Apple vs. FBI, un debate ¡®falaz¡¯
El autor argumenta que un Estado de Derecho no puede tolerar que haya ¡°espacios de impunidad¡±, que se sustraigan a la aplicaci¨®n de las leyes y a la acci¨®n de la polic¨ªa y de los tribunales
En l¨®gica, una falacia es un argumento que parece v¨¢lido, pero no lo es, seg¨²n la Wikipedia, "Algunas falacias se cometen intencionalmente para persuadir o manipular a los dem¨¢s, mientras que otras se cometen sin intenci¨®n debido a descuidos o ignorancia. En ocasiones las falacias pueden ser muy sutiles y persuasivas, por lo que se debe poner mucha atenci¨®n para detectarlas¡±.
El pasado jueves, el Departamento de Justicia del Gobierno de EE UU, en su ¨²ltima respuesta a Apple en la lucha sobre el cifrado del iPhone, calific¨® su ret¨®rica como "falaz" y "corrosiva" de las instituciones que salvaguardan los derechos¡±. Y, aunque no sea muy ¡°pol¨ªticamente correcto¡± decirlo, creo que ten¨ªa raz¨®n. Intentar¨¦ analizar algunos argumentos que se han dado y que, en mi opini¨®n, tienen trampa:
1. Apple vs. FBI
El primer argumento falaz o enga?oso es que este conflicto es entre Apple y el FBI, o entre Apple y el Gobierno de los EE UU, cuando resulta que es una jueza federal la que ha ordenado a Apple, en el marco de una investigaci¨®n criminal, que permita acceder al FBI al contenido del iPhone del terrorista de San Bernardino (California), que asesin¨® a 14 personas.
2. Seguridad vs. Privacidad
El segundo argumento falaz o enga?oso es que este caso enfrenta a la seguridad nacional y a la privacidad de todos nosotros. No es verdad, la balanza de la justicia siempre?pesa dos bienes jur¨ªdicos, que en este caso son: la seguridad nacional y la privacidad de un individuo, investigado por un juez, no s¨®lo por 14 asesinatos sino por su relaci¨®n con una organizaci¨®n terrorista. ?Qu¨¦ bien debe prevalecer?
Est¨¢ claro que un juez puede ordenar levantar el secreto de las comunicaciones, lo que incluye tanto los ¡°datos de tr¨¢fico¡±, como su contenido, y tanto mientras ¨¦stas se producen como una vez que han terminado
3. Libertad vs. Seguridad
El tercer argumento falaz o enga?oso es el famoso ¡°binomio¡± o confrontaci¨®n de libertad vs. seguridad, como si fueran dos valores incompatibles. Nada m¨¢s lejos de la realidad: no hay libertad sin seguridad. Un ciudadano no tiene, por ejemplo, libertad de circulaci¨®n en una ciudad, si esa ciudad no es segura. Y no hablamos s¨®lo de una seguridad f¨ªsica, o tecnol¨®gica, sino tambi¨¦n de una seguridad jur¨ªdica.
?Qu¨¦ pasar¨ªa en Espa?a?
Si este caso hubiera sucedido en Espa?a (puede suceder) y tuvi¨¦ramos que aplicar las leyes espa?olas, habr¨ªa que empezar por recordar lo que dice el art¨ªculo 18.3 de la Constituci¨®n: ¡°Se garantiza el secreto de las comunicaciones y, en especial, de las postales, telegr¨¢ficas y telef¨®nicas, salvo resoluci¨®n judicial¡±, como una de las consecuencias del derecho fundamental a la intimidad de todos los espa?oles.
Por lo tanto, en sentido contrario, est¨¢ claro que un juez puede ordenar levantar el secreto de las comunicaciones, lo que incluye tanto los ¡°datos de tr¨¢fico¡±, como su contenido, y tanto mientras ¨¦stas se producen como una vez que han terminado (si bien existe alguna sentencia del TS que matiza que, una vez finalizadas ¨¦stas, ya no se afectar¨ªa el secreto de las comunicaciones, sino el derecho a la intimidad).
Finalmente, la Ley de Enjuiciamiento Criminal, en su ¨²ltima reforma de 5 de octubre de 2015, regula c¨®mo debe ser la autorizaci¨®n judicial (principios de especialidad, idoneidad, excepcionalidad, necesidad y proporcionalidad), estableciendo que se podr¨¢ ordenar a cualquier persona que facilite la informaci¨®n que resulte necesaria, bajo apercibimiento de incurrir en delito de desobediencia (art¨ªculo 588 sexies c.5).
Conclusiones
1. Un juez no es la NSA
El argumento m¨¢s falaz o enga?oso de todos es justificar la oposici¨®n de Apple a colaborar con el FBI en una investigaci¨®n criminal concreta, instruida por un juez, trayendo a colaci¨®n el espionaje indiscriminado de la NSA, puesto al descubierto por Snowden. Si la NSA actu¨® sin cobertura legal, cometi¨® un ¡°delito continuado¡±. Pero eso no justifica en absoluto que un juez no pueda investigar delitos concretos.
2. La posibilidad frente a la certeza
Otro argumento falaz o enga?oso es que, si se crea una ¡°puerta atr¨¢s¡± en el sistema de encriptaci¨®n del iPhone, ¨¦sta puede caer en ¡°malas manos¡±; cuando resulta que, frente a esta posibilidad, existe la certeza de que los criminales y terroristas utilizan los sistemas de encriptaci¨®n m¨¢s fuertes para comunicarse, precisamente porque la polic¨ªa y los jueces no pueden acceder a los datos de tr¨¢fico y a los contenidos.
3. La privacidad no es impunidad
El ¨²ltimo argumento falaz o enga?oso es que para Apple representar¨ªa una carga desproporcionada desarrollar un nuevo software que tuviera esa puerta de atr¨¢s; cuando el problema no es ¨¦se, sino la existencia de un sistema de encriptaci¨®n tan fuerte que impide la investigaci¨®n de un delito por la polic¨ªa, con una orden judicial. Apple tendr¨ªa que haberlo previsto desde el principio, o lo tendr¨¢ que hacer ahora.
No es una cuesti¨®n tecnol¨®gica, es una cuesti¨®n de concepto y principios jur¨ªdicos: un Estado de Derecho no puede tolerar que haya ¡°espacios de impunidad¡±, que se sustraigan a la aplicaci¨®n de las leyes y a la acci¨®n de la polic¨ªa y de los tribunales.
Borja Adsuara Varela es profesor y abogado, Experto en Derecho y Estrategia Digital
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