Cr¨ªmenes
Veo con retraso, sorprendido por su torrencial audiencia, la serie ¡®Line of Duty¡¯. El planteamiento es atractivo pero me agota su narrativa
Veo con retraso, sorprendido por su torrencial audiencia, la serie Line of Duty. A pesar del pretendido suspense sobre la identidad y la metodolog¨ªa de m¨²ltiples polic¨ªas corruptos y el retorcido trabajo de la secci¨®n de Asuntos Internos que les investiga, no logro seguir con continuidad y orden sus cap¨ªtulos en las numerosas temporadas. El planteamiento es atractivo, pero me agota su narrativa. Los guionistas no se estrujan el cerebro introduciendo novedades en la trama. Siempre hay alguna secuencia rodada en exteriores, una persecuci¨®n o tiroteo callejero y el resto es acumulaci¨®n abusiva de interrogatorios en la sede policial. Contar que las mafias y la gran delincuencia est¨¢n infiltradas entre los organismos cuya misi¨®n es perseguirlas, ofrece juego para los espectadores at¨®nitos o esc¨¦pticos sobre el correcto funcionamiento de la ley y el orden, pero la forma de expresarlo es demasiado repetitiva.
David Fincher, glorioso inventor de memorables asesinos en serie en las aterradoras y formidables pel¨ªculas Seven y Zodiac, dirige varios episodios de la serie Mindhunter. La habitan killers monstruosos que han reinado en la historia del crimen de Estados Unidos, y los agentes del FBI especializados en ciencias del comportamiento, que tratan de encontrar las ra¨ªces del horror. Fincher no abusa de su prestigiosa firma. Funciona como uno m¨¢s entre los conductores de una serie m¨¢s que correcta y en ocasiones perturbadora. Los detectives tienen muy complicada no ya su macabra labor profesional sino tambi¨¦n su vida privada. El mal no solo est¨¢ fuera, puede hallarse en su propia casa. Y crea ataques de p¨¢nico, roturas familiares y desenga?os amorosos.
Como todos los espa?oles futboleros de mi generaci¨®n y muchos otros a los que sus incendiarias diatribas les provocaba entretenimiento o morbo, yo tambi¨¦n escuchaba en la radio a Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa. Pose¨ªa incuestionable estilo, agresividad calculada y cambiante en funci¨®n de sus intereses, manipulaci¨®n abrasiva, era el rey del populismo. En la serie Reyes de la Noche abunda la caricatura y el esperpento, pero tambi¨¦n percibes realidad. Tiene momentos divertidos. Y el excelente actor Javier Guti¨¦rrez clava a su legendario personaje.
Puedes seguir EL PA?S TELEVISI?N en Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.