Una confusa y aclamada serie

Podr¨ªa destruirte (HBO) permite divagar sobre su bondad a una cr¨ªtica internacional que parece haber ca¨ªdo rendida a los pies de su creadora y protagonista, Michaela Coel. Lo curioso es que tambi¨¦n admite divagar sobre su confuso concepto narrativo, en este caso pr¨¢cticamente desde la soledad del comentarista, sobre el desarrollo de una trama que recuerda vagamente al Godard de sus a?os m¨¢s opacos con un matiz importante: el realizador franc¨¦s rodaba lo que rodaba hace m¨¢s de 50 a?os, por lo que la posible transgresi¨®n formal de la destructora Coel no deja de formar parte de una tradici¨®n que se remonta m¨¢s de medio siglo atr¨¢s.

Una joven escritora con un notable ¨¦xito por su primer libro decide viajar a Italia con una amiga para tratar de concentrarse y acabar una nueva novela, lo que le permitir¨ªa superar la presi¨®n a la que le someten sus agentes literarios. No escribe pr¨¢cticamente nada y se mete pr¨¢cticamente de todo.

Vuelve a su Londres habitual y decide salir con un grupo de amigos, los cuales no dudar¨¢n en drogarla en un club nocturno y agredirla sexualmente. La escritora de ¨¦xito no recuerda nada, o casi nada, pero intuye que la violaron. A partir de ah¨ª el guion consiste en tratar de reconstruir lo olvidado haciendo part¨ªcipe al espectador de su amnesia. Decide denunciar el hecho en la comisar¨ªa pero no est¨¢ segura de nada. Viajes visuales hacia adelante y hacia atr¨¢s en cap¨ªtulos de algo menos de media hora que, por lo le¨ªdo, han deslumbrado a buena parte de la cr¨ªtica internacional. Y a esta ceremonia de la confusi¨®n se une HBO al no facilitar el n¨²mero de cap¨ªtulos de los que consta la serie.