El coche aut¨®nomo arranca, pero no acelera
Una tecnolog¨ªa cara y complicada hace que los grandes fabricantes de coches trabajen unidos para desarrollar veh¨ªculos aut¨®nomos. Pero por mucho que corran, no veremos coches sin conductor hasta dentro de diez a?os.
La letan¨ªa de que ¨¦l coche del futuro ser¨¢ el¨¦ctrico, conectado y aut¨®nomo se recita por parte de dirigentes de la industria automovil¨ªstica desde hace a?os. Muchos de ellos, de haber acertado en los plazos que dieron en su d¨ªa ¨Ccitar un a?o redondo como el 2020 fue ¡°un cl¨¢sico¡± ¨C, ya deber¨ªan desplazarse en uno de aquellos coches del futuro convertidos en una realidad en movimiento. No es el caso.
Se contin¨²a trabajando para lograrlo. Pero esa meta ha resultado ser un objetivo m¨®vil, muy dif¨ªcil de lograr en los plazos que se aventuraron hace a?os. Es verdad que casi todas las grandes multinacionales del autom¨®vil disponen de prototipos de coches capaces de moverse aut¨®nomamente, intercambiar informaci¨®n con infraestructuras u otros veh¨ªculos y utilizar la electricidad para moverse. Hacerlo todo a la vez, resulta mucho m¨¢s dif¨ªcil. Y si buscamos un ejemplo que conjugue todos esos elementos y est¨¦ a la venta, hoy no lo encontramos. Y tardaremos en hacerlo.
Todav¨ªa en tacat¨¢
La industria del autom¨®vil lleva a?os investigando para lograr poner en el mercado coches aut¨®nomos, pero los primeros pasos son tan titubeantes como los de un beb¨¦ que comienza a caminar. El desarrollo de esta tecnolog¨ªa es muy caro y complejo, tanto que muy pocas compa?¨ªas lo afrontan en solitario y tienen que distribuir los elevados costes que genera. El pasado a?o fue destacable en alianzas. Ford y Volkswagen se unieron para invertir cada una de ellas 2.500 millones de euros en la empresa Argo, dedicada a desarrollar software, hardware e inteligencia artificial. Pero estas dos compa?¨ªas, junto a Toyota, General Motors, Uber, Honda, Lyft y Daimler, forman tambi¨¦n parte del Consorcio para la Seguridad del Veh¨ªculo Automatizado (AVSC por sus siglas inglesas) fundado en 2019. All¨ª todas ellas trabajan juntas ¡°para avanzar en pruebas m¨¢s seguras, desarrollo e implementaci¨®n de veh¨ªculos automatizados¡± como se explica en su p¨¢gina web. Incluso la todopoderosa due?a de Google, Alphabet ¨Cdesde 2009 desarrolla su propio coche aut¨®nomo y hoy lo hace a trav¨¦s de su filial Waymo¨C no afronta sola el desaf¨ªa y se ha asociado con fabricantes tradicionales de coches como Fiat Chrysler Automobiles (FCA) o Jaguar.
Y hoy, aunque se ha avanzado camino, todav¨ªa faltan millones de kil¨®metros de pruebas por recorrer, aunque los conductores ya podemos disfrutar de un primer paso en coches hoy ya se encuentran a la venta. Se traduce en lo que llamamos ayudas a la conducci¨®n, conocidas como ADAS (Advanced Driver Assistance Systems, en ingl¨¦s). Se trata de dispositivos como el frenado autom¨¢tico, mantenimiento de carril, y alertas por la presencia de objetos en la v¨ªa o la aproximaci¨®n de un veh¨ªculo, peat¨®n o ciclista. Pero, de momento, con toda esta tecnolog¨ªa solo hemos alcanzado el llamado ¡°nivel 2¡± de los 5 en que se divide la escala de conducci¨®n aut¨®noma seg¨²n los est¨¢ndares internacionales de la SAE (ver recuadro adjunto).
El verdadero desaf¨ªo, adem¨¢s de una mejora de los sistemas ya disponibles, lo encontramos en la percepci¨®n, comprensi¨®n e interpretaci¨®n del entorno y, sobre todo, en la toma de decisiones. Copiar al ser humano resulta tremendamente complicado. Un ejemplo: c¨®mo saber si ese peat¨®n que est¨¢ de espaldas en la acera se dar¨¢ la vuelta y cruzar¨¢ la carretera; y si lo hiciese ?qu¨¦ maniobra deber¨ªa realizar el coche? ?Intentar frenar, aunque no tenga espacio suficiente para detenerse? ?Esquivar al peat¨®n e impactar contra el coche que viene en sentido contrario? ?Chocar contra un coche aparcado?
A pesar de que la tecnolog¨ªa de c¨¢maras, sensores y radares han avanzado mucho, dista de que la recreaci¨®n del entorno sea perfecta y, sobre todo, de que se interprete debidamente. Sterling Anderson es ingeniero, estudi¨® en el MIT, donde ya se dedic¨® a la conducci¨®n automatizada a trav¨¦s de machine learning, y ha sido responsable del famosos sistema Autopilot de Tesla y del desarrollo del Model X de la marca. En el pasado CES de Las Vegas, Anderson contaba en un encuentro sobre automatizaci¨®n de veh¨ªculos que ¡°hace a?os se confiaba todo a los sistemas de visi¨®n computerizada. Ahora vemos que hay que atender m¨¢s cosas que hoy no tenemos, como sistemas de frenado, direcci¨®n o de seguridad redundantes¡±. Por eso ¨¦l cree que el coche aut¨®nomo perfecto tardar¨¢ todav¨ªa en llegar: ¡°En Aurora Innovation ¨Cla startup de la que es co-fundador¨C priorizamos el ¨¦xito a largo plazo, con un sistema de aprendizaje autom¨¢tico de ¨²ltima generaci¨®n para permitir una implementaci¨®n segura, extensible y escalable¡±.
En este mismo encuentro, Josh Switkes, ingeniero que desarroll¨® muchos de los algoritmos de los primeros asistentes de conducci¨®n de Volkswagen y que hoy tiene su propia empresa, Peloton Technology, afirma rotundo: ¡°Esto no va a ser como apretar el interruptor de la luz y que aparezcan coches aut¨®nomos en todo el mundo. Primero habr¨¢ veh¨ªculos de baja velocidad, despu¨¦s otros que ser¨¢n capaces se seguirse entre ellos, veremos una implantaci¨®n progresiva. Pero alcanzar un entorno completamente automatizado va para largo¡±.
?Cu¨¢ndo estar¨¢n en las carreteras?
Si hace a?os muchos de los dirigentes de la industria del autom¨®vil se lanzaron a pregonar que su marca tendr¨ªa coches aut¨®nomos en un plazo relativamente corto, (todos erraron en sus augurios) hoy ninguno se pronuncia de forma rotunda.
Como explicaba Switkes, la cuesti¨®n es ir paso a paso. As¨ª lo cree tambi¨¦n la consultora PricewaterhouseCoopers (PWC), que en su informe ¡°Digital Auto Report 2019¡± tambi¨¦n afirma que la introducci¨®n de este tipo de veh¨ªculos en el mercado ser¨¢ paulatina. Un primer hito lo tendr¨ªamos a partir de 2021, con la progresiva implantaci¨®n de peque?os minibuses de baja velocidad y hasta 12 plazas funcionando solo en zonas delimitadas. En Espa?a ya tenemos varios ejemplos de este tipo de veh¨ªculos, como el que se desplaza por el campus de la Universidad Aut¨®noma de Madrid.
Por lo que respecta a los turismos, PWC calcula que, si se clarifican la legislaci¨®n y las regulaciones t¨¦cnicas, veremos coches con un nivel 3 de autonom¨ªa a partir del a?o pr¨®ximo. En 2023 incluso llegar¨ªamos al nivel 4, si bien en este caso con restricciones todav¨ªa notables, como no poder sobrepasar los 130 km/h. La consultora cree hay que esperar al a?o 2028 para que veamos circular coches aut¨®nomos en las ciudades, si bien s¨®lo en ¨¢reas restringidas. Ser¨¢ en 2029 cuando lleguen a las calles y carreteras los coches de nivel 5 completamente aut¨®nomos, pudiendo sobrepasar los 130 km/h en autopista y sin cortapisas en los entornos urbanos y rurales.
Su llegada al mercado no significar¨¢ unas ventas masivas porque los primeros modelos aut¨®nomos ser¨¢n, como ha ocurrido con todas las innovaciones t¨¦cnicas, de segmentos premium y, por tanto, de mayor precio. Seg¨²n los c¨¢lculos de los responsables del PWC Digital Auto Report, en torno a un 25% de las matriculaciones de veh¨ªculos tendr¨¢n niveles 4 o 5 de autonom¨ªa en 2030. Entonces, las tecnolog¨ªas asociadas estrictamente a la conducci¨®n automatizada tendr¨¢n un mercado potencial por valor de 246.000 millones de euros anuales. Pero antes, en este 2020, las ADAS ya representar¨¢n un negocio de 73.000 millones, seg¨²n las previsiones de PWC.
Las ventajas de esperar
Ralf Luxmann, vicepresidente responsable de tecnolog¨ªa en el fabricante de componentes Continental Automotive, cree que ¡°al menos en los dos pr¨®ximos a?os una de nuestras mayores tareas es ense?ar a la gente qu¨¦ podr¨¢ hacer un coche aut¨®nomo y cu¨¢les son sus l¨ªmites¡±. Adem¨¢s, este ingeniero alem¨¢n avisa: ¡°Cuando empecemos no todo ser¨¢ perfecto desde el principio, como pasa hoy con los coches actuales, que tampoco lo son; pero sin duda resultar¨¢n mucho m¨¢s seguros que los actuales¡±.
El incremento de la seguridad vial ser¨¢, a priori, la gran ventaja de los coches aut¨®nomos ya que eliminar¨¢n por completo el error humano, presente en m¨¢s del 90% de los accidentes de tr¨¢fico. Por otro lado, el consumo eficiente de energ¨ªa y la reducci¨®n de emisiones se atisba como otro de los puntos a favor de estos veh¨ªculos. Adem¨¢s, no hay que olvidar el aspecto social, ya que podr¨¢n viajar solas personas ciegas o con movilidad reducida. Incluso podr¨¢n realizar tareas por s¨ª mismos, y podremos programar el coche para que acuda a buscar a un familiar o acercarse a la tienda a recoger la compra. Esto implicar¨¢ un ahorro de tiempo para los futuros due?os de estos coches.
Y m¨¢s tiempo de ocio se traduce en negocio. El coche aut¨®nomo puede ser un lugar donde ¡°inspirar nuevas emociones a trav¨¦s de experiencias revolucionarias de entretenimiento en el autom¨®vil¡±, en palabras de la multinacional japonesa de la electr¨®nica Sony. Su presidente, Kenichiro Yoshida, afirm¨® el pasado mes de enero que quer¨ªa ¡°redefinir el interior del coche con un lugar de entretenimiento¡±. El veh¨ªculo se convertir¨¢ en la quinta pantalla (tras el cine, televisi¨®n, ordenador y dispositivos m¨®viles) y, seg¨²n Manuel D¨ªaz, socio responsable de Automoci¨®n de PWC en Espa?a, ¡°ser¨¢ la puerta de entrada para nuevas oportunidades de ingresos y de construir marca; ser¨¢ el centro de una nueva econom¨ªa¡±.
En menos de una d¨¦cada veremos si, esta vez s¨ª, se cumplen los augurios y calles y carreteras ya albergr¨¢nan coches aut¨®nomos. Habr¨¢n solventado solventan algunos de los problemas que tenemos hoy pero, tambi¨¦n, surgir¨¢n otros. Por ejemplo, la p¨¦rdida de privacidad.
Las cinco marchas para llegar al coche aut¨®nomo
La norteamericana Sociedad de Ingenieros de Automoci¨®n (SAE por sus siglas en ingl¨¦s) defini¨® hace a?os los cinco niveles de conducci¨®n aut¨®noma que puede alcanzar un coche. La categorizaci¨®n va desde un te¨®rico ¡°nivel 0¡±, donde no existe ning¨²n tipo de ayuda, a un ¡°nivel 5¡± en el que el coche no necesita de la participaci¨®n humana para circular. Estas son las marchas que hay que ir engranando hasta llegar al coche completamente automatizado.
Nivel 1. Conducci¨®n asistida. El veh¨ªculo controla s¨®lo lateral o longitudinalmente la v¨ªa. El conductor y el sistema autom¨¢tico comparten el control del veh¨ªculo, como por ejemplo con el control de velocidad: el conductor maneja el volante y el coche acelera hasta unos km/h fijados.
Nivel 2. Conducci¨®n parcialmente automatizada. El conductor es responsable de supervisar la conducci¨®n y ha de estar dispuesto a intervenir en cualquier momento para recuperar el manejo, pero el coche controla lateral y longitudinalmente la conducci¨®n. Un ejemplo lo tenemos en los sistemas que son capaces de acelerar, frenar, mantener el carril y, mantener una distancia de seguridad previamente establecida. Es el estadio en el que nos encontramos en la actualidad.
Nivel 3. Conducci¨®n automatizada con condiciones. El veh¨ªculo es capaz de controlar todas las tareas, pero el conductor puede realizar otras tareas, pero tiene que estar en disposici¨®n de tomar el control en un corto lapso de tiempo si as¨ª es requerido. Un ejemplo: asistentes en atasco en que el coche acelera, frena, se detiene, arranca y mantiene el carril hasta una velocidad de 60 km/h. Algunas marcas, como Audi, ofrecen ya este sistema de forma condicionada, pero la legislaci¨®n no los permite en muchos pa¨ªses europeos.
Nivel 4. Conducci¨®n altamente automatizada. El veh¨ªculo controla todas las tareas sin necesidad de que el conductor est¨¦ atento.
Nivel 5. Conducci¨®n plenamente automatizada. El veh¨ªculo no necesita de la intervenci¨®n humana porque opera por s¨ª mismo. No hacen falta ni volante ni pedales.
Espa?oles y coche aut¨®nomo: tecn¨®filos y dispuestos a pagar m¨¢s
Los conductores espa?oles nos encontramos entre los m¨¢s entusiastas con la llegada del coche aut¨®nomo. Tambi¨¦n nos contamos entre los europeos m¨¢s resueltos a abrir la cartera para desembolsar un buen dinero por la nueva tecnolog¨ªa.
Seg¨²n el estudio de la consultora Deloitte ¡°2020 Global Automotive Consumer¡±, solo uno de cada tres espa?oles piensa que los coches aut¨®nomos ser¨¢n inseguros. Somos de los m¨¢s creyentes en la seguridad de esta tecnolog¨ªa, s¨®lo superados por los italianos donde el porcentaje baja a uno de cada cuatro encuestados. Mientras, la mitad de los belgas y brit¨¢nicos, muestras sus dudas en este apartado. En Alemania, el mayor mercado europeo de autom¨®viles, el 45% de los preguntados muestra su escepticismo frente a la seguridad de los futuros veh¨ªculos aut¨®nomos.
Sin embargo, llama la atenci¨®n que preguntados por si les molestar¨ªa que un coche aut¨®nomo fuese probado y desarrollado en carreteras abiertas cerca de donde vive, los espa?oles junto a los brit¨¢nicos (48% y 52%, respectivamente) seamos quienes mostramos mayor rechazo a esta posibilidad. Los italianos, con un 39% de respuestas negativas, son los m¨¢s dispuestos a toparse con un coche aut¨®nomo en pruebas cerca de su casa sin disgustarse.
Y ?qu¨¦ pasar¨¢ cuando toque rascarse el bolsillo? A d¨ªa de hoy, seg¨²n el estudio de Deloitte, espa?oles e italianos somos los m¨¢s dispuestos a pagar un extra de m¨¢s de 400 euros por acceder a la tecnolog¨ªa de los coches aut¨®nomos. As¨ª, al 38% de los encuestados espa?oles y al 41% de los italianos no les importar¨ªa pagar este importe adicional. En el extremo opuesto se encuentran los franceses y belgas, donde s¨®lo un 30% dice estar de acuerdo en desembolsar m¨¢s dinero.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.