Maternidad
Se ha montado el gran Cristo. Los pol¨ªticos ya tienen ardoroso tema para varias semanas. El pueblo llano tambi¨¦n. Repartiendo culpabilidades, lamentando la transgresi¨®n de las leyes, rugiendo contra algo tan incontestable y ancestral como que el dinero puede comprar casi todo
Es bueno y necesario cualquier remedio que te ayude a pasar la noche, afirmaba Sinatra. Aunque imagino que aquel juglar de la soledad deb¨ªa de dormir acompa?ado casi siempre por las mujeres m¨¢s hermosas. Para combatir al torturante insomnio tambi¨¦n se han inventado ayudas qu¨ªmicas. Lo jodido es el despertar. El ¨²nico anhelo de la depresi¨®n cr¨®nica es el refugio de la cama, dormir, saber que durante unas horas, cuantas m¨¢s mejor, el dolor del alma va a desaparecer. Tambi¨¦n se llama ansia de muerte.
Cuenta Ana Obreg¨®n que as¨ª se sent¨ªa ella desde la muerte de su hijo. Imagino que la desaparici¨®n de la persona que engendraste y has parido, va acompa?ada del m¨¢ximo desgarro, de un sufrimiento inconsolable. Y a?ade la ahora feliz dama que gracias a la criatura que ha tenido ya no se siente sola. Es bonito que los n¨¢ufragos encuentren su tabla de salvaci¨®n. Lo que ha hecho se denomina cient¨ªficamente como gestaci¨®n subrogada, aunque coloquialmente recibe el nombre nada l¨ªrico de vientre de alquiler.
Y se ha montado el gran cristo. Los pol¨ªticos ya tienen ardoroso tema para varias semanas. El pueblo llano tambi¨¦n. Repartiendo culpabilidades, lamentando la transgresi¨®n de las leyes, rugiendo contra algo tan incontestable y ancestral como que el dinero puede comprar casi todo lo que le d¨¦ la gana.
Los guardianes del bien com¨²n tambi¨¦n andan muy alborotados ¨²ltimamente exigiendo la ayuda del Estado a la salud mental. Esa enfermedad no es exclusiva ni de ricos ni de pobres, aunque como siempre, los segundos lo tienen m¨¢s chungo. Ante los horrores que le pueden ocurrir a la cabeza y al coraz¨®n, los invulnerables van a tener que aparcar durante un tiempo su mantra formulario, hip¨®crita y machac¨®n de que no pueden dormir pensando en los m¨¢s vulnerables econ¨®micamente. Ahora tambi¨¦n tendr¨¢n que hablar de los locos y los desesperados. Ojal¨¢ que mediante la escucha y el pastilleo reciban un poco de luz los que est¨¢n acosados por las tinieblas.
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