El ¡®bookcast¡¯ llega a Espa?a con los sonidos en blanco y negro del cine cl¨¢sico

La llegada al cine de Nuria P¨¦rez fue eminentemente sonora. Los padres de la creadora del podcast Gabinete de curiosidades ven una pel¨ªcula al d¨ªa religiosamente. Ya lo hac¨ªan cuando ella era ni?a. Su dormitorio infantil compart¨ªa muro con el sal¨®n y, desde su cama, se un¨ªa a ellos en ese ritual. Pero solo a trav¨¦s de lo que escuchaba. A menudo, esas sesiones nocturnas las ocupaba el cine negro. ¡°Les encantaba Edward G. Robinson, Lauren Bacall, Ingrid Bergman¡­ Yo iba imagin¨¢ndome qu¨¦ estaba pasando en la pel¨ªcula y as¨ª comenz¨® a desarrollarse mi creatividad¡±, cuenta ella misma a mediados de marzo. Lo recuerda desde Podium Podcast ¡ªla plataforma de Prisa Audio¡ª con la que acaba de lanzar una expansi¨®n en audio de su libro El monstruo del mon¨®culo y otras bestias (Jekyll & Jill), cuyos protagonistas son el cine y la sociedad de los a?os treinta y cuarenta.

Mientras lo escrib¨ªa, P¨¦rez ya ten¨ªa en la cabeza los sonidos que pod¨ªan componer la futura traslaci¨®n sonora de su texto. Esta expublicista reconvertida en autora quer¨ªa crear con ¨¦l un bookcast, un formato pionero en Espa?a. Se trata de un podcast centrado en un libro, en el que el autor del texto traslada con su propia voz los elementos publicados y que expande lo contado por escrito con nuevos elementos. Ya est¨¢n disponibles las 23 piezas sonoras que componen el proyecto, que su autora presenta este viernes 3 de marzo en la Fundaci¨®n Telef¨®nica de Madrid.

Las entregas intercalan varios formatos y est¨¢n concebidas para ser escuchadas por orden. Hay ensayos largos ¡°que se parecen a Gabinete de curiosidades en cuanto a duraci¨®n y estilo y que el oyente va a reconocer¡±, avanza P¨¦rez. Tambi¨¦n puede encontrarse un relato por entregas y mon¨®logos ficcionados de sus protagonistas. Lo m¨¢s complicado, dice su creadora, fue encontrar voces que recordaran a los doblajes antiguos de esas pel¨ªculas estadounidenses que evoca en el bookcast. ¡°Necesit¨¢bamos un reparto que no sonara a moderno. Lo hemos encontrado en el mundo del doblaje y tambi¨¦n del teatro. Ha sido especialmente complicado en el caso de los personajes j¨®venes. La falta de ego de Andreu Quesada [encargado del dise?o sonoro del proyecto] ha hecho que nos olvidemos de experimentos para centrarnos en recrear el sonido a?ejo, mucho m¨¢s b¨¢sico que el actual¡±, comenta P¨¦rez.

Los cap¨ªtulos tambi¨¦n incluyen la recreaci¨®n del proceso de escritura de un libro, un extra que no aparece en la publicaci¨®n original. ¡°Contamos desde el miedo inicial a la p¨¢gina en blanco a la emoci¨®n y la responsabilidad de dar vida a un personaje¡±, explica su autora. Lo hace a trav¨¦s del intercambio de cartas entre la escritora, a la que da voz ella misma, y el editor, interpretado por Miguel Rell¨¢n. El contenido se conecta y ampl¨ªa a trav¨¦s de una p¨¢gina web creada expresamente para esta versi¨®n de El monstruo del mon¨®culo y otras bestias.

Adem¨¢s del regreso al lado menos conocido del Hollywood cl¨¢sico, el proyecto rescata una parte de la historia poco conocida sobre las mujeres que, en esa misma ¨¦poca, experimentaron un enorme cambio social. Son aquellas que durante la Segunda Guerra Mundial abandonaron su rol secundario para coger un soldador e irse a la f¨¢brica mientras los hombres luchaban en el frente. Una vez acabada la contienda, terminaron relegadas de nuevo a la invisibilidad. En esta nueva versi¨®n en audio, el recuerdo de estas mujeres ahonda m¨¢s en su mensaje feminista, avanza P¨¦rez, consciente de que su plataforma de oyentes procedentes de Gabinete de curiosidades ¡±va a recibirlo de buen grado¡±. Destaca el caso de las prostitutas que fueron a trabajar a la General Motors, ¡°se les sac¨® de una realidad para incorporarlas a otra hasta que, de repente, todo eso se acab¨®. Muchas se acabaron suicidando¡±, comenta.

La idea original, la del libro con posibilidades de ser un relato sonoro, se basa en una serie de objetos reales que P¨¦rez fue encontrando a trav¨¦s de una de sus grandes aficiones: las subastas. Por un lado, encontr¨® los carnets de baile que algunas mujeres de la ¨¦poca llevaban en la mu?eca. ¡°Era el s¨ªmbolo de una ¨¦poca en la que ellas deb¨ªan estar siempre guapas para poder casarse¡±, explica P¨¦rez. Y, por otro, se hizo con insignias con nombre y foto que eran obligatorias para acceder a las f¨¢bricas y que, en esos a?os de guerra, muchas de esas mismas mujeres usaron. ¡°La intenci¨®n con este formato es que, al escucharlo, tengas ganas de tener el libro en papel. En especial si la edici¨®n f¨ªsica est¨¢ hecha con cari?o. Es una f¨®rmula ganadora para los escritores¡±, defiende.

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