Juanita Le¨®n y Vicky D¨¢vila se robaron el show

Hac¨ªa mucho rato que la reuni¨®n anual de un gremio no se convert¨ªa en el escenario principal del debate nacional, por encima del Parlamento. Sucedi¨® en la 58? reuni¨®n de la convenci¨®n de la Asociaci¨®n Bancaria, reunida en Cartagena al final de la semana pasada. Hab¨ªa m¨¢s de 2.000 asistentes y por primera vez en la historia de las reuniones de este tipo hubo dos periodistas que tuvieron intervenciones magistrales: Juanita Le¨®n, de La Silla Vac¨ªa, y Vicky D¨¢vila, de la revista Semana, a diferencia del papel usual que es moderar paneles y hacer entrevistas a los directores de las instituciones financieras y autoridades gubernamentales, incluido el presidente de la Rep¨²blica, los ministros del Despacho y los miembros de la junta del Banco de la Rep¨²blica.

En esta ocasi¨®n, el director de la Asociaci¨®n Bancaria y exministro Jhonatan Malag¨®n demostr¨® por qu¨¦ son¨® como posible ministro de Hacienda del anterior Gobierno. Domina el tema econ¨®mico. Organiz¨® una Asamblea impecable en la que todos los medios les dieron primera p¨¢gina a sus noticias con grandes titulares, incluidas las im¨¢genes de marca de los patrocinadores. Hab¨ªa tantos parlamentarios en el auditorio que el embajador en Londres, Roy Barreras, coment¨® que hab¨ªa qu¨®rum para deliberar. Sin embargo, no hubo ning¨²n miembro del Congreso que hubiese intervenido en el certamen. Al menos no vi registro alguno en ese sentido.

La directora de La Silla Vac¨ªa hizo una corta y sustanciosa intervenci¨®n para defender el papel del periodismo en la actual coyuntura. El mayor aporte de los medios es el rigor de la reporter¨ªa de los hechos. ¡°Solo el dato mata el relato¡±. No abandonar la reporter¨ªa de los hechos. En menos de 10 minutos describi¨® los hechos que para ella constituyen el relato del presidente Petro para confrontar a cambio de conciliar. Record¨® c¨®mo en Venezuela el periodismo abandon¨® la reporter¨ªa para opinar y hacer pol¨ªtica. Critic¨® el cambio de la estrategia de mercado de los medios, mediante la cual las suscripciones sustituyeron a la pauta e invitan al odio. Entre m¨¢s se odia m¨¢s se vende.

La directora de Semana, por su parte, calific¨® al sector privado de ser el mecanismo indispensable para el buen futuro de la naci¨®n, en especial para los pobres. No a la lucha de clases. No al odio a los empresarios. Relat¨® la manera de ejercer el periodismo asumiendo todos los riesgos. Dijo que viv¨ªa exclusivamente de su salario, que era muy bueno. Present¨® una relaci¨®n de las denuncias hechas por la revista Semana con las im¨¢genes de sus car¨¢tulas. ¡°El presidente no respeta a los periodistas. Constantemente nos pone en peligro cuando nos llama mentirosos, nos hostiga en p¨²blico y alimenta las bodegas de sus fan¨¢ticos, muchos con jugosos contratos en el Gobierno. Contratos que pagamos todos¡±. ¡°Ustedes¡±, se?al¨® mirando al auditorio, ¡°tienen que defender a la prensa, la prensa libre es democracia¡±.

El ¡°hurac¨¢n Vicky¡±, como lo calific¨® el diario El Colombiano de Medell¨ªn, levant¨® la protesta del embajador Roy Barreras: ¡°Es lamentable que, abusando de su generosa invitaci¨®n, Vicky D¨¢vila haya usado este escenario de conversaciones para una diatriba de odio y veneno. Un refrito de sus viejas car¨¢tulas que solo siembra odio y alimenta la polarizaci¨®n que le sirve a ella en su evidente ambici¨®n de ser la candidata de la extrema derecha¡±, concluy¨® el diplom¨¢tico.

El hecho cierto es que los asistentes le rindieron una gran ovaci¨®n a las periodistas y las dem¨¢s intervenciones de los invitados principales ¡ªel exvicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y el gerente del Banco de la Rep¨²blica, Leonardo Villar¡ª pasaron a mejor vida.

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