Arranca la revoluci¨®n de los coches sin conductor
Tesla, Uber, Google y los principales fabricantes de la industria del motor pisan el acelerador para implantar una gran innovaci¨®n en el transporte en la que los veh¨ªculos ser¨¢n aut¨®nomos
Sale del garaje, se incorpora al carril, frena ante los sem¨¢foros y las se?ales de stop, cambia de carril y ajusta la velocidad para mantener la distancia de seguridad, encuentra su destino y aparca tras descartar previamente la plaza destinada a personas de movilidad reducida. Los nuevos veh¨ªculos de Tesla Motors ya son capaces de todo esto sin que haya un conductor al volante, aunque todav¨ªa es pronto para los consumidores.
La compa?¨ªa californiana actualiza el hardware de todos sus veh¨ªculos, incluyendo el Model 3 que ser¨¢ puesto a la venta en 2017, para que sean completamente aut¨®nomos. Para ello, se emplean ocho c¨¢maras que aportan una visi¨®n de 360 grados capaces de percibir cualquier obst¨¢culo a una distancia de 250 metros alrededor del coche. ?stas son complementadas por doce sensores de ultrasonidos y un radar capaz de "ver" lo que los ojos no pueden a trav¨¦s de la niebla, el polvo, la lluvia y la noche. El cerebro, un procesador, que ahora es 40 veces m¨¢s r¨¢pido, tratar¨¢ toda la informaci¨®n en tiempo real evaluando a trav¨¦s de sus algoritmos y bases de datos ante qu¨¦ reaccionar y c¨®mo hacerlo.
El objetivo es poner en carretera un coche "completamente aut¨®nomo", tal y como indic¨® la compa?¨ªa de Elon Musk. Para ello, ha de ser calificado como un veh¨ªculo con autonom¨ªa de nivel 5.
Los veh¨ªculos completamente aut¨®nomos permitir¨¢n "una reducci¨®n de costes en el transporte inmensa y unas carreteras mucho m¨¢s seguras"
Existen cinco grados, seg¨²n la Sociedad de Ingenieros de Automoci¨®n, organizaci¨®n enfocada en las industrias comerciales especializadas en la construcci¨®n de los veh¨ªculos:
Nivel 1. El veh¨ªculo asiste al conductor en una sola tarea, que habitualmente es el regulador de velocidad o autocrucero.
Nivel 2. El sistema es capaz de mantener el coche dentro del carril, girar y mantener la distancia de seguridad, pero es el conductor el que tiene que responder si hay alg¨²n problema y ha de estar constantemente atento al volante. El mejor ejemplo de una autonom¨ªa de nivel 2 es el Autopilot de Tesla, aunque muchos usuarios y autoridades crean que ofrece en su publicidad funciones de un nivel superior.
Nivel 3. Se caracteriza por el poder de decisi¨®n del veh¨ªculo. Ya no solo acelera, gira y frena. Detecta la situaci¨®n, la estudia y decide. Esto incluye, por ejemplo, la capacidad de adelantar a un veh¨ªculo para mantener la velocidad deseada. Aun as¨ª, el conductor necesita estar atento.
Nivel 4. El humano es prescindible y el veh¨ªculo opera de forma completamente aut¨®noma, pero siempre que est¨¦ en un entorno controlado como una mina, una f¨¢brica o un recinto universitario.
Nivel 5. Es el objetivo de Tesla, Uber o Google: veh¨ªculos que sepan d¨®nde est¨¢n, a d¨®nde tienen que ir y c¨®mo hacerlo. La ¨²nica interacci¨®n con humanos se puede dar ¨²nicamente a trav¨¦s de una aplicaci¨®n de m¨®vil para pedir que recoja al usuario.
Es uno de los hitos principales para muchas de las compa?¨ªas mejor valoradas del mundo por sus claros beneficios en los negocios de transporte y en la movilidad de los ciudadanos. Para Tesla, los veh¨ªculos completamente aut¨®nomos permitir¨¢n "una reducci¨®n de costes en el transporte inmensa y unas carreteras mucho m¨¢s seguras".
Es clave tambi¨¦n para Uber, la empresa emergente de transporte privado que ha puesto en jaque al sector del taxi en todo el mundo
En cuanto a la seguridad, Elon Musk no dud¨® en criticar y acusar a los periodistas de "matar personas" en la rueda de prensa del pasado mi¨¦rcoles por su negativa cobertura del primer y ¨²nico accidente mortal de un veh¨ªculo de su marca en Florida con el Autopilot activado. El sudafricano siempre se ha caracterizado por su defensa a capa y espada de los veh¨ªculos aut¨®nomos, los cuales reitera como estad¨ªsticamente m¨¢s seguros que los conductores humanos. "Es el ¨²nico accidente ocurrido en los m¨¢s de 210 millones de kil¨®metros que han recorrido nuestros veh¨ªculos con el Autopilot activado", indic¨® en un comunicado publicado en junio.
Es m¨¢s barato porque los usuarios que no tengan un veh¨ªculo propio disfrutar¨¢n de servicios bajo demanda a un precio menor que el actual, ya que se descuenta el chofer. Tesla present¨® en julio su plan para transformar el coche de sus clientes en su propia flota para ofrecer un servicio de transporte con el objetivo de "acelerar una nueva movilidad". Mercedes-Benz, perteneciente al grupo alem¨¢n Daimler AG, tambi¨¦n present¨® una propuesta de futuro similar junto a su primera gama de veh¨ªculos completamente el¨¦ctricos.
Es clave tambi¨¦n para Uber, la empresa emergente de transporte privado que ha puesto en jaque al sector del taxi en todo el mundo. La reducci¨®n de costes y la posibilidad de que los veh¨ªculos operen 24 horas al d¨ªa los siete d¨ªas de la semana abre un gran abanico de posibilidades de expansi¨®n al servicio.
"Estamos comenzando a convertirnos en una compa?¨ªa enfocada en la rob¨®tica", dijo Travis Kalanick, director ejecutivo de Uber, en la conferencia anual Vanity Fair Summit celebrada en San Francisco. Tambi¨¦n asegur¨® que tienen a "cientos de cient¨ªficos trabajando en los problemas que esta transformaci¨®n presenta".
El principal reto de las tecnol¨®gicas de Silicon Valley y compa?¨ªas del motor alemanas y japonesas es hacer frente a la regulaci¨®n
Hace dos a?os, la compa?¨ªa californiana comenz¨® a explorar su entrada en el desarrollo de flotas de veh¨ªculos aut¨®nomos. Hoy es su foco principal ¡ªjunto a sus constantes batallas legales¡ª. En septiembre, Uber comenz¨® a operar una peque?a flota de veh¨ªculos aut¨®nomos en Pittsburg, Pensilvania. Los pasajeros que lo soliciten ser¨¢n atendidos por un conductor que solo est¨¢ en el asiento del piloto por motivos de seguridad y legales. El coche es el que conduce.
Estos movimientos, al igual que los de Tesla y Google, tienen el objetivo de recopilar millones de datos, situaciones y conflictos con los que "ense?ar" a sus coches, que son, al fin y al cabo, robots gobernados por sus algoritmos de inteligencia artificial. A m¨¢s kil¨®metros, m¨¢s seguridad.
El principal reto de las tecnol¨®gicas de Silicon Valley y compa?¨ªas del motor alemanas y japonesas es hacer frente a la regulaci¨®n. Tesla se ha visto envuelta en un gran hurac¨¢n medi¨¢tico tras el accidente mortal, que ha puesto en entredicho la fiabilidad de su asistente de conducci¨®n en China, y en Alemania, donde se plantea prohibir a Tesla que emplee el t¨¦rmino Autopilot en la promoci¨®n de sus veh¨ªculos por "confundir al consumidor, haci¨¦ndole creer que puede desplazarse sin prestar atenci¨®n al volante". La administraci¨®n Obama apoya el desarrollo de estos sistemas ya que "Pueden salvar decenas de miles de vidas al a?o".
Las compa?¨ªas aseguran que los veh¨ªculos aut¨®nomos ser¨¢n m¨¢s seguros y podr¨¢n revolucionar la forma en el que el ser humano se traslada, pero los gobiernos necesitan pruebas y cientos de miles de millones de kil¨®metros recorridos. Todav¨ªa no estamos ah¨ª, aunque muchos est¨¦n pisando el acelerador.
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