Conducir con una pantalla por volante

Con solo cuatro palabras, y en ingl¨¦s basta con tres, queda dicho casi todo lo esencial de este coche: tecnolog¨ªa de camuflaje ¨®ptico. Para quien viaja en ¨¦l, el veh¨ªculo se transparenta, desaparece camuflado tras una gran pantalla a modo de ventanal.

El veh¨ªculo, un aut¨¦ntico ejercicio de estilo (y de t¨¦cnica), se llama Kyocera Moeye y de ¨¦l llaman la atenci¨®n, al menos a primera vista, tres asuntos: su aspecto exterior ¡ªtal vez dise?ado, precisamente, para llamar la atenci¨®n¡ª, su gigantesca pantalla interior y su propio origen: lo ha creado Kyocera, compa?¨ªa que fabrica desde impresoras hasta tel¨¦fonos m¨®viles, pasando por c¨¦lulas solares, pantallas LCD y c¨¢maras digitales.

El prototipo ¡ªprobablemente se quedar¨¢ en eso¡ª quiere asemejarse por fuera a un modelo de los a?os cincuenta, pero se trata de un coche aut¨®nomo con una pantalla de casi 47 pulgadas: un asistente hologr¨¢fico con tecnolog¨ªa 3D. Aparte de que desde ella pueden manejarse los controles principales del coche y acceder a contenidos de entretenimiento, tiene la capacidad de camuflar todo el salpicadero y los pilares A (los que separan el parabrisas de las ventanillas delanteras) proyectando la imagen real de la carretera.

Los usuarios, si quieren, solo ver¨¢n frente a s¨ª un gran y falso ventanal al exterior. O el mapa o una pel¨ªcula. La pantalla elimina el volante y el habit¨¢culo es una c¨®moda estancia para viajar sin conductor, pero con sonido envolvente (mediante altavoces con vibraci¨®n piezoel¨¦ctrica, incluso en los reposacabezas) y aromas a la carta, hasta cinco a elegir. Sin apenas entrar en detalles, Kyocera solo cuenta que toda la tecnolog¨ªa del Moeye es propia.

REINVENTANDO LA CABINA

De los sistemas de conducci¨®n aut¨®noma no se sabe nada, por ejemplo, porque el meollo del Kyocera es su pantalla/salpicadero y lo que esto implica para el incierto futuro de los coches aut¨®nomos: las pantallas se quedar¨¢n con casi todo el protagonismo. Se intuye que ser¨¢n espacios para mostrar publicidad y proyectar pel¨ªculas o sensaciones. Harman, filial de Samsung, present¨® en el CES de Las Vegas de 2018 su enorme QLED MoodRoof, pensada para que los ocupantes de un veh¨ªculo automatizado simplemente miren al techo. El sistema Music Motivator, en funci¨®n de los estados de ¨¢nimo, se encargar¨¢ de elegir la banda sonora.

Ese mismo a?o, Harman mostr¨® su plataforma Digital Cockpit, un centro multimedia escalable con conectividad 5G que, en su m¨¢xima expresi¨®n, alcanza tambi¨¦n todo el salpicadero. Y con realidad aumentada, control por voz y respuestas h¨¢pticas: la pantalla t¨¢ctil da la impresi¨®n al usuario de que realmente est¨¢ presionando un bot¨®n f¨ªsico.

Ofrece lo mismo el prototipo del Kyocera: esa sensaci¨®n de que est¨¢ lo que en realidad no est¨¢, y viceversa. Igual que la conducci¨®n aut¨®noma: se esperaba para ya mismo, pero se demora.

Honda ha anunciado para marzo de 2021 la comercializaci¨®n del Legend con un nivel 3 de autonom¨ªa (conducci¨®n automatizada en autov¨ªas y autopistas hasta 60 km/h, es decir, en atascos), y lo mismo ofrece el reci¨¦n estrenado Mercedes Clase S. Y Tesla est¨¢ desarrollando una nueva versi¨®n del Autopilot (con un hardware 21 veces m¨¢s potente que el anterior), pero el estudio Digital Auto Report 2020, publicado en noviembre por la consultora PwC, rebaja la emoci¨®n: los coches aut¨®nomos de nivel 5 (capaces de circular completamente solos), representar¨¢n el 1% de los modelos vendidos en Europa... en 2035.