NationBuilder, la ¡®startup¡¯ que lleva las riendas digitales de los partidos pol¨ªticos
L¨ªderes mundiales, sin importar su ideolog¨ªa, han adoptado cada vez m¨¢s este software de gesti¨®n de campa?as electorales por su dominio de los datos, sencillez y precio asequible
NationBuilder se ha convertido en un partido pol¨ªtico mundial sin que nadie lo vea en un Parlamento o una papeleta. Esta startup, desarrollada en Los ?ngeles por Jim Gilliam en 2009, ofrece una plataforma online con la que organizar campa?as electorales. Emmanuel Macron, Boris Johnson, Donald Trump, los brexiters y Jacinda Ardern han contado con su software para alcanzar el poder. Sin importar la ideolog¨ªa, se trata de una herramienta indispensable para aquellos l¨ªderes que anhelan movilizar a las bases como punto de partida hacia el ¨¦xito. ¡°Las herramientas digitales son esenciales cuando se construye una comunidad, sea en pol¨ªtica o fuera de ella, porque necesitas conocer a las personas y asegurarte de tener la capacidad de escalar tu iniciativa¡±, explica Lea Endres, CEO de NationBuilder.
La propuesta de partida resulta sencilla, sobre todo en una era en la que ning¨²n estratega pol¨ªtico renuncia a la segmentaci¨®n de votantes ¨Cah¨ª quedan los ejemplos de Jair Bolsonaro, Matteo Salvini o Vox¨C. Desde la pantalla de inicio, los responsables de la campa?a pueden crear perfiles tanto de partidarios como de activistas que se suscriben a su web e interact¨²an en Twitter. Integran esta base de datos con informaci¨®n de las redes sociales y las listas electorales y la ampl¨ªan con correos electr¨®nicos, mensajes de texto y llamadas de voz. Incluso permite organizar encuestas seg¨²n la ubicaci¨®n de los votantes objetivo. ¡°Las personas deben poseer sus propios datos, por lo que nuestro software incluye herramientas de privacidad avanzadas que priorizan el consentimiento¡±, asegura Endres.
Por poco m¨¢s de 25 euros al mes, 180 en el caso de grupos, cualquier particular puede crear una web de campa?a donde incluir una interfaz de donaci¨®n, un programa de email masivo y diferentes soluciones para recopilar una base de datos de simpatizantes. ¡°Mientras alguien podr¨ªa coordinar a miles de personas, esta infraestructura digital lo ayuda a distribuir el liderazgo y adaptar la experiencia que brinda a cada donante, voluntario o votante potencial¡±, sostiene Endres, que dirige la startup desde 2017, un a?o antes de que Gillian falleciera.
En Espa?a, solo Ahora Madrid ¨Crenombrado M¨¢s Madrid el a?o pasado¨C ha apostado por NationBuilder. Parte de la responsabilidad de que Manuela Carmena lograra la alcald¨ªa de la capital en mayo de 2015 surgi¨® a m¨¢s de 9.300 kil¨®metros de distancia. Endres prefiere no desvelar c¨®mo puso en marcha toda esta estrategia, que, evidentemente, gan¨® al resto de adversarios. En su opini¨®n, solo representa la trascendencia adquirida por las herramientas digitales para llegar a la sociedad y coordinar a los propios partidos. ¡°Lo mismo da que est¨¦s al frente de un partido que ha existido durante d¨¦cadas o que lo hayas creado de cero, como le sucedi¨® a Carmena¡±, zanja.
Los ¨¦xitos electorales son evidentes a lo largo y ancho del mundo, pero el del actual presidente de Francia, Emmanuel Macron, le emociona especialmente. No duda en comentar que pr¨¢cticamente fue un hito acerca de c¨®mo las plataformas han revolucionado la velocidad y escala a la que se construyen movimientos. En poco m¨¢s de medio a?o, lanz¨® su candidatura, orquest¨® un partido, La R¨¦publique En Marche, y se convirti¨® en nuevo inquilino del palacio del El¨ªseo. ¡°Su victoria, tanto en las presidenciales como en las legislativas, demuestra lo que es posible cuando se distribuye una infraestructura digital. Y esto ir¨¢ a m¨¢s en el futuro, especialmente a medida que las personas reconozcan que usar las redes sociales no es lo mismo que crear una infraestructura organizada duradera¡±, precisa.
La doble cara de no tener ideolog¨ªa
Para NationBuilder no existe ni derecha ni izquierda. Su agnosticismo ideol¨®gico lo mismo le sirve para trabajar con Donald Trump que para GreenPAC, una ONG canadiense que organiz¨® un centenar de debates para elegir a su candidato para los comicios federales de octubre del a?o pasado. Su mantra particular es dar acceso al poder a comunidades que han estado generalmente sin representaci¨®n. En su caso, mezclar negocios y pol¨ªtica siempre implica ganar. En Reino Unido vistieron tanto el traje Brexiter como el de quienes luchaban por permanecer en la Uni¨®n Europea. ¡°Hemos visto a numerosos candidatos ganar procesos hist¨®ricos. Desde Abdi Warsame, el primer miembro somal¨ª del consejo municipal de Minneapolis, hasta Jagmeet Singh, la primera persona de color en dirigir un partido nacional en Canad¨¢¡±, enfatiza Endres.
M¨¢s espinoso resulta el terreno de la vulneraci¨®n de la privacidad durante las campa?as y las estrategias agresivas. NationBuilder vive de lo digital, donde esta realidad lleva imponi¨¦ndose durante los ¨²ltimos a?os. La CEO evita la pol¨¦mica. Para nada quiere una comparaci¨®n con el esc¨¢ndalo de Cambridge Analytica; ni tampoco con la propaganda microsegmentada, utilizada sobre todo por movimientos populistas. Para ella no dejan de ser unas fisuras de la democracia ante un entorno tan cambiante como el tecnol¨®gico. ¡°Las distorsiones de la realidad, las campa?as de desinformaci¨®n y la manipulaci¨®n de los votantes son antit¨¦ticas con el buen liderazgo. Estamos comprometidos en ayudar a los l¨ªderes a construir relaciones reales con sus seguidores y a fomentar las mejores pr¨¢cticas en lo que respecta tanto a la privacidad como al consentimiento¡±, recalca.
Aunque la herramienta sea ¨²nica, la legislaci¨®n de protecci¨®n de datos difiere casi en cada pa¨ªs. NationBuilder ha tenido que adaptar el producto seg¨²n qui¨¦n llamara a su puerta. En Francia, sin ir m¨¢s lejos, Macron no podr¨¢ volver a emplear la funci¨®n Match del software, que usaba correos de los seguidores para recuperar informaci¨®n p¨²blica de sus perfiles de Facebook, Twitter y LinkedIn, tanto por las normas nacionales como por el Reglamento comunitario. ¡°La creaci¨®n de este tipo de estructuras ha de ser profundamente respetuoso con las personas. Tienes que saber c¨®mo quieren ser contactadas, aprender lo que m¨¢s les importa e interactuar de una forma que sea trascendente para ellas¡±, concluye.
Un software para combatir la crisis del coronavirus
Ante una realidad atropellada por la crisis del coronavirus, NationBuilder ha decidido volcarse en su lucha. Gratuitamente, ha puesto su software a disposici¨®n de quien lo necesite para frenar la propagaci¨®n y reunir recursos vitales en manos de aquellos que m¨¢s lo necesiten. Como argumenta su CEO, Lea Endres, esto se conseguir¨¢ m¨¢s r¨¢pidamente si involucramos online a la mayor cantidad de personas posibles. ¡°Quienes coordinan respuestas de emergencia o servicios esenciales pueden usar nuestra herramienta con el fin de comunicarse con sus comunidades de manera m¨¢s r¨¢pida y eficiente. En Estados Unidos, por ejemplo, las organizaciones locales y estatales est¨¢n construyendo una base de voluntarios y conectando voluntarios sanitarios con los hospitales¡±, comenta.
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