Revivir el terror nazi en 3D
Un historiador y un neur¨®logo proponen reconstruir digitalmente 100 campos de concentraci¨®n de la II Guerra Mundial
El ¨²ltimo soldado de la Primera Guerra Mundial, Claude Stanley Choules, falleci¨® en Australia en 2011. Ten¨ªa 110 a?os. Con ¨¦l se cerr¨® la era de los supervivientes de las trincheras. Este a?o se conmemoran los 70 a?os del final de la II?Guerra Mundial y se acerca tambi¨¦n el final de la ¨¦poca de los testigos. Los ¨²ltimos supervivientes del Holocausto se van apagando y, con ellos, el recuerdo directo de aquel genocidio.
Mientras preparaba La lista de Schindler, hace dos d¨¦cadas, Steven Spielberg impuls¨® un proyecto para grabar a todos los supervivientes posibles de la Shoah, que se lleva a cabo de forma que se puedan generar hologramas con sus im¨¢genes. Pero el historiador alem¨¢n Haboo Knoch y el psic¨®logo y neur¨®logo holand¨¦s experto en inteligencia artificial Paul Verschure, consideran que no es suficiente. Creen que la memoria necesita un espacio para perdurar y est¨¢n impulsando el proyecto Future Memory Foundation para reconstruir de forma digital, en tres dimensiones, 100 campos de concentraci¨®n y exterminio nazis.
¡°Spielberg ha hecho miles de entrevistas, pero no ha solucionado el problema¡±, asegura Verschure, que dirige en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona el proyecto Specs ¡ªun estudio, con robots, de la percepci¨®n y las emociones de los seres humanos, entre ellas la memoria¡ª. ¡°El testigo eterno que queremos crear permitir¨¢ que las futuras generaciones puedan tener ese espacio, percibir lo que ocurri¨® en el planeta¡±.
Acaban de constituir la fundaci¨®n, con sede en Holanda y pretenden conseguir financiaci¨®n para recrear primero 100 espacios del horror. Cada uno de ellos cuesta unos 50.000 euros y unos tres o cuatro meses de trabajo. Pero su idea es ampliar el mapa del terror nazi hasta los 45.000 lugares que fueron utilizados en toda Europa por el sistema represivo hitleriano, desde campos de la muerte hasta guetos, cuarteles de la Gestapo o centros de tortura.
El proyecto presenta enormes desaf¨ªos tecnol¨®gicos, pero tambi¨¦n hist¨®ricos. ¡°De muchos sitios tenemos muy poca informaci¨®n y casi no quedan testigos¡±, se?ala Verschure. ¡°Sobibor ¡ªuno de los seis campos de exterminio que los nazis construyeron en Polonia¡ª fue totalmente destruido y s¨®lo ahora arque¨®logos polacos y brit¨¢nicos han logrado localizar el lugar donde estaban las c¨¢maras de gas y los crematorios¡±.
Knoch, experto en nazismo del Instituto de Historia de la Universidad de Colonia, y Verschure inauguraron en 2012 una reconstrucci¨®n digital en 3D del campo de concentraci¨®n de Bergen-Belsen. Desde 2014, adem¨¢s, entregan iPads a grupos de visitantes que, mientras recorren el campo, ven en la pantalla lo que ocultan espacios que ahora son un bosque o una pradera: los barracones, las alambradas, el patio donde los deportados eran obligados a formar durante horas para el recuento... La visita virtual del campo es una experiencia tan did¨¢ctica como aterradora.
"Como neur¨®logo, s¨¦ que la memoria necesita lugares¡±, concluye Verschure. ¡°Los espacios cuentan la historia. Nuestro enfoque est¨¢ basado en que sabemos c¨®mo funciona la memoria. En Espa?a nos enfrentamos a un problema similar. Toda la historia directa de la Guerra Civil est¨¢ desapareciendo¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.