La gran parodia democr¨¢tica de Facebook
Para tomar una decisi¨®n de acuerdo con los valores establecidos, hace falta establecer los valores
El Consejo asesor de Facebook, esa instituci¨®n que Mark Zuckerberg describi¨® originalmente como su Tribunal Superior, revisa casos muy emblem¨¢ticos para determinar si las decisiones de la empresa se han tomado de acuerdo con los valores establecidos. En su d¨¦cimo caso, el consejo ha ratificado una decisi¨®n que hasta la canciller Angela Merkel ...
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El Consejo asesor de Facebook, esa instituci¨®n que Mark Zuckerberg describi¨® originalmente como su Tribunal Superior, revisa casos muy emblem¨¢ticos para determinar si las decisiones de la empresa se han tomado de acuerdo con los valores establecidos. En su d¨¦cimo caso, el consejo ha ratificado una decisi¨®n que hasta la canciller Angela Merkel calific¨® de ¡°problem¨¢tica¡±: suspender las cuentas de Donald Trump tras el asalto al Capitolio de EE UU.
¡°Los impactantes sucesos de las ¨²ltimas 24 horas demuestran claramente que el presidente Donald Trump pretende usar el tiempo que le queda en el cargo para boicotear la pac¨ªfica y leg¨ªtima transici¨®n de poder a su sucesor elegido, Joe Biden¡±, explic¨® Zuckerberg desde la plataforma el 7 de enero de 2021. Parece una decisi¨®n l¨®gica, derivada de una infracci¨®n evidente. En realidad es la decisi¨®n unilateral y arbitraria de un magnate de 36 a?os de bloquear al presidente electo de los EE UU en la misma plataforma que le ayud¨® a llegar al poder.
Para tomar una decisi¨®n de acuerdo con los valores establecidos, hace falta establecer los valores. Los de Facebook son m¨¢s apropiados para un discurso de Miss Universo que para un Tribunal superior: ¡°S¨¦ audaz, conc¨¦ntrate en el impacto; mu¨¦vete r¨¢pido, se abierto y construye valor social¡±. Para infringir las normas hace falta que haya normas y que sean claras, precisas e iguales para todos. Las de Facebook dicen que el contenido debe ser aut¨¦ntico, que no puede degradar, intimidar, excluir o silenciar a otros ni vulnerar la privacidad de otros. Dicen que eliminar¨¢n ¡°el contenido que enaltece la violencia o celebre el sufrimiento o la humillaci¨®n de otras personas¡±. Salvo que sea ¡°de inter¨¦s period¨ªstico y relevante para el p¨²blico¡±. Era el caso del Donald Trump.
Hasta el 7 de enero de 2021, el presidente hab¨ªa usado la plataforma para negar la existencia del cambio clim¨¢tico y la gravedad de la covid-19, para llamar violadores y criminales a los mexicanos, para cuestionar la legitimidad del voto por correo, para desmotivar el voto latino, para incentivar la violencia contra los afroamericanos durante las manifestaciones por el asesinato de George Floyd. Para acusar al partido dem¨®crata de haberle robado las elecciones y pedirle al vicepresidente que anulara el resultado electoral. Hizo campa?as de deshumanizaci¨®n contra los migrantes de centroam¨¦rica, anuncios contra la Antifa salpicados de simbolog¨ªa nazi, ataques degradantes, miserables y machistas contra sus oponentes, Hillary Clinton y Joe Biden. En todos esos casos, el inter¨¦s p¨²blico se hab¨ªa impuesto sobre el social.
¡°No es nuestro trabajo intervenir cuando hablan los pol¨ªticos ¡ªexplicaba el Vicepresidente de Asuntos Globales y Comunicaci¨®n, Nick Clegg, en el Atlantic Festival de Washington de 2019. ¡ª No sometemos el discurso de pol¨ªticos a nuestros verificadores independientes y lo permitimos como normal general incluso cuando infringe nuestras normas de contenido¡±. No mencion¨® un detalle importante: las campa?as pol¨ªticas suponen m¨¢s del 3% de ingresos de Facebook en EE UU y Trump hizo m¨¢s campa?a en Facebook que en ning¨²n otro lugar.
El d¨ªa de las elecciones, Trump se hab¨ªa gastado m¨¢s de 90 millones de d¨®lares en su campa?a de Facebook. Y Zuckerberg hab¨ªa repetido una y otra vez que las plataformas no pod¨ªan ejercer el poder de silenciar a un l¨ªder elegido democr¨¢ticamente. Solo cambi¨® de opini¨®n cuando Trump hab¨ªa quemado sus posibilidades de volver a la pol¨ªtica, ejerciendo un poder que en democracia solo tienen los jueces, de la misma forma arbitraria y opaca con la que define valores o implementa las normas. El consejo que valida ahora la decisi¨®n de Zuckerberg, es la ¨²ltima adquisici¨®n en una parodia de justicia construida para disfrazar un poder sin democracia que se reserva todos los derechos sin asumir ninguna responsabilidad.