¡®Bronca¡¯, la joya escondida de Netflix
Netflix nos tiene tan acostumbrados a ser un caj¨®n de sastre donde la cantidad se impone a la calidad y la originalidad brilla por su ausencia, que sus escasas joyas a veces pasan desapercibidas
Contaba Robert Louis Stevenson que el argumento de El extra?o caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde se le hab¨ªa aparecido en sue?os. Me habr¨ªa resultado m¨¢s cre¨ªble que se le hubiese ocurrido mientras conduc¨ªa un carruaje por las calles londinenses. Nada extrae m¨¢s r¨¢pido lo peor del ser humano que la conducci¨®n, tal vez s¨®lo las juntas de propietarios. Los que no poseemos coche ni vivienda tenemos vidas, no s¨¦ si m¨¢s largas, pero sin duda m¨¢s relajadas. He visto a las personas m¨¢s pac¨ªficas que conozco comportarse como ultras del Estrella Roja por un intermitente a destiempo.
No es casualidad que el detonante de Bronca sea una refriega entre conductores, ¨¦l en furgoneta, est¨¢ comprobado cient¨ªficamente ¡ªo igual no¡ª que ser aut¨®nomo potencia la ira habitual del conductor medio como las fresas realzan el sabor del champ¨¢n; ella en SUV, esa plaga que uniformiza las carreteras del mundo para completar una fantas¨ªa peque?oburguesa de libertad, habitualmente la libertad de ir y volver del centro comercial.
La miniserie de Netflix ha sido una de las triunfadoras de la fren¨¦tica semana de premios que acabamos de vivir, entre Globos de Oro, Critics Choice Awards y Emmys se ha metido en la buchaca 15 galardones. La soberbia Ali Wong ¡ªsus especiales de comedia son descacharrantes¡ª y Steven Yeun, el sufrido Glenn de The Walking Dead, han hecho pleno. Nada desentona en la serie que ofrece la muerte m¨¢s absurda y espeluznante de la temporada.
Tal vez la visibilidad que otorgan los premios le d¨¦ el impulso que se merece una serie extraordinaria, su estreno en abril apenas tuvo repercusi¨®n. Quiz¨¢s porque Netflix nos tiene tan acostumbrados a ser un caj¨®n de sastre donde la cantidad se impone a la calidad que sus escasas joyas pasan desapercibidas.
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