La abuela de Chanel, en Olesa de Montserrat, su pueblo: ¡°Para nosotros ya es la ganadora¡±

¡°Si gana ser¨¢ la locura padre. Aunque para nosotros ya es la ganadora¡±. Llevaba raz¨®n la abuela de Chanel Terrero, Leonor, minutos antes de la actuaci¨®n de su nieta en Tur¨ªn. Chanel no gan¨®, qued¨® tercera en el festival de Eurovisi¨®n 2022, pero este domingo unos cuantos estar¨¢n af¨®nicos. Gritos y gritos y m¨¢s gritos. Y pancartas. Y banderas. Pero sobre todo gritos ¡ªde los de fan, de los de gritar y ya¡ª y ¡°Chaneeeeeeeeeeels¡± hasta quedarse sin voz. M¨¢s all¨¢ de la actuaci¨®n entera, con la de veces que pinchan cada actuaci¨®n el p¨²blico se desga?it¨® una docena de veces. Sumadas las votaciones, inenarrable. El final, agridulce.

Casi 1.400 personas llenaron (y bailaron, a lo loco; palabra) esta noche de s¨¢bado el teatro de la Passi¨® de Olesa de Montserrat (Barcelona). Un teatro conocido por el espect¨¢culo que representa desde hace casi cinco siglos y en el que se implican centenares de vecinos para explicar la vida de Cristo, la pasi¨®n la desat¨® esta vez Chanel Terrero con su SloMo.

El chiste es f¨¢cil, pero en este pueblo de 24.000 habitantes todo el mundo conoce a Chanel o alg¨²n familiar suyo y se notaba. Compa?eras de trabajo de Marlene, su madre, aplaudi¨¦ndola a rabiar cuando se proyectaron emotivas im¨¢genes familiares. ¡°Desde luego que ha trabajado un mont¨®n para llegar aqu¨ª, se lo merec¨ªa¡±, resum¨ªa Cristina, pr¨®xima a la familia y muy emocionada. ¡°Currar, ha currado, son una familia supernormal¡±, a?ad¨ªa otra amiga. ¡°Ya puedes escribir que al final la pol¨ªtica tambi¨¦n se mete en todo esto¡±, lamentaba Cristina con el teatro vaci¨¢ndose de p¨²blico. Leonor fue de las ¨²ltimas en salir, rodeada de vecinos felicit¨¢ndola.

Familias enteras. Muchas de fiesta: vestidos, talones y brilli brilli, que tal y como est¨¢ el mundo, hay pocas ocasiones y Eurovisi¨®n lo vale. Ni?os bailando por los pasillos del teatro. Y las alumnas de la escuela Move On de danza, donde comenz¨® su formaci¨®n, de pie sin parar de bailar. Tambi¨¦n ellas actuaron antes de la gala eurovisiva y despu¨¦s. ¡°Vamos a celebrar el tercer puesto¡±, avisaron.

Mascarillas, pocas en un teatro con un elevado nivel t¨¦cnico y un escenario de 500 metros cuadrados. Y el alcalde, Miquel Riera. ¡°A todos nos toca ya vivir momentos felices, bienvenidos sean, tenemos ganas de celebrar¡±, aseguraba antes de agradecer ¡°a Chanel su generosidad de asociar Olesa a su nombre y a este momento profesional, para nosotros es importante¡±.

Antes de la gala, hubo unos minutos de silencio, un par¨¦ntesis entre el furor. El p¨²blico del teatro de Olesa escuch¨® atentamente, sentadas en el escenario, a la profesora de baile de Chanel desde los seis a?os, Jeny Poquet, de la escuela Move On, y la abuela de la cantante, Leonor.

¡°Tendr¨ªa seis a?os y enseguida vi que era de esas alumnas tocadas por una varita. Se form¨® en cl¨¢sico, jazz, cante. Ahora la vemos en Tur¨ªn, pero esta se?orita ha bailado piezas de repertorio cl¨¢sico con tut¨², lleva una buena mochila¡±, presum¨ªa Poquet. ¡°Sus padres la dejaron en mis manos, gan¨¦ una hija¡±, dijo orgullosa de que con 16 a?os tuviera su primer trabajo profesional, hizo Mortadelo y Filem¨®n. ¡°Aqu¨ª estamos, como tenemos que vernos¡±, celebr¨® Leonor Berget, m¨¢s emocionada que habladora, que prometi¨® cocinar escudella a su nieta cuando vuelva a casa.

Chanel y su abuela no se ven desde el Barcelona Eurovisi¨®n Party que se celebr¨® en la ciudad condal hace un mes. Desde entonces se han mandado mensajes por WhatsApp. ¡°Nosotros dici¨¦ndole que estamos aqu¨ª y con ella, que lo har¨¢ muy bien y que mucho ¨¢nimo¡±, contaba Leonor antes de la actuaci¨®n. ¡°A ver si acaba esta locura y puede venir a descansar unos d¨ªas¡±, suspiraba.

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