La revoluci¨®n sonora que llega desde Latinoam¨¦rica: ¡°He hecho preguntas en mi ¡®podcast¡¯ que no me atrev¨ªa a hacer a familia, amigas o m¨¦dicos¡±
Las mexicanas Leticia Sahag¨²n y Ashley Frangie, creadoras de ¡®Se regalan dudas¡¯, charlan con el productor costarricense Mauricio Salazar y el creador colombiano Sebasti¨¢n Pay¨¢n sobre las conexiones y diferencias de un formato que est¨¢ cambiando a todo un continente
Las mexicanas Leticia Sahag¨²n (locutora) y Ashley Frangie (fot¨®grafa) se unieron hace a?os en Se regalan dudas, un premiado podcast conversacional con el que se cuestionan su universo cercano sin ning¨²n tipo de tab¨². Puede encontrarse en la plataforma Acast. El costarricense Mauricio Salazar es director general de La Resortera Audio & Podcast, la principal productora del formato de Centroam¨¦rica. Sus t¨ªtulos son los m¨¢s escuchados de la regi¨®n. Y el colombiano Sebasti¨¢n Pay¨¢n lidera el proyecto 070 Podcasts, una manera de contar historias en audio que potencian el contenido acad¨¦mico a trav¨¦s del audio. Los reunimos durante su paso conjunto por el festival Estaci¨®n Podcast, que se celebr¨® a principios de mayo en varias sedes de Madrid, para charlar sobre crear contenido en audio para un oyente hispanohablante.
Pregunta. Cada uno de ustedes viene de una regi¨®n de Am¨¦rica. ?Se puede hablar de una industria del podcast hispano es un continente tan enorme?
Mauricio Salazar. S¨ª lo creo. Plataformas como Spotify y Podimo han hecho esfuerzos para que eso ocurra. Incluso se ha normalizado la diferencia de acentos. En Costa Rica puede escucharse un contenido de Argentina sin el menor problema. Miremos Caso 63, un ¨¦xito chileno global.
Sebasti¨¢n Pay¨¢n. Y uno termina conociendo a un pa¨ªs a trav¨¦s de esas historias que escucha. T¨ªtulos como Radio ambulante (que puso un list¨®n muy alto a los que ven¨ªan despu¨¦s) y Las raras, que tratan sobre varias naciones, ayudan a eso. Festivales como este hacen que adem¨¢s los creadores nos pongamos cara y entremos en contacto.
Leticia Sahag¨²n. A nosotras nos pas¨® con Se regalan dudas, hace cinco a?os. No conoc¨ªamos a gente que hiciera podcast, solo programas de radio que se sub¨ªan tal cual a plataformas de audio. Celebramos lo que ha pasado en este tiempo. Se ha estabilizado una industria y as¨ª todos crecemos. Crece la calidad, la demanda, la monetizaci¨®n...
Ashley Frangie. En M¨¦xico se han creado incluso grupos de WhatsApp para compartir experiencias y resolver problemas que tenemos a la hora de profesionalizar nuestros podcasts, con asuntos como la publicidad, el contenido, la ayuda legal... No entiendo c¨®mo no hay un sindicato global de podcasters exigiendo a esas plataformas que les retribuyan por un contenido que tiene horas enteras enganchados a sus usuarios.
En esta regi¨®n del mundo, vivimos en epidemias silenciosasLeticia Sahag¨²n, cocreadora de 'Se regalan dudas'
P. ?El influjo de Estados Unidos en el mundo del audio es tan poderoso en el resto de los pa¨ªses como lo es en M¨¦xico?
Pay¨¢n. En Colombia siempre hay cierta tendencia a copiar a Estados Unidos, aun a costa de perder nuestra propia identidad. Pero en el podcast tenemos a gente brillante, aunque poca gente puede decir que viva de ello. S¨ª existe la influencia en calidad, pero no en cuesti¨®n econ¨®mica. Y se cre¨® una rivalidad t¨®xica con la industria de la radio, que se sinti¨® amenazada. Al principio no hubo una conexi¨®n, como s¨ª hicieron tantas radios estadounidenses o Cadena Ser hizo con Espa?a.
Salazar. En Costa Rica ocurre algo parecido. S¨ª nos miramos en ellos en cuesti¨®n de est¨¢ndares t¨¦cnicos y de contenido, pero no hay una estructura como Podium Podcast en Espa?a que aglutine talento o la NPR en Estados Unidos.
Sahag¨²n. Ser adictas a los podcast estadounidenses fue la raz¨®n por la que hicimos el nuestro. Nos pregunt¨¢bamos por qu¨¦ no hab¨ªa un contenido as¨ª para hispanohablantes capaz de generar conversaci¨®n, con nuestra propia identidad. El siguiente paso a imitar es c¨®mo adaptar ese contenido de audio al mundo audiovisual.
Frangie. Y no olvidemos que es un formato muy noble, accesible y democr¨¢tico que nos puede igualar con una potencia como Estados Unidos. Los primeros tres a?os pudimos hacer Se regalan dudas con un micr¨®fono de 30 d¨®lares, hasta que pudimos equipararnos a esa calidad de la que hablamos. Hay plataformas que te permiten subir tu contenido de forma gratuita. Da acceso a mucha gente creativa evitando el privilegio.
P. ?Ha liberado el podcast asuntos tab¨² en sus respectivos pa¨ªses?
Pay¨¢n. S¨ª en Colombia, donde hay censura medi¨¢tica algo invisible, porque hay muchos desiertos medi¨¢ticos donde el medio local es propiedad del entorno del alcalde o del empresario de la zona.
Frangie. Del due?o de la mitad de la ciudad (r¨ªe). Tambi¨¦n pasa en M¨¦xico. No puedes conocer una sociedad si no conoces sus tab¨²es.
Sahag¨²n. Y, al menos en M¨¦xico, somos una regi¨®n que fue y es sumamente religiosa y est¨¢bamos educados por dos cadenas de televisi¨®n que sosten¨ªan la verdad absoluta. Por eso, tantos podcasts han sido tan bien aceptados desde el principio. No hab¨ªa un espacio donde pudieran mantenerse ciertas conversaciones de forma tan abierta, sin juicios, culpa e intereses creados. Yo he hecho preguntas ante un micro que no me atrev¨ªa a hacer a mis familiares, amigas o m¨¦dicos... Vivimos en epidemias silenciosas en nuestra regi¨®n.
P. ?El tener que profesionalizarse merma esa libertad de discurso?
Sahag¨²n. A ver... (r¨ªe). Es verdad que ¨²ltimamente las marcas quieren sumarse a esa libertad de expresi¨®n, les resulta m¨¢s aut¨¦ntico. Aunque principalmente en Se regalan dudas nos buscan en el mes de marzo. ?Por qu¨¦ solo el mes de la mujer si creamos contenido igual el resto del a?o?
Frangie. Hemos tenido que educar a muchas marcas, hacerles la labor de investigaci¨®n sobre muchos asuntos relacionados con el formato, su relaci¨®n con las redes sociales y esos temas.
Salazar. Muchas marcas se equivocan al preferir crear el suyo propio, sumando uno m¨¢s al mar de t¨ªtulos que ya existen, en vez de sumarse a alguno que ya est¨¢ ah¨ª y funciona.
P. ?Qu¨¦ tendencias en audio auguran en la regi¨®n en el futuro inmediato?
Sahag¨²n. Lo que dec¨ªa antes. Al abrirse la puerta de comprar los derechos del podcast al mundo audiovisual, creo que van a comenzar a nacer t¨ªtulos en audio que piensen en imagen. Muchos escritores de cine y series est¨¢n empezando a ser contratados para escribir en audio.
Frangie. Ahora que ya se han probado muchos formatos en podcasts, partes de la cultura que consumen mucho contenido, como algunos deportes, van a conquistarlo. Vamos a poder crear contenidos muy espec¨ªficos: muy de nicho. Y, al aumentar los presupuestos, las productoras van a crear m¨¢s contenido scripted (guionizado).
Pay¨¢n. Las audiencias seguir¨¢n creciendo y globaliz¨¢ndose. Pero, al haber cada vez m¨¢s t¨ªtulos, habr¨¢ una doble tendencia: por un lado, a innovar para diferenciarse y, por otro, a una industria que ir¨¢ a lo seguro, con contenidos que cuesten poco y se vendan m¨¢s f¨¢cilmente sin incomodar a nadie.
Salazar. En el buen sentido de la palabra, temo el v¨ªdeo, porque llega para complicarlo todo...
Puedes seguir EL PA?S TELEVISI?N en Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.