Nuria Roca: ¡°Los piropos que m¨¢s agradezco son los de las mujeres¡±
La comunicadora, con 26 a?os de carrera, arrasa en su sustituci¨®n de Pablo Motos al frente de ¡®El hormiguero¡¯, estrena la serie de viajes ¡®Road Trip¡¯ y debuta en el teatro con ¡®La gran depresi¨®n¡¯
Hablamos al raso, embozadas ambas con mascarillas de pato, en el patio de la nave desde donde se emite El hormiguero, en la calle Alcal¨¢ de Madrid. Imposible acceder a ese templo televisivo sin una PCR negativa del d¨ªa en el bolso. Hay aqu¨ª aut¨¦ntico p¨¢nico al virus, y se entiende. Hoy, mi¨¦rcoles 10 de febrero, es el ¨²ltimo d¨ªa de Nuria Roca como presentadora sustituta de urgencia del programa insignia de Pablo Motos, quien regresa ma?ana al plat¨® tras una semana recluido en casa por positivo en coronavirus, pero que no ha dejado de aparecer en pantalla todas esas noches ejerciendo de padre espiritual del espacio desde su domicilio. En ese periodo, a Roca le ha dado tiempo a, no solo mantener, sino superar al jefe en audiencia y a poner de acuerdo a cr¨ªtica y p¨²blico a la hora de alabarla. Cordial y un puntito en guardia ante preguntas supuestamente comprometidas, Roca luce con encanto y soltura el reci¨¦n estrenado flequillo con el que tuvo que salir a la arena de improviso y que estos d¨ªas piden ya muchas espa?olas en las peluquer¨ªas. Roca, con 780.000 seguidores en Instagram, crea tendencia, sospecho que lo sabe, y que le gusta.
No me diga que no le temblaron las piernas el d¨ªa que tuvo que pasar de tertuliana a presentadora en un par de horas.
Para nada. Trabajamos juntos hace a?os y yo sab¨ªa que, si pasaba algo, era yo quien iba a sustituirle. Pablo lo tiene todo previsto, y ya lo hab¨ªamos hablado. Le operaron, pas¨® la primera ola, la segunda ola, Pensaba que no iba a suceder. Pero sucedi¨®. Y, hora y media antes, me dije: ¡°ostras, vamos para adelante¡±. Claro que impone la responsabilidad. Es un programa muy escaletado, solo se puede hacer bien si lo disfrutas, y yo lo he disfrutado como una enana.
?Ha sido el momento m¨¢s estresante de su carrera?
No. He hecho sustituciones de telediario de un minuto a otro, explosiones de focos y cambios de plat¨® en directo, improvisaciones sobre la marcha. Son 26 a?os de carrera y me ha pasado de todo. Para m¨ª es mucho m¨¢s intimidante salir al teatro, como voy a hacer, por primera vez en mi vida en La gran depresi¨®n con Antonia San Juan de compa?era en Fuerteventura, el d¨ªa 27. Eso s¨ª que es de kamikazes.
Estos d¨ªas, Daniel Guzm¨¢n y Omar Montes se le han declarado en directo. ?C¨®mo se lleva derretir a los ¡®millenials¡¯ a los 49?
Perdona, tengo 48 a?os, todav¨ªa, que a esta edad contamos hasta las horas. Lo llevo fenomenal. ?Sabes qu¨¦ pasa? Que igual que soy muy consciente de la realidad, a veces no lo soy tanto de los a?os que tengo y me siento como si tuviera 30. Y cuando te lanzan un piropo, sea alguien joven o viejo, siempre que sea honesto y amable, es de agradecer, y los que m¨¢s agradezco son los de las mujeres, que tengo muchos, adem¨¢s.
Quiz¨¢ porque no apabulla.
Va por ah¨ª la cosa. Creo que no hay que ser agresiva. Chicho [Ib¨¢?ez Serrador, su descubridor en Waku Waku, a los 25 a?os] me dec¨ªa que yo gustaba a las mujeres, y que eso era una bendici¨®n en televisi¨®n. Hay una manera de ir por la vida, y de entrar en las casas por la tele, que es pidiendo permiso con la actitud y el talante, y siempre lo he hecho as¨ª.
Vive, trabaja y hasta escribe a medias con su marido. Desfaga esa imagen de pareja perfecta.
Es que no quiero desfacerla, porque para m¨ª es perfecta. Mis hijos saben que tienen un hogar, un padre y una madre, pero si nosotros dos estamos juntos es porque nos queremos, nos admiramos y somos cada uno para el otro la persona con la que siempre te ir¨ªas a cualquier sitio. Si no, no estar¨ªamos juntos.
A¨²n resuenan los ecos de la que se lio cuando comentaron que eran una pareja abierta. ?C¨®mo recuerda aquel ¡®escandalazo¡¯?
Fue un esc¨¢ndalo en un vaso de agua. Solo hab¨ªa que rascar un poquito y no quedarse en el titular. Para m¨ª las parejas no est¨¢n preconcebidas, sino revisables, seg¨²n el momento y, a partir de ah¨ª, cimentas tu historia. Lo que pasa es que hay a quien le asusta que puedan existir otras formas de relacionarse. All¨¢ cada cual. Yo s¨¦ lo que tengo, y me gusta.
En ¡®Road trip¡¯, vuelve a Valencia. Como dec¨ªa Jennifer L¨®pez del Bronx: ?una sale de Valencia, pero Valencia no sale de una?
Llevo muchos a?os fuera, pero el lugar donde pasas los primeros 25 a?os, tu infancia, tu adolescencia y tu paso a adulta te forja, te marca. Soy muy fallera, muy explosiva en cuanto a sentimientos, impulsividad, prontos. Soy muy de masclet¨¤s emocionales.
De alicantina a valenciana, ?qu¨¦ tiene la terreta para generar tanto suceso y tanto artista?
En Valencia suceden muchas cosas extraordinarias, para bien y para no tanto. Flip¨¦ con el caso de la fallera yihadista. Es que ni Berlanga lo hubiera imaginado mejor, sin hablar del propio Berlanga. S¨ª, Valencia es especial. Cuando hac¨ªa programas de buscar gente especial, tipo Factor X o Tienes talento, sab¨ªamos que all¨ª ¨ªbamos a encontrar oro. Y lo hab¨ªa.
Tiene tres cuartos de mill¨®n de seguidores en Instagram. ?Piensa mucho todo lo que publica?
S¨ª, y no. Si uno se asoma a una red social y cree que eso es la vida real, va aviado. Con un filtrito y una sonrisa, todos estamos guapos, y est¨¢ muy bien para mostrarlo y como tabl¨®n de anuncios, pero ya est¨¢. Ni la vida te va en ello ni hay que hacerle tanto caso. Si las usas, que sea para divertirte. Tengo tres hijos adolescentes, s¨¦ cu¨¢nto tiempo le dedican y lo da?inas que pueden llegar a ser.
Viendo el despliegue de modelos de sus fotos da la sensaci¨®n de que su armario no tiene fondo. Desde la envidia se lo digo.
Cierto. Tengo que aprender a tirar y no aprendo. Soy muy fetichista, me gustan mucho las cosas, la ropa, los bolsos, los zapatos, y tengo que aprender a desprenderme de ellas. Ahora estoy aprendiendo a compartir.
Puestos a ello, podr¨ªa copresentar ¡®El Hormiguero¡¯.
En absoluto. T¨² lo que quieres es un titular, y no voy a d¨¢rtelo. El hormiguero es y ser¨¢ el programa de Pablo. Y yo, que he pasado por muchos formatos, creo que acabar¨¢ estudi¨¢ndose en las facultades de Comunicaci¨®n. Es una maquinaria perfectamente engrasada y con un nivel de exigencia brutal que no deja de crecer despu¨¦s de 15 a?os. Y eso es m¨¦rito suyo.
?No le queda un pellizquito, cierto mono de ser hormiga jefa?
Para nada. Me dar¨ªa un pellizquito si yo me imaginara cosas. Pablo ha estado malo, he tenido que hacer el programa y ya est¨¢. Otra cosa es que alguien quiera fantasear, pero soy muy realista. Con la edad, eres consciente del terreno que pisas y sabes d¨®nde est¨¢s, que es lo m¨¢s importante: no perder jam¨¢s el norte.
Se cort¨® el flequillo justo antes de tener que presentar el programa y confes¨® que a¨²n no se ve¨ªa. ?Se ha acostumbrado ya?
Jajaj¨¢. Pues f¨ªjate si estaba contenta, centrada, disfrutando y tan a lo m¨ªo que ni me acord¨¦ de tal cosa. Y eso que, como sabes, el flequillo da much¨ªsimo dolor de cabeza hasta que te haces con ello.
EL FACTOR ROCA
Desde que, a los 25, asom¨® su cara amable en 'Waku Waku', el programa de naturaleza de Chicho Ib¨¢?ez Serrador, Nuria Roca (Valencia, 48 a?os), ha sido presencia habitual, aunque quiz¨¢ menguante, en la parrilla televisiva y radiof¨®nica. Su m¨¢s reciente faceta de escritora, a veces a medias con su marido, Juan del Val, y de influyente prescriptora de moda y belleza a trav¨¦s de su perfil de Instagram, con 780.000 seguidores, complementan una carrera que ha vuelto a despuntar tras su brillante sustituci¨®n de Pablo Motos en la presentaci¨®n de 'El hormiguero' a causa de la baja por coronavirus del titular, y el estreno de 'Road Trip', una serie donde viaja por Espa?a con Esty Quesada y Carmina Barrios. Por si le quedaran charcos donde meterse, el d¨ªa 27 de febrero debuta como actriz de teatro en la funci¨®n 'La gran depresi¨®n', dirigida por F¨¦lix Sabroso y coprotagonizada por Antonia San Juan en Fuerteventura.
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