La grave crisis financiera amenaza con quebrar todo el sistema de salud de Colombia
Aunque se discute si la desfinanciaci¨®n es de 5,9 o de 14 billones de pesos, hay consenso en la aguda falta de dinero
El sistema de salud de Colombia vive una de sus peores crisis financieras desde que se cre¨® en 1993. Las Entidades Promotoras de Salud (EPS), encargadas de asegurar la prestaci¨®n de servicios de todos los ciudadanos, gastan m¨¢s dinero del que reciben del Estado para ese fin. Es un d¨¦ficit que se ha agudizado en los dos ¨²ltimos a?os y tiene efectos directos en toda la cadena, desde las cl¨ªnicas y hospitales, hasta los m¨¦dicos y enfermeros, pasando por los laboratorios, las farmac¨¦uticas que fabrican medicamentos y, sobre todo, la atenci¨®n que reciben los pacientes. Todos los actores del sistema y todos los sectores pol¨ªticos reconocen la gravedad de una crisis en la que coinciden, parad¨®jicamente, el presidente Gustavo Petro y sus peores detractores. El debate est¨¢ en qu¨¦ ha generado el problema y c¨®mo resolverlo.
En promedio, seg¨²n informaci¨®n de la ANDI, en lo corrido de 2024 las EPS han gastado 109 pesos por cada 100 que han recibido. La m¨¢s grande, Nueva EPS con 10 millones de afiliados, intervenida por el Gobierno desde hace meses, tiene un d¨¦ficit superior a esa media. En junio gast¨® 126 pesos por cada 100 que recibi¨®; en agosto, el ¨²ltimo dato disponible, 118 por cada 100. La EPS Sanitas, tambi¨¦n intervenida y con m¨¢s de 5 millones de usuarios, tiene esta tasa m¨¢s baja, pero tambi¨¦n opera a p¨¦rdida, al gastar 104 pesos por cada 100 que recibe. En total, el hueco suma entre 5,9 billones de pesos y 14 billones, dependiendo de qui¨¦n lo mida.
Hace unos d¨ªas, en la posesi¨®n de Giovanni Rubiano como superintendente de Salud, el presidente reconoci¨® la crisis. Dijo que ¡°el sistema no se puede autosostener¡± e insisti¨® en que se cae ¡°como un domin¨®¡±. Petro culp¨® a los congresistas, que hundieron la reforma a la salud que present¨® en 2023 y no han aprobado la nueva. ¡°La demora del Congreso de la Rep¨²blica en aprobar la ley, la reforma que es para salvar el sistema, pues ha profundizado su crisis. Esa es la realidad. Entre m¨¢s d¨ªas pasen, m¨¢s se profundiza¡±, argument¨®. El presidente insiste en que el principal motivo del d¨¦ficit es la corrupci¨®n en muchas EPS. Por eso, propone transformarlas de tal forma que ya no manejen los recursos del sistema, sino que reciban una comisi¨®n por sus gestiones de coordinaci¨®n y auditor¨ªa.
Diana C¨¢rdenas, economista de la Universidad Nacional y una de las mayores expertas en las finanzas del sistema, concuerda en la magnitud de la crisis, pero discrepa del an¨¢lisis del presidente. ¡°La relaci¨®n de ingresos y gastos, reflejada en la siniestralidad de las EPS, es negativa¡±, dice por tel¨¦fono. La viceministra de Salud del Gobierno de Iv¨¢n Duque explica que el problema viene de atr¨¢s, pero en los dos ¨²ltimos a?os se ha complicado debido a que el Gobierno se ha negado a darle el dinero requerido a las EPS. Se?ala que el valor que el Estado paga a las EPS por cada afiliado, la Unidad de Pago por Capitaci¨®n o UPC, es insuficiente. Lo mismo ocurre con los presupuestos m¨¢ximos, el recurso que les asigna para financiar servicios y tecnolog¨ªas que no cubre la UPC. ¡°Los recursos totales del sistema no alcanzan¡±, dice C¨¢rdenas, y aclara que la carencia aqueja a las EPS administradas por privados y a las que maneja el Estado. ¡°Si todas tienen el mismo problema, es porque de verdad la plata no es suficiente¡±.
Con ella coincide Andr¨¦s Vecino, investigador de sistemas de salud de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos. ¡°La UPC siempre ha estado mal calculada, pero la brecha se increment¨® a partir de 2022, hasta hoy¡å. Seg¨²n distintas entidades, en 2024 deb¨ªa aumentar 16%, pero el Gobierno la increment¨® 12%. Adem¨¢s, tres de esos puntos porcentuales se destinaron a aplicar su cobertura a nuevas tecnolog¨ªas, por lo que el desfase real se calcula en seis puntos porcentuales. Eso equivale m¨¢s o menos a dejar de inyectar 5 billones de pesos al sistema al a?o. A eso se le suma que este a?o el Ministerio utiliz¨® 2,5 billones de ese dinero para fortalecer la infraestructura hospitalaria p¨²blica.
Uno de los efectos m¨¢s graves de este d¨¦ficit ha sido el aumento de las deudas con las cl¨ªnicas y hospitales. La Asociaci¨®n Colombiana de Hospitales y Cl¨ªnicas ha denunciado esta semana que entre diciembre de 2023 y junio de 2024 aumentaron en 2,1 billones de pesos las deudas de las EPS a sus prestadores. ¡°A 225 instituciones prestadoras de servicios de salud que reportaron informaci¨®n se les adeudan un total aproximado de 18,9 billones de pesos, lo que representa un incremento de 12,8%¡±.
Hay otros efectos evidentes de la crisis. De acuerdo con el centro de pensamiento As¨ª Vamos en Salud, en el primer cuatrimestre de 2024 aument¨® en 42% el n¨²mero de tutelas que buscan la protecci¨®n del derecho a la salud, en comparaci¨®n al mismo periodo de 2023. Las que m¨¢s subieron fueron las relacionadas con el suministro de medicamentos, un 77 %. Adem¨¢s, el DANE inform¨® que en el segundo trimestre de 2024 el gasto directo que hacen los hogares en la salud, que es muestra de que el sistema tiene falencias, subi¨® un 5,1 % frente al mismo periodo del a?o anterior.
Sin embargo, Vecino asegura por tel¨¦fono que lo m¨¢s grave de la desfinanciaci¨®n es que ha llevado a una crisis de confianza que parece irreversible. ¡°Es la p¨¦rdida m¨¢s importante. Es dif¨ªcil de cuantificar, pero es evidente. Se est¨¢n empleando menos personas en el sector, ha habido una reducci¨®n en la inversi¨®n en salud del 50%, el apalancamiento de cr¨¦dito es muy bajo¡±, dice el profesor. Se?ala que todo eso se debe a que los actores no tienen la certeza de que les vayan a pagar, lo que explica que EPS con buenos indicadores, como Sura y Compensar, dejen el negocio. Vecino recuerda que antes del 31 de diciembre el Gobierno debe definir el valor de la UPC de 2025. ¡°Esta decisi¨®n ser¨¢ de vida o muerte para el sistema de salud¡±.