¡®El tercer d¨ªa¡¯, una inquietante serie

Si se aceptara el definir los seis cap¨ªtulos de El tercer d¨ªa (HBO Espa?a) con una sola palabra deber¨ªa ser ¡°sombr¨ªa¡±, aunque en esta ocasi¨®n lo que est¨¢ permanentemente en sombra no es un terreno sino la mente del protagonista, Jude Law, un personaje atormentado por un pasado inmediato que llega a Osea, una extra?a isla de la costa de Essex.

Claro, que si Osea es extra?a -dos veces cada 24 horas se puede acceder en coche, cuesti¨®n de las mareas- sus habitantes a¨²n lo son m¨¢s: una comunidad reducida que profesa una extra?a religi¨®n en la que la fusi¨®n del cristianismo y las leyendas celtas desemboca en una especie de paranoia colectiva convencidos de que son el centro del mundo y que de ellos depende el bienestar o la desgracia del resto del planeta.

Una serie en la que la tortuosa mente de sus guionistas, Dennis Kelly, Dean O¡¯Loughlin y Kit de Waal, han entremezclado la ficci¨®n con retazos de realidad. Osea fue comprada en 1903 por un rico heredero de la Cervecer¨ªa Charrington, que abandon¨® la empresa familiar para dedicarse a la reinserci¨®n de alcoh¨®licos y drogadictos, un dato real sobre la historia de la peque?a isla que en 2005, tras una serie de ventas y reventas, se reconvirti¨® de nuevo, temporalmente, en un centro de desintoxicaci¨®n.

Si los tres primeros cap¨ªtulos tienen como protagonista al oscuro Jude Law, las tres ¨²ltimos se centran b¨¢sicamente en Naomie Harris, una especie de Madre Coraje dispuesta a recuperar la normalidad vital para ella y sus hijas, destrozada por su sombr¨ªo y desequilibrado marido. Dos interpretaciones sobresalientes acompa?adas, entre otros, por una impecable Emily Watson para una inquietante serie en la que la marginaci¨®n tambi¨¦n produce monstruos.