¡°Quien pone datos personales en la Red tiene derecho a recuperarlos"

Viviane Reding, vicepresidenta de la Comisi¨®n Europea responsable de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadan¨ªa, presenta este mi¨¦rcoles en Bruselas un plan para que los ciudadanos puedan ejercer al m¨¢ximo su derecho a la protecci¨®n de datos personales. La legislaci¨®n vigente se remonta a 1995, cuando apenas era perceptible el porcentaje de informaci¨®n que era telecomunicada. Hoy esa informaci¨®n supera el 97%, Internet se ha convertido en una jungla y el 72% de los europeos se dice preocupado por el uso que las compa?¨ªas hacen de sus datos personales. La venidera protecci¨®n de datos consagra el derecho al olvido. ¡°Quien ha puesto informaci¨®n personal en la Red tienen derecho a recuperarla porque es suya¡±, dice la comisaria. Su planes, que incluyen un reforzamiento de la agencias nacionales de protecci¨®n de datos y un mismo reglamento de aplicaci¨®n a escala comunitaria, ser¨¢n efectivos hacia 2015.

Pregunta. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece el caso de Megaupload? ?Se ha hecho bien?

Se acab¨® la fragmentaci¨®n, la incertidumbre legal

Se acab¨® la fragmentaci¨®n, la incertidumbre legal

P. Parece m¨¢s f¨¢cil robar propiedad intelectual en Internet que hacerlo de una estanter¨ªa.

R. S¨ª, pero el delito es el mismo tanto si se roba un libro en la librer¨ªa como si se roba en Internet. Lo que ocurre es que es mucho m¨¢s dif¨ªcil protegerse de un delito en Internet. La Comisi¨®n est¨¢ trabajando en la cuesti¨®n del copyright en Internet. Pero no hay que confundir la cuesti¨®n de copyright con la cuesti¨®n de la protecci¨®n de datos.

La ley europea se aplica a compa?¨ªas que operan con clientes europeos en el mercado europeo

P. ?Puede la protecci¨®n de datos personales afectar a la libertad de informaci¨®n?

R. En Europa tenemos varios derechos: derecho a libertad de prensa o de Internet, si quiere: derecho a la informaci¨®n; tenemos derecho a la privacidad, y derecho de propiedad intelectual. Ninguno de esos derechos es absoluto. Tiene que equilibrarse con los dem¨¢s. Los derechos de protecci¨®n de datos de que gozan los periodistas est¨¢n fuera de esta ecuaci¨®n para que pueden trabajar: necesitan recolectar datos para hacer informaci¨®n sobre una determinada persona. Que es distinto a que yo quiera que mis datos personales est¨¦n protegidos: tengo derecho a recuperarlos de donde est¨¦n. No puedo cambiar una historia o la historia, no puedo intervenir en un poema o en una pintura, ni en los archivos de un peri¨®dico.

P. ?Qu¨¦ pasa con los errores que se repiten en los medios de comunicaci¨®n?

R. Hay que dar prioridad a la libertad de informaci¨®n. El que los periodista escriban algo equivocado sobre un ciudadano no tienen que ver con protecci¨®n de datos, si no con errores. Y para eso hay otras leyes. No es de lo que se trata con la nueva legislaci¨®n para la protecci¨®n de datos personales.

P. ?Qu¨¦ es?

R. Aqu¨ª estamos ante el caso de una persona que da sus fotos u otro tipo de informaci¨®n personal a una plataforma, que la pone en la Red y que, llegado un momento, esa persona desea recuperarla. Quien la ha puesto en la red tiene el derecho a recuperar esa informaci¨®n, que es suya. Eso es lo que queremos garantizar.

?P. ?C¨®mo se hace?

R. Muy f¨¢cil. La persona debe saber qu¨¦ pasar¨¢ cuando pone su informaci¨®n en una plataforma en la red o se la da a alguien. La compa?¨ªa debe informar detalladamente al ciudadano de lo que har¨¢ con la informaci¨®n recibida. Para que la persona sea consciente de lo que hace. Si quiere recuperar los datos, que son de su propiedad, los recibir¨¢ en un formato ¨²til. Si eso no ocurre, puede ir a la autoridad nacional de protecci¨®n de datos ---que ahora van a ser convertidas en una aut¨¦ntica autoridad--- que analizar¨¢ el caso y buscar¨¢ solucionar el problema.

?P. ?Desaparecen para siempre tales datos de esa plataforma, de modo que se consagra el derecho al olvido?

R. Es lo que dice la ley. Si no ocurre, se podr¨¢ denunciar el caso a la autoridad nacional, que deber¨¢ resolver el problema.

?P. ?Qu¨¦ pasa si entregamos nuestros datos a una compa?¨ªa multinacional?

R. Si la compa?¨ªa es europea, la persona interesada lleva el caso a la agencia de protecci¨®n de su pa¨ªs de residencia que entrar¨¢ en contacto con su equivalente en el pa¨ªs en que est¨¦ la otra compa?¨ªa. Cuando lo hayan resuelto entre ellas, el ciudadano recibir¨¢ la comunicaci¨®n correspondiente.

?P. ?Y si la compa?¨ªa est¨¢ radicada fuera de Europa?

R. Si esa compa?¨ªa se dirige al mercado europeo, necesita tener una oficina en Europa y a trav¨¦s de ella estar¨¢ relacionada con una autoridad de protecci¨®n de datos. Por ejemplo, Facebook. Su sede europea est¨¢ en Irlanda. En ese caso la oficina de protecci¨®n de datos irlandesa es la que interviene. Si alguien tiene problemas en Espa?a con esa compa?¨ªa, acude a la oficina de protecci¨®n de datos espa?ola que entrar¨¢ en contacto con la irlandesa para solventar el conflicto

?P. ?En el caso de una compa?¨ªa que opera solo en Estados Unidos, donde quedan registrados los datos, por ejemplo de una transacci¨®n comercial?

R. La ley europea se aplica a compa?¨ªas que operan con clientes europeos en el mercado europeo y que tiene base legal en Europa, con independencia de la nacionalidad de la compa?¨ªa. Los facebooks, googles y microsofts del mundo tienen sedes en Europa y est¨¢n sometidas a la legislaci¨®n europea.

?P. ?Por qu¨¦ ahora interviene la Comisi¨®n Europea ahora, cuando ya el 97% de la informaci¨®n telecomunicada lo es por Internet, y no antes? Las leyes de protecci¨®n de datos de la UE se remontan a 1995.

R. Me ha llevado dos a?os de intenso trabajo, de consultas con compa?¨ªas, de discusiones con Gobiernos y parlamentarios para llegar a esta propuesta. Tuve la suerte de empezar este trabajo en el momento en que el Tratado de Lisboa y la Carta de Derechos Fundamentales establecieron que la protecci¨®n de datos personales es un principio del derecho comunitario. A la luz de Lisboa se ve que el sistema que tenemos deja mucho que desear, que hace falta una ley que proteja los datos personales de verdad. Ahora ya no es una cuesti¨®n de voluntad pol¨ªtica. Ahora es una obligaci¨®n legal. Con la experiencia de la ley de 1995 se ve la fragmentaci¨®n del mercado y que si queremos tener un continente digital, que es lo que necesitamos para el crecimiento econ¨®mico, unido a la obligaci¨®n de proteger a la persona, que ahora no lo est¨¢ debidamente, hace falta una legislaci¨®n b¨¢sica que se pueda aplicar. La directiva vigente se ha aplicado de distinta manera en distintos pa¨ªses y por las distintas autoridades de protecci¨®n de datos. Por eso se necesita una reglamentaci¨®n que se aplica uniformemente en toda la Uni¨®n Europea. Se acab¨® la fragmentaci¨®n, la incertidumbre legal. La cuesti¨®n relativa a materias propias de seguridad, de Interior, transferencia de datos de polic¨ªas, entre autoridades judiciales¡­ es una cuesti¨®n entre Gobiernos. De ah¨ª la necesidad de una directiva.

?P. ?Para cuando ser¨¢ este plan una realidad pr¨¢ctica?

R. Espero que la reglamentaci¨®n est¨¦ aprobada para finales del 2013 y luego los Gobiernos necesitaran un par de a?os m¨¢s, para poner en marcha las autoridades de protecci¨®n de datos reforzadas.

?P. La agencia de protecci¨®n de datos del pa¨ªs en que la compa?¨ªa tenga sus operaciones principales ser¨¢ la que intervenga en conflicto. ?C¨®mo se mide o qu¨¦ significa ¡°principales operaciones¡±?

R. Imaginemos Telef¨®nica, que tiene sus principales operaciones en Espa?a, pero tiene muchas filiales en Europa. Ser¨¢ controlada por una autoridad de protecci¨®n de datos, la espa?ola. Quien tenga un problema con una filial en un tercer pa¨ªs reclamar¨¢ ante la autoridad de ese pa¨ªs que remitir¨¢ el caso a la autoridad espa?ola.

?P. ?Deber¨¢n informar las compa?¨ªas a los clientes de que les instalan 'cookies' de terceras compa?¨ªas?

R. De eso no se trata aqu¨ª. Lo aborda una directiva sobre comercio electr¨®nico de hace unos a?os.

?P. ?Pueden compartir datos compa?¨ªas ajenas entre s¨ª?

R. No est¨¢ prohibido, pero la compa?¨ªa debe informar al cliente de lo que va a hacer con los datos que le proporciona. Hoy no se sabe nada de lo que pasa con esos datos que entregamos.

?P. ?Es posible compartir datos entre compa?¨ªas pertenecientes a una misma corporaci¨®n?

R. Se puede hacer, pero de manera sensata.