Temor a una persecuci¨®n racial a gran escala por el registro de migrantes anunciado por Trump

Algunos lo han llegado a comparar con coser una estrella en la solapa de un abrigo en la Alemania nazi. Otros prefieren ser m¨¢s cautelosos y no expresan sus temores con palabras tan cargadas. Pero el temor existe. El registro de migrantes indocumentados anunciado por la Administraci¨®n de Donald Trump ha generado miedo, o m¨¢s bien, se ha sumado al miedo ya existente, y pinta un escenario en el cual una persecuci¨®n racial desatada a gran escala en Estados Unidos se vuelve m¨¢s plausible.

¡°Los inmigrantes sin papeles ya son expulsables dada su presencia sin autorizaci¨®n en el pa¨ªs. As¨ª que esto parece ser menos sobre crear nuevas condiciones para justificar expulsiones y m¨¢s sobre darle al Gobierno una herramienta adicional para identificar individuos y generar otra capa de mensajes que dejan claro que la Administraci¨®n Trump usar¨¢ toda autoridad a su disposici¨®n para llevar a cabo su misi¨®n de deportaci¨®n. Por lo tanto, insta a las personas a ¡®autodeportarse¡¯¡±, analiza Michelle Mittelstadt, portavoz del Migration Policy Institute.

La medida anunciada hace una semana obligar¨¢, cuando entre en vigor, aunque no hay un plazo claro para ello, a los migrantes indocumentados mayores de 14 a?os que lleven m¨¢s de 30 d¨ªas en el pa¨ªs a facilitar su informaci¨®n personal, sus huellas dactilares y lugar de residencia. Los padres o responsables legales de menores tambi¨¦n deber¨¢n registrarse. De acuerdo al documento explicativo publicado por los Servicios de Ciudadan¨ªa e Inmigraci¨®n de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en ingl¨¦s), infringir la norma podr¨¢ llevar a penas civiles o penales, as¨ª como a multas de hasta 5.000 d¨®lares. Los inmigrantes que hayan aplicado a asilo o hayan pedido un permiso de trabajo no deber¨¢n registrarse, pues las autoridades ya tienen sus datos.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), que est¨¢ detr¨¢s de la medida, est¨¢ en realidad dando cumplimiento a uno de los tantos decretos firmados por el presidente Trump en su primer d¨ªa en el Despacho Oval. ¡°La Administraci¨®n de Trump har¨¢ cumplir todas nuestras leyes de inmigraci¨®n; no elegiremos qu¨¦ leyes aplicaremos¡±, dijo un portavoz del DHS el martes a la agencia Reuters. ¡°Debemos saber qui¨¦n est¨¢ en nuestro pa¨ªs para la seguridad de nuestra patria y de todos los estadounidenses¡±, agreg¨®, manteniendo el mensaje de que los inmigrantes son una amenaza existencial para Estados Unidos.

Por lo tanto, Elizabeth Taufa, abogada y estratega del Immigrant Legal Resource Center, una organizaci¨®n que da apoyo legal a migrantes, asegura que el anuncio no ha llegado como una sorpresa en los c¨ªrculos de expertos y defensa de los derechos de migrantes, pero que la incertidumbre viene ahora, con c¨®mo se implementar¨¢ y si tendr¨¢ alguna eficacia operativa. ¡°Es muy amplio, y eso es precisamente una de las cosas realmente maliciosas dentro de la medida: que solo se anuncia a cuentagotas. No hay mucha informaci¨®n, solo quienes van a estar sujetos a la medida y que van a ser penalizados. No existe el sistema de registro a¨²n ni siquiera... Por ahora nuestro consejo es que la gente tenga paciencia y espere a cuando haya m¨¢s informaci¨®n¡±.

Una de las cuestiones que m¨¢s dudas genera es que el registro requiere que las personas acudan por su propia voluntad, algo improbable si el resultado probable es la deportaci¨®n, cargos civiles o penales, o una multa. ¡°No parece haber ninguna ventaja para alguien que da un paso adelante y se registra. Si dan su informaci¨®n, la consecuencia es que empezar¨¢n los procedimientos de deportaci¨®n. Y si no se presenta, le pueden cargar con un delito menor y asignar una multa¡±, dice Taufa.

Entre los expertos, el conjunto de medidas y la campa?a de comunicaci¨®n cuidadosamente elaborada por la Administraci¨®n Trump desde que lleg¨® al poder presenta un gran paralelismo con las acciones llevadas a cabo tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, cuando amplios sectores del Gobierno federal se pusieron al servicio de la misi¨®n de seguridad nacional. Precisamente, esta es la ¨²ltima vez que se implement¨® la ley que requiere el registro de la poblaci¨®n extranjera. ¡°La diferencia fundamental es que las acciones posteriores al 11-S fueron una respuesta a un ataque real en suelo estadounidense, mientras que la ret¨®rica actual sobre la ¡®invasi¨®n¡¯ y la llegada de hombres extranjeros ¡®en edad militar¡¯ con la intenci¨®n de construir un ¡®ej¨¦rcito¡¯ no se corresponde con la realidad¡±, ahonda el Migration Policy Institute en un comunicado publicado en respuesta a la agenda migratoria de Trump.

La directora ejecutiva de la red de organizaciones latinoamericanas al servicio de inmigrantes Alianza Americas, Dulce Guzm¨¢n, ha condenado en¨¦rgicamente el registro de migrantes, resumiendo la sensaci¨®n que ha desatado entre la comunidad migrante: ¡°Esta pol¨ªtica no es solo una medida administrativa, es una peligrosa herramienta de vigilancia y criminalizaci¨®n que recuerda algunos de los cap¨ªtulos m¨¢s da?inos de la historia, incluyendo las t¨¢cticas utilizadas por Adolf Hitler para registrar, rastrear y, en ¨²ltima instancia, perseguir poblaciones enteras. Todos debemos luchar contra esta persecuci¨®n¡±.