?De verdad funcionan las pulseras de actividad diaria?

Que el deporte es bueno para la salud es algo sabido. Adem¨¢s, si nuestro ejercicio f¨ªsico es monitorizado por pulseras de actividad y se incluye una recompensa econ¨®mica, nos incentiva (o eso creemos) a¨²n m¨¢s. Sin embargo, dos estudios publicados en los ¨²ltimos d¨ªas aclaran que el uso de estas pulseras es irrelevante y no se traduce en beneficio para nuestra salud.

La primera investigaci¨®n, publicada?por la revista The Lancet Diabetes & Endocrinology, ha durado un a?o y han participado 800 personas de entre 21 y 65 a?os de empresas de Singapur. Los cient¨ªficos diferenciaron entre cuatro grupos: el primero serv¨ªa como ¡°grupo de control¡± al que no se le dio ning¨²n instrumento frente a los otros tres que s¨ª recibieron una pulsera, de la marca Fitbit. La diferencia radicaba en que el grupo tres y cuatro obten¨ªan dinero, pero este deb¨ªa destinarlo a una obra de caridad de su preferencia.

En total, el segundo grupo recorri¨® 8.550 pasos diarios, el tercero que recib¨ªa el dinero camin¨® 11.010 pasos y el cuarto grupo registr¨® 9.280 pasos diariamente.

Ninguno de los 800 participantes tuvo que hacer un esfuerzo f¨ªsico extra, sino ¡°lo que ellos quer¨ªan, lo que ellos considerasen¡±, afirma el jefe de la investigaci¨®n, Eric Finkelstein, de la Escuela M¨¦dica Duke-NUS de Singapur. Destaca que ¡°la actividad f¨ªsica aument¨® en los participantes en 16 minutos por semana aunque el uso de la pulsera no propici¨® que los voluntarios bajaran de peso o mejoraran su presi¨®n sangu¨ªnea¡±.

El uso de la pulsera no ayud¨® a que los voluntarios bajaran de peso o mejoraran su presi¨®n sangu¨ªnea

Durante los primeros seis meses todos los grupos recibieron un incentivo econ¨®mico si caminaban una determinada cantidad de pasos (entre 50.000 y 70.000), excepto el primer grupo, de contro¡¯, que solo se le proporcion¨® informaci¨®n sobre la actividad f¨ªsica. Los seis meses posteriores, los voluntarios pod¨ªan elegir si seguir usando la pulsera, pero sin aliciente econ¨®mico. Alrededor del 40% de los participantes abandon¨® el estudio en los seis primeros meses del a?o y solo un 10% continu¨® hasta el final.

Los participantes del grupo tres que dispon¨ªa de la pulsera y de la compensaci¨®n econ¨®mica para ellos mismos caminaron mucho m¨¢s durante los seis meses pagos. Luego, su actividad f¨ªsica disminuy¨®. Ante esto, el profesor Finkelstein sostiene que ¡°cualquier estrategia para motivar deber¨ªa ser durante un largo periodo de tiempo para generar mejoras notables y beneficios para la salud¡±.

En obesos

El segundo estudio que analiza la efectividad de las pulseras ha sido publicado en la revista JAMA (The Journal of The American Medical Association, por sus siglas en ingl¨¦s) y aclara que el uso de estas pulseras es ineficaz para perder peso.

Los anal¨®gicos perdieron casi 6 kilos. Los participantes tecnol¨®gicos solo perdieron 3,5 kilos

El estudio, que ha durado dos a?os y en el que han participado 470 personas de entre 18 y 35 a?os con problemas de obesidad, determina que el hecho de usar herramientas que controlan nuestra actividad no supone un est¨ªmulo para adelgazar.

Los cient¨ªficos estadounidenses diferenciaron entre dos grupos, el anal¨®gico y el tecnol¨®gico. A cada persona se le asign¨® una dieta cal¨®rica dependiendo de su altura y peso. A partir del sexto mes, el primer grupo deb¨ªa registrar todas sus actividades f¨ªsicas y la dieta en una libreta, mientras que los tecnol¨®gicos contaron con la ayuda de estas pulseras de seguimiento. Para ambos conjuntos se estableci¨® una rutina de ejercicio: 100 minutos por semana y luego un aumento progresivo hasta llegar a las cuatro veces por semana, con un total de 300 minutos.

Los anal¨®gicos llegaron al estudio con un peso de 95,2 kilogramos y acabaron con 89,3 lo que supone una p¨¦rdida de casi 6 kilos. Los participantes tecnol¨®gicos comenzaron el estudio con un peso medio de 96,3 kilos y finalizaron con 92,8. Es decir, tras dos a?os de experimento solo perdieron 3,5 kilos.