Facebook sabe lo que nos callamos

Teclear, releer, pero, en el ¨²ltimo instante, el arrepentimiento o la duda y el mensaje no se env¨ªa. Una rutina muy com¨²n para cualquier internauta, pero que en la red social Facebook tiene su eco, aunque sea internamente. La autocensura es el ¨²ltimo objeto de an¨¢lisis por parte del invento de Mark Zuckerberg. Las cosas que no decimos, pero que se piensan primero y se teclean despu¨¦s en la caja dedicada a cambiar el estado, tambi¨¦n se registran en Facebook.

Durante el verano de 2012 Facebook guard¨® todos los ¡®estados fallidos¡¯ de 3,9 millones de usuarios. Facebook no oculta, por ejemplo, que recopile muchos otros datos, como las peticiones de amistad que nunca se aceptan. La intenci¨®n de la red social es conocer mejor a su p¨²blico, aunque esto signifique registrar lo que nunca se publica, y entre ello se incluye tratar como "error del servicio" que sus usuarios se autocensuren.

Adam Kramer, cient¨ªfico de datos de Facebook, y Sauvik Das, becario durante el verano de 2012, son los autores de un an¨¢lisis de 15 p¨¢ginas en el que arrojan algunas conclusiones interesantes. Para empezar, consideraron ¡°autocensura¡± cualquier actualizaci¨®n de m¨¢s de cinco caracteres que no se public¨® una vez pasados 10 minutos. En el documento insisten en que se puso el foco en el lenguaje HTML y en las interacciones con el formularios, pero no en las palabras clave o en la clase de contenido que nunca sali¨® a la luz. Es decir, no leyeron los mensajes inexistentes.

Durante los 17 d¨ªas que dur¨® la fase de toma de datos, el 71% de los usuarios estudiados escribieron al menos un estado, un comentario o ambos, y no lo publicaron. De media, 4,52 estados y 3,2 comentarios. Entre los motivos para pens¨¢rselo dos veces y no darle al clic, los investigadores? encontraron motivos pol¨ªticos, bien por no encontrar afinidad en la audiencia potencial, o por cuestiones relacionadas con el g¨¦nero.

Descubrieron que las posibilidades para autocensurarse son menores si se trata de un comentario al estado de un amigo, pero mucho m¨¢s probable si se comienza una conversaci¨®n en el perfil propio. ?El motivo? Seg¨²n los investigadores reside en que se dan respuestas m¨¢s sucintas y con m¨¢s conocimiento de la audiencia potencial. Al mismo tiempo, observaron que el nivel de censura era mucho menor en el caso de los grupos de participaci¨®n restringida, m¨¢s acotados y con m¨¢s afinidad entre participantes.

Este estudio es una versi¨®n del conocido ¡°abandono del carrito de la compra¡± en las web de comercio electr¨®nico y ha servido, por ejemplo, para que el servicio de Menlo Park mejore su forma de presentar las noticias. La guerra de la atenci¨®n y, en consecuencia, la de la interacci¨®n, es primordial para el desarrollo de Facebook.

"Nuestros resultados indican que el 71% de los usuarios tiene alg¨²n nivel de autocensura en el ¨²ltimo minuto", se?alan los investigadores, que lo achacan a la teor¨ªa de la "audiencia percibida" por el que va a enviar su post o comentario. "Las personas con m¨¢s fronteras en sus temas se censura m¨¢s; los hombres se censuran m¨¢s que las mujeres; as¨ª como la gente que ejerce mayor control sobre su audiencia, frente a los que tienen una red de contactos m¨¢s diversa en edad e ideas pol¨ªticas, que se censura menos".? Tambi¨¦n concluyen que cuanto m¨¢s j¨®venes, menos censura y a m¨¢s amigos del sexo opuesto, m¨¢s autocensura.