No creas a tus ojos: el saludo nazi de Musk y el mayor experimento de luz de gas de la historia
Las principales plataformas de comunicaci¨®n de masas del mundo se han rendido ante Trump y la maquinaria de la mentira
¡°Elon Musk haciendo el saludo romano jajajaj¡±, escribi¨® en las redes el conocido neonazi Alberto Pugilato. ¡°Elon Musk alza el brazo y hace el saludo romano. ?Qu¨¦ ha sido esto?¡±, public¨® tambi¨¦n la cuenta ultra SrLiberal. ¡°Saludo romano¡± es la manera aseada que tienen los nazis para referirse al saludo nazi, como cuando los foodies dicen AOVE en lugar de aceite, para dejar claro que son unos connaisseurs del fascismo (aunque la historiadora Mary Beard dice que eso no tiene nada que ver con Roma).
Todos los que lo vieron en directo se quedaron con la boca abierta: Musk alzando su mano al p¨²blico por dos veces con fuerza y pasi¨®n. No pod¨ªamos creer lo que ve¨ªamos.
Y ahora nos lo confirma la industria de la mentira: no podemos creer lo que vimos. Musk no hizo ning¨²n saludo nazi. A lo sumo fue un adem¨¢n ¡°raro¡±, de un asperger que no sabe c¨®mo gesticular en p¨²blico. No hab¨ªan pasado ni 15 minutos cuando muchos ultras, estadounidenses y espa?oles, empezaron con las explicaciones. SrLiberal empez¨® diciendo ¡°en realidad se toca el coraz¨®n y lo manda a las estrellas¡±, luego que ¡°al margen de bromas es evidente que Elon Musk no hizo el saludo nazi¡± y m¨¢s tarde, recogiendo una publicaci¨®n del diario La Raz¨®n, escribi¨® que peor es Pedro S¨¢nchez que ¡°canta el himno de la URSS¡± con el pu?o en alto. Otros nazis menos discretos han pasado de excusitas y celebran el gui?o del nuevo Rasput¨ªn trumpista. En todo caso, como escribi¨® Charlie Warzel en The Atlantic: ¡°Es un espect¨¢culo apropiado para comenzar la segunda administraci¨®n Trump: un grupo de personas discutiendo interminablemente sobre algo que todos pueden ver con sus propios ojos¡±.
De eso se trata, de negar lo evidente. El a?o pasado nos pusimos pesados con lo que los deepfakes podr¨ªan suponer al intoxicar los procesos electorales. Tem¨ªamos la desinformaci¨®n sint¨¦tica creada con inteligencia artificial, pero las cosas no funcionan as¨ª. La aparici¨®n de la IA en un terreno de juego informativo convertido en un lodazal t¨®xico ¡ªpor gente como Musk¡ª solo sirve para permitir que la gente no se crea cosas que son ciertas. La realidad es opinable. Los neofascistas reconocieron de inmediato el ¡°saludo romano¡±, pero ahora hacen circular fotos de pol¨ªticos dem¨®cratas con el brazo en alto y se burlan: ¡°?Obama y Kamala tambi¨¦n son nazis?¡±. En otras ocasiones, recurrir¨¢n al cl¨¢sico ¡°es broma, os enfad¨¢is por todo¡±. Musk ha reaccionado as¨ª: se burla de que la izquierda ve nazis por todos lados y aprovecha una vez m¨¢s para acusar de manipulaci¨®n a los medios y la Wikipedia, de los ¨²ltimos bastiones en el mundo real.
Por eso, llegados a este punto, da igual si Musk hizo el saludo fascista a sabiendas. Nos tenemos que fijar en lo que ha pasado despu¨¦s: la maquinaria del odio y la mentira exigiendo que no creamos a nuestros propios ojos. Eso es lo importante, sobre lo que debemos reflexionar, porque es el gigantesco tsunami que se nos viene encima. Con Donald Trump en el Despacho Oval y los broligarcas poniendo a sus pies las principales plataformas de comunicaci¨®n de masas del mundo (Facebook, X, TikTok, WhatsApp, YouTube, Instagram, Google¡) nos enfrentamos al mayor experimento de luz de gas de la historia. La econom¨ªa de la atenci¨®n, aquella que demanda nuestros globos oculares para ganar dinero enchuf¨¢ndonos anuncios, se ha mierdificado (enshittification) hasta ser un torrente sin fin de mentiras y sandeces que no nos permiten discernir la realidad. Mejor dicho: permiten a cada cual elegir c¨®mo es la realidad. Y manda la suya, la de Musk. En su cerebro ¡ªque es su timeline de X¡ª los encarcelados por el asalto golpista al Capitolio de 2021 son presos pol¨ªticos, ¡°los rehenes del 6 de enero¡±.
Pero el experimento, ahora, se ha trasladado de las redes a los decretos. Si un marciano leyera las palabras textuales que aparecen en las primeras ¨®rdenes ejecutivas de Trump, pensar¨ªa que es el primer Gobierno democr¨¢tico tras una oscura etapa dictatorial. ¡°La administraci¨®n anterior pisote¨® el derecho a la libertad de expresi¨®n al censurar el discurso de los estadounidenses¡±, dice una. ¡°Llevaron a cabo una instrumentalizaci¨®n sin precedentes y propia de pa¨ªses del tercer mundo del poder judicial para socavar el proceso democr¨¢tico¡±, dice otra. Y por supuesto, reconocer la existencia de personas trans supuso un ¡°camino insano pavimentado por un ataque continuo y deliberado contra el uso y comprensi¨®n ordinarios y tradicionales de los t¨¦rminos biol¨®gicos y cient¨ªficos¡±. Y si Trump decide que Espa?a es uno de los BRICS, Espa?a ya no est¨¢ en Europa, sino en el sur de ?frica.
No s¨¦ si tendremos fuerzas para detenernos a pelear contra cada bulo, contra cada negaci¨®n de la realidad que proceda de la mayor maquinaria de desinformaci¨®n de la historia. Sobre todo ahora que magnates como Mark Zuckerberg han decidido que desmentir falsedades es censura y van a dejar que fluyan. Cuando alguien decide hacernos luz de gas permanente, sistem¨¢tico, para salirse con la suya y hacernos dudar de todo, ?cu¨¢l debe ser la respuesta?