Ester Exp¨®sito, Dani Mart¨ªn y las del Palmar
Lo que se lee entrel¨ªneas en esa canci¨®n no es para nosotros
Desde que Spotify se populariz¨®, los singles vuelven a ser singles. Ahora, adem¨¢s, los singles, am¨¦n de ser pegadizos, han de hablar de los eloi (esos hedonistas seres del futuro wellsiano) y sus desamores, para que los morlock (subhumanos sin conciencia, de la misma pluma) tengamos qu¨¦ bailar mientras nos arrastramos por el s¨®tano del mundo. Una bonita forma de poner a un lado nuestros problemas para contemplar y opinar de esos eloi m¨¢s ricos, m¨¢s guapos, y m¨¢s sofisticados.
No s¨¦ si Dani Mart¨ªn es rico. Supongo que mal no le ir¨¢. La madre de Jos¨¦, que debe de andar por Benidorm disfrutando de una muy merecida jubilaci¨®n, tiene edad para ser la abuela de Ester Exp¨®sito, musa veintea?era a la que Dani Mart¨ªn le ha dedicado una canci¨®n de amor, a ver si suena la flauta. No puedo unirme a la cr¨ªtica furibunda de mis compa?eros de subsuelo. A mi me ha hecho gracia esa letra llena de nombre propios y locales gaditanos. Yo veo aqu¨ª una pel¨ªcula de Judd Apatow. El argumento: un cantante pop se pilla con una estrella de cine que naci¨® cuando ¨¦l ya era famoso. Le escribe una canci¨®n para hacerse el encontradizo en el Carbones 13 (famoso local tarife?o donde va este tipo de gente) s¨®lo para comprobar que a su amada le gusta la m¨²sica zarriosa que destron¨® al pop. Ella se enamorar¨¢ de un soplagaitas (Rauw Alejandro, por ejemplo) y ¨¦l, tras varios c¨®micos intentos, se dar¨¢ cuenta de que la joven le ve como ¨¦l ver¨ªa, por ejemplo, a Sara Montiel. Divertida historia que, por desgracia, no podr¨¦ presenciar. Porque soy al¨¦rgica tanto a los locales de Tarifa como a sus moradores. S¨®lo espero que con ¡°las chicas del Palmar¡± se refiera a unas que vienen del Palmar de Troya. No ser¨¢ as¨ª. Lo que se lee entrel¨ªneas en esa canci¨®n no es para nosotros, los morlocks. La canci¨®n (que est¨¢ muy bien) la bailar¨¢n se?oras de mediana edad en karaokes de barrio y fiestas de pueblo, so?ando que eso de ¡°por qu¨¦ no me miras si la escrib¨ª por nosotros¡± se lo dice Mart¨ªn a ellas. Esas se?oras, su p¨²blico, jam¨¢s se cruzar¨¢n con Dani Mart¨ªn, ni sus hijos con Ester Exp¨®sito. ¡°Vuelve el pobre a su pobreza, vuelve el rico a su riqueza, y el se?or cura a sus misas¡±, cant¨® Serrat, rematando ¡°Vamos bajando la cuesta, que arriba en mi calle, se acab¨® la fiesta.¡±
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