La guerra de los ¡®bots¡¯ se libra en Wikipedia
Hasta 4,7 millones de los cambios que se hacen en la enciclopedia digital son correcciones que los robots se hacen continuamente entre s¨ª
Cada vez son m¨¢s las p¨¢ginas web que incorporan bots, programas inform¨¢ticos que se comportan como humanos, para realizar tareas como responder a las preguntas de los usuarios, hacer publicidad o abrir cuentas de correo electr¨®nico. Pero, a pesar de los esfuerzos y de su uso extendido,?a¨²n est¨¢n muy lejos de actuar en la Red como lo har¨ªa una persona. Esa es la conclusi¨®n a la que ha llegado un grupo de ingenieros inform¨¢ticos del Instituto Alan Turing de Reino Unido, que ha estudiado el comportamiento de estos robots en Wikipedia y ha descubierto que hasta 4,7 millones de las ediciones de los art¨ªculos son correcciones que los bots se hacen constantemente entre s¨ª, cayendo en una especie de edici¨®n sin fin nada productiva.
Los bots que trabajan en Wikipedia se encargan de tareas que pueden resultar tediosas para las personas, como identificar y deshacer casos de vandalismo, a?adir enlaces, corregir la ortograf¨ªa y guardar la concordancia sint¨¢ctica de las oraciones. El problema viene cuando las ediciones que hacen est¨¢n condicionadas por el pa¨ªs y el lenguaje en el que han sido programados y est¨¢n influidas por algunos aspectos culturales. Por ejemplo, algunas de estas reversiones vienen por cambiar ¡°Palestina¡± por ¡°territorio palestino¡± o ¡°Golfo P¨¦rsico¡± por ¡°Golfo Ar¨¢bico¡±, y as¨ª con varios millones de conceptos que no coinciden en las distintas regiones del mundo.?
Adem¨¢s, est¨¢n programados para revisar los cambios que hacen cada cierto tiempo, lo que ayuda a que se produzcan enfrentamientos con otros bots que hacen exactamente lo mismo y se corrigen entre s¨ª cuando encuentran que su ¨²ltima edici¨®n ha vuelto a ser modificada. En los cambios que hacen las personas no se dan este tipo de conflictos porque los usuarios de Wikipedia rara vez vuelven a comprobar si los datos que corrigieron est¨¢n actualizados.
Una de las curiosidades que muestra el estudio es que el n¨²mero de ediciones depende de en qu¨¦ idioma est¨¦ escrito el texto. Los escritos en alem¨¢n son los que menos modificaciones sufren, con una media de 24 por entrada. En el lado contrario se encuentran los art¨ªculos en portugu¨¦s, que acumulan hasta 185 reversiones por art¨ªculo. Seg¨²n los expertos, una de las posibles soluciones a estas batallas interminables es que Wikipedia permita el uso de bots cooperativos que puedan gestionar los desacuerdos y permitan que las tareas se puedan cumplir de manera eficiente.
El estudio demuestra que los bots?pueden trabajar de formas totalmente impredecibles. "El mundo online se ha convertido en un ecosistema de robots y, sin embargo, nuestro conocimiento sobre c¨®mo interact¨²an estos agentes automatizados es muy pobre", reconoce?Taha Yasseri, una de las responsables de la investigaci¨®n.?
Yasseri habla de todo un ecosistema y no exagera: un estudio de 2009 estim¨® que ese a?o los bots generaron el 24% de todos los tuits que se publicaron; una compa?¨ªa de an¨¢lisis de audiencias encontr¨® que el 54% de los anuncios mostrados entre 2012 y 2013 fueron vistos por robots en lugar de por humanos; y, de acuerdo a una compa?¨ªa de seguridad de la Red, los bots realizaron el 48,5% de las visitas a las p¨¢ginas web de 2015.?
"La Red?se ha convertido en un ecosistema de robots y, sin embargo, nuestro conocimiento sobre c¨®mo interact¨²an es muy pobre"?
El n¨²mero de incidencias provocadas por estos programas inform¨¢ticos se ha incrementado de manera constante en los ¨²ltimos a?os, lo que indica, seg¨²n los investigadores, que sus creadores?no est¨¢n haciendo lo suficiente por mejorarlos o que no han sabido identificar los problemas que generan. ?
Algunos conflictos, como los de Wikipedia, pueden considerarse inocuos. Otros son m¨¢s problem¨¢ticos y virales, como el que sucedi¨® en Twitter en marzo de este a?o, cuando Microsoft tuvo que retirar a uno de su bots por tuitear mensajes de contenido racista, sexista y xen¨®fobo. Hab¨ªa sido programado para contestar preguntas y establecer conversaciones con los m¨¢s j¨®venes de la red y aprendi¨® de ellos este comportamiento.
A pesar de los fallos y la falta de eficacia que demuestran en muchas ocasiones, los bots siguen siendo una opci¨®n muy ¨²til en las tareas conversacionales. El ejemplo m¨¢s claro es Siri, la asistente de Apple que resuelve las dudas del usuario a trav¨¦s de mensajes de voz. Pero tambi¨¦n hay otros casos, como el dise?ado por un estudiante de la Universidad de Stanford, que est¨¢ programado para ayudar a las personas a recurrir las multas de aparcamiento. En un a?o ha conseguido anular 160.000 multas y ya funciona en Londres y Nueva York.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.