¡°El grafeno no sustituir¨¢ al silicio¡±

Barcelona es este a?o la capital europea de la innovaci¨®n. La conferencia de Andrea Ferrari, investigador de la Universidad de Cambridge, es uno de los platos fuertes de esta celebraci¨®n acad¨¦mica. El profesor de origen italiano es una de las eminencias mundiales del grafeno, un material que tiene todos los n¨²meros para revolucionar el mundo. En 2010, dos investigadores de origen ruso se llevaron el Premio Nobel de F¨ªsica por obtenerlo en el laboratorio.

Si en el siglo XIX el paradigma consist¨ªa en qui¨¦n era el m¨¢s fuerte y en el siglo XX de qui¨¦n era el m¨¢s r¨¢pido, esta l¨¢mina compuesta por una sola capa de ¨¢tomos de carbono -200 veces m¨¢s resistente que el acero- seguro que puede vencer el reto del siglo XXI: la b¨²squeda del m¨¢s vers¨¢til. El comit¨¦ Nobel explic¨® en su d¨ªa que un gato podr¨ªa descansar en una hamaca hecha de grafeno y pesar¨ªa menos que uno de sus bigotes. Sus aplicaciones van desde cambiar nuestra ropa hasta mejorar los viajes especiales.

Ferrari es presidente del Consejo Ejecutivo de la Graphene Flagship, uno de los programas insignia de la investigaci¨®n cient¨ªfica europea, tal vez la m¨¢s grande en la historia. Cuenta con la friolera de un bill¨®n de euros de presupuesto hasta el a?o 2020. Su objetivo es impulsar la investigaci¨®n en este material y crear sinergias entre los centros de excelencia, las empresas, las instituciones y la sociedad.

¡°El grafeno es un producto europeo, vienen de Asia y de Am¨¦rica a estudiar qu¨¦ estamos haciendo. Solo si apostamos decididamente por ¨¦l podremos mantener el liderazgo. No es mucho dinero si piensas en que empresas poderosas como Samsung, Intel, Texas Instruments invierten miles de millones de euros en desarrollo e investigaci¨®n en grafeno. En Europa no tenemos empresas de ese calado y por esto tenemos que ayudar a nuestras compa?¨ªas a que rompan la brecha entre el laboratorio y la industria¡±, explica el cient¨ªfico.

En los ¨²ltimos a?os, el mundo ha visto el nacimiento y el ocaso de miles de compuestos supuestamente revolucionarios. Ferrari es muy honesto. ¡°Alguna gente dice que en un material milagroso; nosotros, no. La ventaja del grafeno es que es uno de los pocos que puede tener una aplicaci¨®n casi en cualquier cosa que te puedas imaginar. Su potencial es tan, tan grande que es dif¨ªcil pensar que no funcionar¨¢¡±, apunta.

En Espa?a, hay algunas empresas que ya venden productos que lo incluyen, como la firma vasca Graphenea o el grupo Antol¨ªn, l¨ªder en pol¨ªmeros. Adem¨¢s, el Estado tiene uno de los mayores expertos en el material, el profesor Francisco Guinea, investigador del CSIC en el Instituto de Ciencias de Materiales de Madrid. El Flagship, de hecho, tiene dos socios espa?oles: el Instituto de Nanociencia y Nanotecnolog¨ªa (ICN2)) y el Instituto de Ciencias Fot¨®nicas (ICFO). ¡°Espa?a est¨¢ en la primera l¨ªnea de la investigaci¨®n y el desarrollo¡±, resume Ferrari.

El cient¨ªfico se?ala tres momentos importantes en el desarrollo del material en la pr¨®xima d¨¦cada. Las aplicaciones que est¨¢n m¨¢s cerca del mercado y de las que se hablar¨¢ en cinco a?os son las que har¨ªan m¨¢s flexibles las pantallas t¨¢ctiles para ordenadores y m¨®viles, nuevos dispositivos para purificar el agua y aumentar la conductividad de ciertos pol¨ªmeros. O la conocida raqueta de tenis de grafeno que utilizan maestros como Novak Djokovic. En una d¨¦cada, explica Ferrara, ser¨¢ el momento de las aplicaciones ¨®pticas y fot¨®nicas. En algunos laboratorios ya experimentan con ¨¦l para mejorar los lentes de contacto. Y, de ah¨ª en adelante, ser¨ªa el tiempo para los chips y la microelectr¨®nica.

¡°El grafeno no sustituir¨¢ al silicio¡±, advierte con vehemencia Ferrari. Desde su descubrimiento, existe cierto debate sobre cu¨¢l ser¨¢ la convivencia de estos dos materiales. ¡°La forma de combinarlos es una de las principales preocupaciones del Flagship, es una de las ¨¢reas donde vamos a poner ¨¦nfasis y en junio anunciaremos algunos proyectos interesantes¡±, revela. El intercambio s¨ª se dar¨¢, sin embargo, en productos electr¨®nicos baratos, de empaque de productos o textiles, por ejemplo. ¡°Un sensor con silicio en una etiqueta es demasiado caro, el grafeno es m¨¢s econ¨®mico¡±, apunta.

En un momento de recortes, el cient¨ªfico cree que Europa har¨¢ el esfuerzo. ¡°Todos los europeos tenemos que preguntarnos con qu¨¦ queremos competir en los pr¨®ximos 15 a?os. ?Con innovaci¨®n o con mano de obra precaria? Si la respuesta es lo segundo, pues tenemos que empezar a decirle adi¨®s a los derechos laborales y nuestro estilo de vida. Tampoco podemos confiarle el futuro al turismo¡±, critica. ¡°Nuestro Graphene Valley es una red de centros de excelencia, que comparten informaci¨®n y que est¨¢n a menos de dos horas en avi¨®n¡±, apunta.