As¨ª son las conexiones de los diputados en Twitter: el crecimiento de Vox polariza a¨²n m¨¢s el Congreso
Los v¨ªnculos en la red social de los representantes p¨²blicos reci¨¦n elegidos refleja su aparente falta de inter¨¦s por las ideas de los oponentes
La cuenta de Twitter de cada diputado dice algo de sus preferencias. Pero todas agregadas reflejan el panorama pol¨ªtico espa?ol: cada partido mira, sobre todo, su ombligo. Y si levantan la vista y miran un poco hacia fuera, se fijan en los que ideol¨®gicamente est¨¢n m¨¢s cerca. Twitter es una herramienta que permite leer opiniones afines y ajenas, pero nuestros representantes quieren saber poco de sus aquellos de sus colegas que tienen otras ideas. Y de quien menos quieren saber es de los diputados de Vox. Aunque el desinter¨¦s es compartido: tampoco Vox mira mucho hacia otros miembros del Congreso.
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La imagen refleja las cuentas que cada diputado sigue y las que le siguen. El crecimiento de Vox y la disipaci¨®n de Ciudadanos revelan un Parlamento a¨²n m¨¢s segregado que en las elecciones de abril, cuando EL PA?S ya public¨® este ejercicio de comprobaci¨®n con Twitter. Hace unos meses, el dibujo era de un centro vac¨ªo y dos bloques enfrentados pero no alejados, con un Vox que viv¨ªa detr¨¢s de PP y Ciudadanos. Ahora Vox ha mandado a los restos de Ciudadanos a ocupar el centro. "Ha cambiado la forma del grafo. El espacio vac¨ªo entre derecha e izquierda se ha hecho m¨¢s grande. Los nodos conectados se atraen y los desconectados se repelen", explica Victoriano Izquierdo, cofundador de Graphext, creadores del software. El trabajo se ha hecho a partir de las cuentas de 302 diputados, 13 m¨¢s que en abril.
La fuerza que m¨¢s atrae a dos diputados es que se sigan entre s¨ª. A continuaci¨®n, que sigan o sean seguidos por otro. De ah¨ª que el funcionamiento de los partidos se vea tan claro: los diputados siguen a sus afines. Y de ah¨ª tambi¨¦n, que los que miran m¨¢s a otros partidos (o son mirados) est¨¦n m¨¢s centrados. As¨ª, los l¨ªderes de todas las formaciones est¨¢n m¨¢s cerca del centro.
Pero el dibujo permite ver muchos m¨¢s detalles sobre el comportamiento de los grupos y el car¨¢cter de algunos diputados. Es obvio que no todos los pol¨ªticos usan su cuenta igual, pero no deja de ser destacable el modo en que manejan o manejaban ¨Csi ahora se la llevan asistentes¨C su perfil.
Santiago Abascal solo sigue a gente de PP y Ciudadanos, con la excepci¨®n de una diputada del PSOE, Rafi Cresp¨ªn
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro S¨¢nchez, es el m¨¢s seguido por todos los diputados. De ah¨ª que su figura sea mayor: el tama?o de la imagen de cada pol¨ªtico no es su n¨²mero de seguidores, sino el total de seguidores que tiene en el Congreso. S¨¢nchez solo sigue a un diputado que no le siga: Aitor Esteban, del PNV. Esteban, a su vez, solo sigue a un diputado de otro partido: la presidenta del Congreso, Meritxell Batet.
Pero los diputados m¨¢s alejados de sus colegas son los de Vox. Hay que tener en cuenta que muchos son reci¨¦n llegados, pero su separaci¨®n del resto es clara, m¨¢s cuando uno de sus anclajes en la pasada legislatura era la gente de Ciudadanos, que se han diluido. Ignacio Garriga, diputado de Vox por Barcelona, es su vig¨ªa. Es el ¨²nico miembro del partido que mira a m¨¢s de una docena de colegas de otros partidos. Santiago Abascal solo sigue a gente del PP y Ciudadanos y a la diputada del PSOE Rafi Cresp¨ªn, de C¨®rdoba. Una prueba de la posible integraci¨®n o no de Vox en el Congreso ser¨¢n sus relaciones en Twitter.
Nadie se sigue mutuamente entre Vox y Unidas Podemos. La formaci¨®n ultra tampoco sigue a independentistas, excepto uno: la ¨²nica relaci¨®n mutua en Twitter en el Congreso de los Diputados entre Vox e independentistas es la de Macarena Olona y Gabriel Rufi¨¢n. El l¨ªder de ERC no tiene ninguna relaci¨®n con el PP aunque s¨ª sigue a Cayetana ?lvarez de Toledo y Guillermo Mariscal. Por la importancia que puede tener en este tiempo de negociaci¨®n para la investidura Rufi¨¢n y Pedro S¨¢nchez no se siguen.
In¨¦s Arrimadas es la figura que ha quedado en el centro, entre otras cosas porque se ha quedado sin un grupo fuerte que la arrastre hacia su interior. La ca¨ªda de Ciudadanos hasta los 10 diputados hace que la fuerza que les une no sea mayor que la que les vincula a otros partidos. De ah¨ª que caiga en el centro, un lugar donde antes no hab¨ªa nadie. Puede ser una premonici¨®n. En la anterior legislatura, la diputada ligeramente m¨¢s centrada era Ana Oramas, de Coalici¨®n Canaria.
El ¨²nico diputado que parece haber hecho un esfuerzo sistem¨¢tico para seguir a la mayor¨ªa de sus colegas es Francisco Polo, del PSOE. Su cargo de Secretario de Estado para el Avance Digital le avala como uno de los pioneros en Twitter (tiene cuenta desde agosto de 2007). Ese fervor por conectar le lleva a estar al lado del presidente del Gobierno y a ser el socialista que m¨¢s mira a otros partidos, tambi¨¦n a Vox. Aunque con cerca de 5.000 personas seguidas, le ser¨¢ dif¨ªcil estar atento a todo. El software de Graphext no analiza las cuentas de diputados que segu¨ªan a m¨¢s de 15.000 perfiles.
Adem¨¢s de los cerca de 50 diputados sin perfil, los hay que tienen la cuenta de florero. Alfredo Sancho, del PSOE de Huesca, solo es seguido por su colega de provincia, Bego?a Nasarre. Esa falta de conexiones hace que el algoritmo le coloque mal, lejos de su partido. Es un despistado en Twitter.
??igo Errej¨®n (M¨¢s Pa¨ªs) y Joan Baldov¨ª (Comprom¨ªs) siguen m¨¢s o menos donde estaban. Errej¨®n parece uno m¨¢s de Unidas Podemos. Nadie parece hab¨¦rselo tomado tan mal en su antigua formaci¨®n como para dejarle de seguir. Las relaciones en Twitter no calcan las reales, pero pueden ser un indicador.
Destaca un diputado que oculta su nombre tras un mensaje raro: #Amor#Uni¨®n#Trabajo#Constancia#SentidoCom¨²n#Espa?a. Su nick es @vicpiedra, se llama V¨ªctor Guido Gonz¨¢lez Coello de Portugal y es el diputado de Vox por Salamanca. El ¡°piedra¡± de su apodo quiz¨¢ ser porque gestionaba una empresa de m¨¢rmoles.
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