Interrogatorios, amenazas, decomisos y exilio: la ¨²ltima arremetida del Gobierno cubano contra los periodistas independientes

En horas de la tarde del jueves la periodista cubana Mar¨ªa Luc¨ªa Exp¨®sito escribi¨® que le encantar¨ªa que su salario ¡°subversivo¡± fuese suficiente para ayudar a su hermana m¨¦dica, quien por un mes de trabajo en Cuba gana el equivalente a un batido de helado. O que le gustar¨ªa poder cubrir los gastos en medicamentos de su abuelo, cuya jubilaci¨®n por m¨¢s de 40 a?os no rebasa los 2.000 pesos (poco m¨¢s de seis d¨®lares. Hace unos d¨ªas la joven fue citada por agentes de la Seguridad del Estado cubano, quienes en m¨¢s de seis horas de interrogatorio no solo cuestionaron su v¨ªnculo con medios independientes y su participaci¨®n en un curso formativo de periodismo, sino que le decomisaron 1.000 d¨®lares de su salario. ¡°?Por qu¨¦ no se pronuncian las universidades respecto al desamparo y vulnerabilidad de sus egresados?¡±, se pregunt¨® Exp¨®sito en un largo post que public¨® a trav¨¦s de una amiga, porque su cuenta de Facebook est¨¢ inhabilitada. ¡°?Por qu¨¦ mis seres queridos y allegados me han aconsejado abandonar cuanto antes mi pa¨ªs?¡±, agreg¨®.

En las ¨²ltimas horas han comenzado a florecer en redes sociales algunas denuncias por parte de periodistas, colaboradores, creadores de contenido o activistas, en lo que se anuncia como otra gran cacer¨ªa contra la prensa independiente por parte del Gobierno cubano. Interrogatorios de hasta 12 horas, el decomiso de salarios o equipos de trabajo, las amenazas con la c¨¢rcel a los implicados o sus familiares son algunas formas de proceder por parte de los agentes que, de forma an¨®nima, intentan desactivar una vez m¨¢s cualquier intento de actividad alternativa a la estatal. Periodistas de los medios Periodismo de Barrio, Cubanet o El Toque se han visto obligados a abandonar su trabajo, incluso el pa¨ªs, o a dimitir de su actividad profesional de manera p¨²blica. En varios posts de Facebook, algunos firmaron este jueves una declaraci¨®n en la que renuncian ¡°a colaborar y/o participar en cualquier medio de comunicaci¨®n o proyecto de car¨¢cter independiente y/o considerado subversivo o contrario a los intereses del Gobierno cubano¡±.

Es una arremetida que, seg¨²n los implicados, ha cobrado fuerza desde el pasado mes de septiembre. Una de las primeras en hacer p¨²blica la situaci¨®n fue la revista musical Magazine AM:PM cuyos directivos, a trav¨¦s de un editorial, anunciaron que har¨ªan ¡°una pausa indefinida¡±. Aunque no ofrecieron muchos m¨¢s detalles, la causa ser¨ªa ¡°la creciente presi¨®n y acoso¡± a su director por parte de ¡°los ¨®rganos de contrainteligencia cubanos¡±, que no les permiten ¡°aplicar a fondos¡± y ¡°pone en peligro la integridad¡± del proyecto y el equipo.

La directora de Periodismo de Barrio, Elaine D¨ªaz, denunci¨® en X la represi¨®n desatada por parte del Gobierno, la citaci¨®n en las ¨²ltimas horas a al menos 20 periodistas, activistas o emprendedores y asegur¨® que lo han hecho ¡°de la ¨²nica manera en que saben hacerlo, usando la tortura psicol¨®gica¡±. El Toque, un medio al que el Ejecutivo cubano ha tenido en la mira de manera particular en los ¨²ltimos tiempos, ha denunciado la represi¨®n sostenida contra sus colaboradores e insistido en que ¡°no es nueva¡±. Tambi¨¦n alertaron de ¡°la posible implementaci¨®n de un proceso judicial carente de garant¨ªas que puede desembocar en una acusaci¨®n¡± contra miembros de su equipo. A algunos de los afectados les han hecho grabar ¡°mea culpas¡± que se espera luego sean televisados.

Son estrategias a las que el Gobierno ha acudido antes. En 2016 hubo un despertar de medios independientes en la Isla cuyos periodistas luego fueron obligados a la renuncia p¨²blica, sometidos a interrogatorios, multas, amenazas o arrestos domiciliarios. La mayor¨ªa vive hoy en el exilio. Antes tambi¨¦n hab¨ªa sucedido lo mismo con otros emprendimientos, iniciativas o medios que intentaron contar Cuba desde dentro. La respuesta siempre ha sido la misma: la ¨²nica versi¨®n de lo que acontece en la isla puede ser contada exclusivamente por la prensa estatal, y no hay cabida para nada que rebase esos m¨¢rgenes.

Solamente en los ¨²ltimos dos a?os, se contabilizan al menos unos 150 periodistas cubanos exiliados. Tambi¨¦n el Gobierno ha oficializado la censura con leyes que regularizan el castigo a la libertad de expresi¨®n. As¨ª est¨¢n vigente la Ley de Comunicaci¨®n, que declara ilegal el trabajo de los medios independientes; el Decreto Ley 370, bajo el que muchos han recibido multas que exceden cualquier salario en la Isla o el C¨®digo Penal, que tipifica al ¡°mercenarismo¡± y con el que inculpan a quien, seg¨²n las autoridades, recibe fondos o tienen que ver con alg¨²n tipo de actividad relacionada con un gobierno extranjero, casi siempre Estados Unidos.

El abogado cubano Raudiel Pe?a Barrios, miembro del grupo de asesor¨ªa legal Cubalex, explic¨® a EL PA?S que en esta nueva ola represiva las autoridades ¡°est¨¢n amenazando con delitos que est¨¢n en el C¨®digo Penal¡±. Seg¨²n dice, en Cuba existen diferentes ¡°tipos penales que se han utilizado contra periodistas independientes, opositores pol¨ªticos, activistas y defensores de los derechos humanos como el delito de propaganda contra el orden constitucional, o todos los delitos que incluyen remisiones a la recepci¨®n de fondos desde el exterior. Tambi¨¦n pudieran emplear el desacato, la actividad econ¨®mica il¨ªcita, los des¨®rdenes p¨²blicos. Todos son posibles delitos que se pueden emplear contra estas personas¡± y que algunos implican hasta 10 a?os de c¨¢rcel.

Es una realidad hom¨®loga a otras que han estado teniendo lugar en la regi¨®n, en pa¨ªses con reg¨ªmenes totalitarios. Un informe del Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS) revel¨® que en Venezuela el 85,63 % de los periodistas consultados hab¨ªan salido del pa¨ªs por las restricciones al ejercicio del periodismo y una persecuci¨®n que va desde detenciones arbitrarias, censura, hostigamiento judicial, riesgo de desaparici¨®n forzada y tortura, entre otras. Recientemente la Fundaci¨®n por la Libertad de Expresi¨®n y Democracia (FLED) declar¨® que al menos 263 periodistas nicarag¨¹enses se hab¨ªan exiliado desde 2018 por las mismas razones: amenazas, censura, persecuci¨®n, violaciones a la libertad individual y de expresi¨®n.