La UE alarga las negociaciones para acordar la primera gran ley de inteligencia artificial del mundo
Tras casi 24 horas de reuniones, se ha logrado un primer acuerdo sobre las reglas en torno a modelos fundacionales, pero siguen trabadas las discusiones sobre datos biom¨¦tricos, una l¨ªnea roja de los eurodiputados
La Uni¨®n Europea acaricia la posibilidad de convertirse en la primera regi¨®n del mundo en tener una ley completa para regular la inteligencia artificial (IA). Pero tras casi 24 horas de maratonianas negociaciones, todav¨ªa no se han logrado cerrar todos los puntos, y las reuniones a puerta cerrada en Bruselas se han suspendido hasta ma?ana viernes, a las 9 de la ma?ana. S¨ª se sabe que ya hay acuerdo (aunque no se han revelado los detalles) sobre uno de los temas m¨¢s espinosos: c¨®mo regular los modelos fundacionales en los que se basan sistemas como el ChatGPT y que, aunque son considerados fundamentales en la evoluci¨®n de la tecnolog¨ªa, tambi¨¦n generan serias dudas por su capacidad disruptiva. Aun as¨ª, todav¨ªa quedar¨ªa pendiente al menos otro aspecto espinoso de la ambiciosa normativa: cuestiones sobre la vigilancia biom¨¦trica en tiempo real que tantas dudas y recelos suscita entre los parlamentarios ante su posible uso abusivo por parte de gobiernos, como sucede ya en China.
¡°Muchos avances realizados en estas 22 horas. Ma?ana reanudamos el trabajo¡±, anunci¨® el comisario de Mercado Interior y uno de los mayores impulsores de la ley de IA, Thierry Breton, pasado el mediod¨ªa y bastantes horas m¨¢s tarde de lo que los negociadores hab¨ªan calculado inicialmente que durar¨ªa esta reuni¨®n entre representantes de los Estados, de la Euroc¨¢mara y la Comisi¨®n Europea (los denominados tr¨ªlogos). Las partes llevaban encerradas desde las 15.00 del mi¨¦rcoles en una sala de la sede del Consejo de la UE en la capital belga, en un intento de acordar un texto legal final que acomode las visiones de los Estados (m¨¢s favorables a una autorregulaci¨®n de los modelos fundacionales y un mayor uso de la vigilancia biom¨¦trica) y la de los eurodiputados, que exigen muchos m¨¢s controles y obligaciones en aras de la defensa de los derechos fundamentales ante tecnolog¨ªas con gran capacidad intrusiva. Aunque no es el paso final -el acuerdo, si llega a haberlo, tendr¨¢ todav¨ªa que ser ratificado por el Consejo y la Euroc¨¢mara, antes de que la ley pueda entrar en vigor, previsiblemente a finales de 2026 si no hay m¨¢s retrasos- s¨ª se considera un hito puesto que solo llegar hasta este punto ha llegado a parecer a veces imposible.
¡°Las negociaciones contin¨²an¡±, indicaban de forma coincidente fuentes pr¨®ximas a las negociaciones tras una madrugada ¡°intensa y productiva¡±, como la defini¨® tambi¨¦n en las redes sociales la secretaria de Estado de Digitalizaci¨®n e Inteligencia Artificial, Carme Artigas, quien dirige la reuni¨®n, ya que Espa?a ostenta hasta finales de mes la presidencia rotatoria del Consejo de la UE. A punto no obstante de cumplirse 24 horas de ¡°ultramarat¨®n¡± negociadora -como la defini¨® Breton-, las partes decidieron hacer una pausa y retomar las conversaciones este viernes.
La decisi¨®n es una muestra de que, aunque se ha avanzado mucho, como aseguran todas las partes, las diferencias son todav¨ªa lo suficientemente grandes como para no poder sellar un acuerdo. Y, siguiendo la m¨¢xima de la diplomacia de que nada est¨¢ acordado hasta que todo est¨¢ acordado, por muchos que sean los avances logrados, todav¨ªa no hay fumata blanca. Aun as¨ª, el hecho de que no se haya tirado la toalla -convocar a un nuevo tr¨ªlogo habr¨ªa supuesto un nuevo retraso que quiz¨¢s desplazar¨ªa el tema a la presidencia belga a partir de enero- sino que se haya decidido hacer solo una pausa es una se?al alentadora, aseveran tambi¨¦n diversas fuentes. Pese a las diferencias, todav¨ªa hay esperanza de que este viernes se logre un acuerdo, si bien todav¨ªa queda bastante brecha por cerrar.
Seg¨²n fuentes pr¨®ximas a las negociaciones, el obst¨¢culo fundamental final para que los negociadores lancen la esperada fumata blanca es otro de los principales escollos durante todo el proceso de discusi¨®n de la ley: la regulaci¨®n de la vigilancia biom¨¦trica en tiempo real en espacios p¨²blicos mediante sistemas como el reconocimiento facial, una de las l¨ªneas rojas del Parlamento Europeo, preocupado por la posibilidad de abusos de los derechos fundamentales de los ciudadanos por parte de los Estados a la hora de usar estas tecnolog¨ªas.
Del mandato negociador de la Euroc¨¢mara sali¨® la decisi¨®n de prohibir o restringir al m¨¢ximo los ¡°usos intrusivos y discriminatorios de la IA¡±, especialmente los sistemas biom¨¦tricos en tiempo real o en espacios p¨²blicos, salvo muy contadas excepciones por motivos de seguridad. Los Estados buscan ampliar estas excepciones, y ah¨ª se iban a topar, seg¨²n advirti¨® la v¨ªspera el eurodiputado Brando Benifei, participante en las negociaciones, con una l¨ªnea roja clara: los legisladores pugnan por mantener la prohibici¨®n de la polic¨ªa predictiva, la vigilancia biom¨¦trica en lugares p¨²blicos y los sistemas de reconocimiento de emociones en lugares de trabajo y en los sistemas educativos. ¡°Necesitamos un grado de protecci¨®n suficiente de los derechos fundamentales con las prohibiciones necesarias a la hora de usar [estas tecnolog¨ªas] para la seguridad y la vigilancia¡±, resumi¨® el eurodiputado italiano el mi¨¦rcoles. ¡°Los gobiernos quieren una larga lista de excepciones a la aplicaci¨®n que no vamos a aceptar¡±, asegur¨® en un encuentro con periodistas horas antes de encerrarse en las discusiones.
¡°Necesitamos un grado de protecci¨®n suficiente de los derechos fundamentales con las prohibiciones necesarias a la hora de usar [estas tecnolog¨ªas] para la seguridad y la vigilancia¡±, insisti¨® Benifei, que se dijo dispuesto a encontrar un ¡°compromiso¡± en la materia, como en ¡°casos espec¨ªficos¡± de vigilancia policial, pero subray¨® que para ello se requer¨ªan ¡°salvaguardas¡± muy robustas y un control de las mismas que, en cualquier caso, no pueden ser ejercidas por los propios Estados. ¡°No vamos a permitir que los gobiernos controlen ellos mismos si respetan la ley, esto es muy, muy importante para nosotros (¡) y nunca vamos a aceptar una desviaci¨®n y no tener un control serio¡±, adelant¨®.
Aunque el acuerdo para continuar este viernes las negociaciones se basa en un acuerdo de mantener la discreci¨®n sobre el punto en el que se encuentran estas hasta la nueva cita, fuentes conocedoras de los tiras y aflojas confirman asimismo que otro de los puntos por ahora sin resolver es la cuesti¨®n de las ¡°excepciones a la seguridad nacional¡± que pa¨ªses como Francia piden a la ley de IA para poder usar este tipo de tecnolog¨ªas con fines de defensa, militares o de seguridad nacional como la lucha contra el terrorismo, un extremo en el que los Estados estar¨ªan mostrando poca voluntad de llegar a un camino intermedio con los eurodiputados, que buscan limitar estas excepciones al m¨¢ximo.
Las largas discusiones, por las que se pas¨® a saludar incluso la vicepresidenta primera y ministra de Econom¨ªa, Nadia Calvi?o -otra muestra de la gran prioridad que Espa?a ha querido dar al expediente de la IA, cuya ley quiere poder acordar bajo su mandato europeo-- s¨ª han permitido ya, seg¨²n fuentes coincidentes, superar el otro gran obst¨¢culo para un acuerdo provisional sobre la ley: la cuesti¨®n de la regulaci¨®n de los modelos fundacionales, sobre todo aquellos m¨¢s potentes.
M¨¢s que el ¡°qu¨¦¡±, el pulso giraba en torno al ¡°c¨®mo¡±, explicaban fuentes pr¨®ximas de la negociaci¨®n en v¨ªsperas de la misma. Pa¨ªses como Alemania, Francia e Italia se hab¨ªan opuesto en las ¨²ltimas semanas a, como buscaba la Euroc¨¢mara, fijar las obligaciones por ley y abogaban por una mayor autorregulaci¨®n ¡ªmediante c¨®digos de conducta, eso s¨ª, obligatorios¡ª de los desarrolladores. El argumento usado era no trabar la innovaci¨®n y competitividad en un sector en el que Europa no quiere quedarse atr¨¢s frente a sus grandes rivales, Estados Unidos y China.
Pero los eurodiputados, preocupados por la capacidad de estas nuevas tecnolog¨ªas de afectar derechos fundamentales de los ciudadanos, hab¨ªan puesto l¨ªneas rojas y advertido de su intenci¨®n de abandonar las negociaciones ¡ªlo que habr¨ªa postergado fuertemente toda la ley, que se espera pueda ser totalmente implementada a finales de 2026¡ª si no se fijaban suficientes salvaguardas. Sobre todo para los modelos fundacionales m¨¢s potentes, los considerados de ¡°riesgo sist¨¦mico¡± porque tienen capacidades de alto impacto cuyos resultados pueden ¡°no ser conocidos o comprendidos en el momento de su desarrollo y publicaci¨®n, por lo que pueden provocar riesgos sist¨¦micos a nivel de la UE¡±, seg¨²n la definici¨®n aceptada por todas las partes.
El meollo, explicaba tambi¨¦n Benifei en v¨ªsperas de las negociaciones, era la forma en que se ¡°garantiza¡± para estos modelos m¨¢s potentes ¡°que lo que hagan los desarrolladores de esos modelos sea obligatorio y se pueda exigir su cumplimiento¡±. La Euroc¨¢mara, se?al¨®, quer¨ªa un texto lo suficientemente claro para asegurarse de que ¡°no hay manera de escapar a esas obligaciones¡±, incluso aunque fueran incluidas en un c¨®digo de conducta como ped¨ªan los Estados, pero que, en cualquier caso, ¡°que no sea un compromiso voluntario de facto, sino que se pueda hacer cumplir¡±.
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