James Rodr¨ªguez rescinde su contrato con el Rayo Vallecano y queda como jugador libre
El volante colombiano se desliga del equipo espa?ol cuatro meses despu¨¦s de ser contratado y suma su sexta desvinculaci¨®n de clubes desde 2020
La tendencia con James Rodr¨ªguez se mantiene: el volante colombiano, el mejor jugador de la pasada Copa Am¨¦rica, ha rescindido este lunes su contrato con el Rayo Vallecano de Madrid y queda ahora como agente libre, con la posibilidad de negociar su vinculaci¨®n con otro club. Brillante siempre en sus actuaciones con la Selecci¨®n Colombia, el diez cucute?o ha tenido una carrera irregular en los clubes en los que ha militado: tras sus a?os exitosos en el Real Madrid despu¨¦s del mundial de 2014, y un breve paso por el Bayern M¨²nich alem¨¢n, James entr¨® en una espiral de inconstancia que lo ha llevado a apartarse antes de tiempo de seis clubes desde 2020: del Real Madrid en su segunda etapa, del Everton de Inglaterra, del Al Rayyan de Qatar, del Olympiakos de Grecia y del Sao Paulo de Brasil.
El volante colombiano lleg¨® a Madrid tras su alt¨ªsimo desempe?o en la Copa Am¨¦rica de 2024, en la que Colombia fue subcampeona. En aquel torneo, las dudas que exist¨ªan sobre la forma f¨ªsica y la calidad del juego de James quedaron todas disueltas. Fue el eje sobre el que se mov¨ªa el equipo nacional, que fue acumulando victorias y grandes actuaciones hasta su ca¨ªda en la final ante Argentina. Con ese precedente, la hinchada del equipo de Vallecas esperaba un desempe?o que no desentonara, para un equipo con ansias de festejar por todo lo alto su centenario. El colombiano parec¨ªa ser la guindilla del pastel de celebraci¨®n y a finales del verano acord¨® su vinculaci¨®n. Recib¨ªa el testigo de Falcao Garc¨ªa, su otrora llave en la Selecci¨®n, quien tuvo un paso poco relevante aunque cordial por Vallecas hasta que se vincul¨® a Millonarios de Bogot¨¢ en junio.
No obstante, pronto volvieron a aparecer los fantasmas que siempre pusieron un signo de interrogaci¨®n sobre la figura de James. Desde el comienzo fue relegado a la suplencia, entraba a disputar pocos minutos y, cuando pod¨ªa hacerlo, con frecuencia el resultado estaba en contra y el tiempo no era suficiente para revertirlo. El entrenador del equipo, el navarro ??igo P¨¦rez, desminti¨® cualquier mala relaci¨®n con el centrocampista, pero su insistencia en dejarlo en el banquillo de emergentes mantuvo siempre la idea de un roce mutuo y de que la llegada de James obedec¨ªa m¨¢s a intereses de empresa que futbol¨ªsticos. P¨¦rez no incluy¨® en sus planes a un jugador que llegaba aclamado casi que por unanimidad tras la Copa Am¨¦rica y con una pierna zurda derrochando talento, y para el final de 2024 apenas hab¨ªa disputado siete partidos en toda la temporada. Su equipo marcha 12¡ã en la tabla de la liga espa?ola con 22 puntos.
Ese aparente roce con P¨¦rez hizo recordar, adem¨¢s, las tensiones jam¨¢s disimuladas con otros entrenadores de sus clubes en el pasado. Despu¨¦s de consolidarse como un pupilo fiel del italiano Carlo Ancelotti, quien logr¨® potenciarlo en el Real Madrid, en el Bayern M¨²nich y en el Everton, las relaciones dif¨ªciles con la mayor¨ªa de entrenadores posteriores en clubes le han pasado factura a James. Primero en el Madrid con el franc¨¦s Zinedine Zidane, quien tambi¨¦n lo releg¨® del equipo titular. Despu¨¦s con Rafa Ben¨ªtez, tanto en el equipo blanco como en el Everton. Lo mismo se coment¨® a su salida del Olympiakos, pese a los elogios de parte y parte. El m¨¢s reciente hab¨ªa sido Luis Zubeld¨ªa, en el Sao Paulo, adonde el diez tambi¨¦n hab¨ªa llegado precedido por la ilusi¨®n de la hinchada.
Indiscutible en la Selecci¨®n Colombia de N¨¦stor Lorenzo, el ¨²nico equipo en el que ha podido mostrar su potencial y calidad de manera regular, el futuro de uno de los mejores jugadores de la historia de su pa¨ªs es ahora mismo una inc¨®gnita. Nadie duda de su vigencia, sino de su capacidad de adaptarse al f¨²tbol de clubes. Algunos rumores lo ponen en la ¨®rbita del f¨²tbol argentino, donde ya brill¨® con Banfield cuando era juvenil. Otros tantos ubican su nuevo destino en el f¨²tbol de Colombia, adonde ya han arribado otras figuras recientes de la Selecci¨®n en el ocaso de sus carreras, como Falcao Garc¨ªa o Carlos Bacca. Una vez m¨¢s, la imagen aclamada de James Rodr¨ªguez se mueve a la deriva.