Lo que calla el Ministerio del Trabajo
Decirle no a la reforma laboral planteada desde el punto de vista del trabajador es un absurdo. Decirle s¨ª a la reforma laboral desde la perspectiva del empresario resulta complicado
?Qui¨¦n como empleado de una empresa, la que sea, no quisiera tener mejores ingresos, m¨¢s beneficios, y sobre todo una compensaci¨®n justa cuando se trabaja mientras la mayor¨ªa descansa? ?Qui¨¦n como trabajador no quisiera tener m¨¢s y m¨¢s garant¨ªas de no perder su trabajo de un d¨ªa para otro? Estas dos preguntas son columna vertebral de las premisas que componen la reforma laboral que empieza a discutirse en el Congreso. El Gobierno la tiene f¨¢cil en t¨¦rminos de respaldo popular creando un escenario dicot¨®mico en donde el empleador es el malo de la pel¨ªcula y el empleado es v¨ªctima de un sistema que solo explota a la clase trabajadora.
?Que los salarios en Colombia son bajos? S¨ª. ?Qu¨¦ hace m¨¢s de 20 a?os a los colombianos nos quitaron unos beneficios en horas extras y que estos deber¨ªan recuperarse? S¨ª. ?Qu¨¦ los empresarios deber¨ªan ser m¨¢s solidarios con sus trabajadores? Es probable, aunque hay algunos que ya lo son. Decirle no a la reforma laboral planteada desde el punto de vista del trabajador es un absurdo. Decirle s¨ª a la reforma laboral desde la perspectiva del empresario resulta complicado. Es un asunto de c¨¢lculo que el Gobierno sabe bien que los trabajadores no se detendr¨¢n a hacer, pero es innegable que como resultado la sostenibilidad de algunas empresas se puede afectar.
Pero m¨¢s all¨¢ de la reforma laboral que, insisto, tiene muchos puntos v¨¢lidos y necesarios, es urgente hablar de lo que calla el Ministerio del Trabajo. ?O acaso no se han puesto a contar la cantidad de veces que la ministra o el viceministro de Trabajo escurren el bulto cuando se les pregunta sobre formalizaci¨®n del empleo? ?Ser¨¢ que el Gobierno Petro tendr¨¢ que crear un Ministerio del Trabajo Informal para que alguien le ponga cuidado a ese problema que de resolverse podr¨ªa ayudar a darle un nuevo dinamismo a nuestra econom¨ªa?
El Gobierno saca pecho y se enorgullece de una tasa de desempleo que poco a poco ha ido descendiendo, ubic¨¢ndose justo encima del 10%. Pero decir que hay una mayor¨ªa de personas ocupadas es un sofisma cuando se mira en detalle y se nota que del total de trabajadores m¨¢s del 55% est¨¢n en el trabajo informal. En pocas palabras, la tan anhelada reforma laboral nada le va a cambiar a m¨¢s de la mitad de los colombianos que est¨¢n hoy trabajando. No habr¨¢ horas extras, ni dominicales para ellos. No habr¨¢ estabilidad reforzada, ni sindicatos poderosos. No habr¨¢ ning¨²n cambio. Seguir¨¢n trabajando a destajo, con ingresos inestables, sin garant¨ªa de pensi¨®n digna, sin vacaciones, sin derechos laborales.
Mejor no hablemos de porcentajes, hacer eso es bastante gaseoso y no le pone peso al drama real que enfrentan aquellos que est¨¢n en la informalidad. Si tomamos como base el ¨²ltimo reporte del DANE sobre empleo, en Colombia hay m¨¢s de 12.600.000 personas trabajando en las condiciones antes mencionadas. ?Y de eso no se habla? ?Para eso no hay soluci¨®n? ?No son aquellos que est¨¢n en la informalidad los m¨¢s vulnerables? Extra?o que un Gobierno que dice trabajar para los m¨¢s d¨¦biles escape de este debate.
Vale la pena recordar que reci¨¦n lleg¨® a la Presidencia, Gustavo Petro lanz¨® una defensa a los vendedores ambulantes porque perseguirlos era afectar el ingreso de un hogar. De acuerdo. Pero valdr¨ªa la pena preguntarse si m¨¢s all¨¢ de esa protecci¨®n no se ha pensado en un necesario proceso de formalizaci¨®n. Eso les cambiar¨ªa la vida a ellos y mejorar¨ªa los ingresos del Estado. Pero de eso no se habla.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.