlayStation Network, con una nueva consola port¨¢til, PS Vita, todav¨ªa sin fecha definida, con un precio desde 249 euros y un claro gui?o a los m¨®viles: tendr¨¢ conexi¨®n 3G y wifi para jugar en red. El buque insignia, PS3, se reforzar¨¢ con Uncharted 3, una secuela muy esperada.

El caso m¨¢s extra?o quiz¨¢ sea el de Nintendo que considera GamesCom como un evento de ¨¢mbito local. Mientras tanto, los accionistas urgen a la veterana empresa japonesa para que Mario, Luigis y la Princesa Peach lleguen a los m¨®viles, algo a lo que Nintendo nunca ha accedido. Sus creaciones se juegan en su hardware, quiz¨¢ por eso son ¨²nicos, respetados y, en muchos casos, imitados. El problema es que las ventas han dejado de acompa?arles.

Las novedades del cat¨¢logo son, sobre todo, los cl¨¢sicos renovados para Nintendo 3DS, la consola port¨¢til cuyo precio se acaba de recudir en un 30% para intentar un reflote. Mario Kart 7, Super Mario 3D Land y Luigi's Mansion 2 sacan a los h¨¦roes marca de la casa para reforzar al aparato de bolsillo.

GamesCom va m¨¢s all¨¢. Al margen de los tres grandes de la industria nuevas formas de juegos comienzan a tocar el pastel. La Conferencia de Desarrolladores de Videojuegos (GDC) que tiene lugar dos d¨ªas antes de GamesCon deja claras algunas tendencias: Los juegos online y los sociales, tanto en ordenador como para m¨®viles y tabletas. Zynga, los creadores de Farmville, la adictiva granja virtual de Facebook, quiz¨¢ sea el paradigma a seguir. Mart¨ªn Moncalvillo, portavoz de GDC para Espa?a, cree que es una manera alternativa de hacer negocio: "Desde 2005 el negocio se enquist¨® y las empresas buscaron alternativas en los juegos casuales, como Angry Birds, por ejemplo. Otra parte de la industria prefiri¨® hacer juegos online, de gran calidad, que florecen con peque?os pagos por complementos", matiza.

Lo que es indudable es que la ciudad se vuelca con el ocio digital: desde marquesinas, a taxis, anuncios, papeleras y banderas por todo el casco viejo anunciando juegos por venir.