Paloma del R¨ªo: ¡°Si alguien ha aprendido qu¨¦ es un triple axel, es que he hecho bien mi trabajo¡±
La comentarista de RTVE, apasionada del olimpismo, se despide tras 38 a?os dedicados al deporte femenino y a los minoritarios
Casi 38 a?os dedicados a las retransmisiones de deportes femeninos o minoritarios. Nueve Juegos Ol¨ªmpicos y otros siete de invierno. Paloma del R¨ªo (Madrid, 63 a?os) se ha convertido en una figura m¨ªtica. Recorrer con ella los pasillos aleda?os al tapiz de un mundial de gimnasia r¨ªtmica, que se celebra en Valencia, es como un v¨ªa crucis. Parada, foto. Parada, aut¨®grafo. Parada, palabras de gratitud. No dice que no a nadie. Le gusta lo que hace, lo que ha hecho, y eso se percibe cada vez que se ha abierto el micro desde el que, sabe, transmite emoci¨®n y se convierte en un espectador apasionado que, adem¨¢s, sabe contar lo que ve y ¡°as¨ª se pasa el tiempo volando¡±. Pero detr¨¢s de ese micro abierto hay horas de trabajo, de documentaci¨®n y an¨¢lisis. Incluso ahora, a d¨ªas de que, con su jubilaci¨®n, se apague esa c¨¢mara de RTVE y ese micr¨®fono. Pese a que con sus locuciones ha conseguido que miles de espa?oles sepan qu¨¦ es un doble planchado en gimnasia o un triple axel en patinaje, mantiene que prefiere la discreci¨®n, aconseja a las futuras generaciones que se preparen y habla de su carrera cuando ha llegado el momento del relevo.
Pregunta. ?Le queda algo por hacer dentro del periodismo deportivo?
Respuesta. Siguiendo la m¨¢xima de que los dos mayores acontecimiento son los Juegos Ol¨ªmpicos y la Final de la Copa del Mundo, ser¨ªa la Final de la Copa del Mundo pero no se me da muy bien el f¨²tbol. Pero, fuera de bromas, en lo que hago yo, en deportes minoritarios, me ha dado tiempo a hacer de todo, a cortar teletipos, hacer piezas para el telediario, ser redactora jefe, ser directiva y ser comentarista. Me ha dado tiempo para todo.
P. ?Qu¨¦ le ha dado la tele?
R. Sobre todo, satisfacciones porque me ha permitido hacer lo que ha sido mi pasi¨®n desde los seis a?os, que era el deporte. La vida me ha ido colocando en sitios en los que he podido hacer de manera libre, con ¨ªmpetu y vehemencia lo que m¨¢s me gustaba y especializarme en deportes que no quer¨ªa mucha gente y donde yo he encontrado mi sal¨®n de estar. Y me ha permitido conocer el mundo del olimpismo, que es un mundo aparte.
P. Y ?le ha quitado algo?
R. A lo mejor me ha quitado tiempo pero lo he dado por bien invertido. Esta dedicaci¨®n resta tiempo en momentos familiares importantes.
Sobre Rubiales: ¡°Me ha llamado la atenci¨®n tambi¨¦n el silencio clamoroso del mundo del f¨²tbol, m¨¢s all¨¢ de honrosas excepciones. El que calla, otorga¡±.
P. Debe ser dif¨ªcil destacar un recuerdo pero int¨¦ntelo.
R. Los mejores recuerdos est¨¢n asociados a los Juegos Ol¨ªmpicos, porque me apasiona el olimpismo, sus valores y el espect¨¢culo que da. Y los momentos en los que los deportistas espa?oles estaban a punto de conseguir una medalla. Ah¨ª pierdo el oremus. Me sudan las manos, empiezo con taquicardia, a valorar mentalmente las notas, las cuentas... por sentimentalidad, los de Barcelona, que ten¨ªan un punto especial, el encendido del pebetero y la medalla de plata de Carolina Pascual en r¨ªtmica.
P. ?Algo que preferir¨ªa olvidar?
R. El atentado de los Juegos de Atlanta del 96 y las medidas de seguridad en los Juegos de invierno de Salt Lake City tras los atentados del 11-S. Fue un calvario pasar los controles policiales.
P. ?C¨®mo ha cambiado la tele en estos casi 38 a?os?
R. Ha cambiado mucho, tambi¨¦n las retransmisiones gracias a la tecnolog¨ªa que ha permitido, para la parte t¨¦cnica, que con c¨¢maras m¨¢s peque?as se acceda a sitios donde antes no se pod¨ªa que nos dan una visi¨®n mayor. Para los comentaristas, la aparici¨®n de internet nos ha permitido tener acceso a una informaci¨®n que no ten¨ªamos. Yo, cuando viajaba, me dedicaba a buscar revistas y libros de gimnasia y patinaje porque en Espa?a solo hab¨ªa de f¨²tbol. La tecnolog¨ªa me ha permitido ahora tenerla en mi ordenador. Aporta datos, infograf¨ªas y estad¨ªsticas que enriquecen mucho. Luego, las redes sociales tienen un lado perverso pero tambi¨¦n la proximidad de quienes las utilizan de una manera sana, hacen preguntas y corrigen errores y no me importa que me critiquen pero con educaci¨®n.
P. Y el deporte, ?c¨®mo ha cambiado?
R. Se ha profesionalizado mucho. Barcelona 92, fue un punto de inflexi¨®n, las becas ADO, los patrocinadores y las ayudas a los deportistas funcionaron. Las grandes marcas se dan cuenta del beneficio que tiene la inversi¨®n en el deporte, les enriquece, tambi¨¦n fiscalmente. Cuanto m¨¢s dinero tengan, mejores medios, mejor calidad de entrenamiento, m¨¢s fisios, m¨¢s nutricionistas, m¨¢s psic¨®logos, m¨¢s instalaciones, mejores entrenadores... el dinero lo es todo.
P. Su primera retransmisi¨®n fue un partido de tenis de mesa...
R. Fue la primera vez que me pon¨ªa delante de un micro. Tuve la suerte de que jugaba y el reglamento me lo sab¨ªa. Pero las transmisiones no las ten¨ªa entrenadas. Ram¨®n Pizarro me aconsej¨® que escribiera la entradilla para que cuando Olga Viza me diera paso desde Barcelona no me entrara el tembleque y no supiera qu¨¦ decir. En ese momento me di cuenta de c¨®mo hay que cuidar el lenguaje y las formas. Dije cosas tan lindas como ¡°los jugadores se han dejado las bolas en la red¡±.
P. ?Fueron a?os complicados para ser mujer periodista deportiva?
R. Fuimos una generaci¨®n ca?era. Mari Carmen Izquierdo, Olga y Mercedes Mil¨¢ en Barcelona, Elena S¨¢nchez, Mari Cruz Esteban, Mar¨ªa Antonia Mart¨ªnez, Mar¨ªa Escario... Nos encontramos un grupo de mujeres que quer¨ªamos hacer periodismo deportivo y no entend¨ªamos por qu¨¦ no pod¨ªamos hacerlo. Tuve un par de jefes que se sentaban a mirarte con mirada lasciva. Uno de ellos lleg¨® a ponerme las manos en el pecho. Me di la vuelta y le pregunt¨¦ si le gustar¨ªa que se lo hiciera a su hija. Esa mentalidad la acabamos de ver hace cuatro d¨ªas. T¨² me perteneces como objetivo, puedo hacer contigo lo que me parezca. Hace 30 a?os ya no estaba bien y ahora tampoco.
Tuve un par de jefes que se sentaban a mirarte con mirada lasciva
P. Le tengo que preguntar por Luis Rubiales.
R. Es un asunto que nos vuelve a la realidad de lo que en muchas cabezas se sigue pensando. No es solo el beso, desde el palco, hasta la llegada a Espa?a. Hay personas que no le dan la importancia que yo le doy. Estaba representando a un pa¨ªs, con la Reina y la Infanta al lado, no era un hooligan, tiene un compromiso institucional y no puede hacer eso. En el c¨¦sped, ya lo han visto m¨¢s de cinco millones de personas en todos los pa¨ªses. Me ha llamado la atenci¨®n tambi¨¦n el silencio clamoroso del mundo del f¨²tbol, m¨¢s all¨¢ de honrosas excepciones. El que calla, otorga. ?Y los patrocinadores estar¨¢n contentos con lo que representa este se?or?
P. ?Cree que se hubiera podido dedicar al f¨²tbol si hubiera querido?
R. Seguramente. Mi t¨ªa me dijo cuando era peque?a que el mundo es de los intr¨¦pidos. El f¨²tbol no era lo que m¨¢s me gustaba, me llamaban m¨¢s la atenci¨®n otros deportes.
P. Uno de sus ¨²ltimos proyectos fue Ya no me quiero esconderme, en el que analiza la realidad LGTBI+ en el deporte en Espa?a. ?Le cost¨® hacerlo y convencer a sus jefes del proyecto?
Las redes sociales tienen un lado perverso pero tambi¨¦n la proximidad de quienes las utilizan de una manera sana, hacen preguntas y corrigen errores y no me importa que me critiquen pero con educaci¨®n
R. No, al contrario, fue un regalo del director C¨¦sar Vallejo. Cuando se enter¨® de que me jubilaba me dijo que ten¨ªamos que hacer algo en la web (RTVE Play) sobre el mundo del deporte y el mundo LGTBI. Hicimos uno de olimpismo, otro de f¨²tbol y otro de deporte base. El que m¨¢s nos cost¨® fue el del f¨²tbol. No quer¨ªa hablar nadie, ni siquiera heterosexuales. No quer¨ªan que ni se les asociara con ello.
P. ?Es m¨¢s f¨¢cil encontrar a mujeres que a hombres que hablen de su condici¨®n sexual?
R. S¨ª, s¨ª, los hombres no quieren. Las mujeres tienen menos resistencia, lo hacen con m¨¢s tranquilidad y naturalidad. No me creo que no haya futbolistas homosexuales en activo, salvo los dos o tres que se han manifestado.
P. Siempre se despide dando las gracias, muy insistentemente, a los telespectadores. Y lo hace tambi¨¦n durante las retransmisiones.
R. Claro. Ellos me hacen llegar sus apreciaciones, su cari?o y cr¨ªtica y es fundamental que yo les haga una retransmisi¨®n entretenida, que les d¨¦ las gracias por lo bien que nos lo pasamos juntos. A m¨ª se me pasan las horas volando, es verdad que acabo cansada pero me lo paso tan bien que se me pasan volando, igual que estos casi 38 a?os. Cuando quien retransmite se lo est¨¢ pasando bien, se nota.
P. Entender¨¢ tambi¨¦n que los espectadores quieran ahora, despu¨¦s de tantas buenas horas que nos ha hecho pasar, agradecer su trabajo...
R. Hoy me han dicho una cosa que me ha encantado. Es una cita de El perro del hortelano, de Lope de Vega: ¡°Yo me voy, se?ora m¨ªa, yo me voy, el alma no¡±. Mi cara es ahora m¨¢s visible pero estuve muchos que solo se conoc¨ªa mi voz. Me reconoc¨ªan en farmacias, cuando hac¨ªa la compra, cuando me llamaban para venderme seguros de vida y acab¨¢bamos acabando de gimnasia o de patinaje. Nunca he querido el estrellato. No s¨¦ si hubiera sido buena presentando, creo que no, pero s¨ª he sido buena haciendo transmisiones y hay una escuela. Quien quiera venir detr¨¢s tiene que estudiar mucho y entretener a los espectadores, que es de lo que se trata.
P. Adem¨¢s, es la responsable de que miles de espa?oles sepan qu¨¦ es un doble planchado en gimnasia o un triple axel.
P. Pues es una alegr¨ªa. La primera que tuvo que aprender lo que era fui yo. Si alguien ya puede distinguir un triple axel es que el trabajo est¨¢ bien hecho y que se lo ha pasado bien porque para distinguirlo hay que verlo muchas veces y eso es que la gente sigue las retransmisiones.
P. ?Ha preparado algo especial para su despedida, este domingo? Porque ya intent¨® evitar la emoci¨®n al terminar los ¨²ltimos Juegos Ol¨ªmpicos...
R. Intento mantener la compostura pero hay veces que se me quiebra la voz. Seguramente me pasar¨¢ el domingo porque cuelgo los cascos... Me quiero ir despacito, sin hacer ruido, de la manera m¨¢s humilde posible, dejando el sitio a las nuevas generaciones.
P. ?Qu¨¦ les aconseja a los que llegan o quieren llegar?
R. Que sean los m¨¢s preparados, con mayor documentaci¨®n en el deporte que sea, eso es lo que les va a distinguir.
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