Petro ya tiene en su poder el borrador de ¡°paz pol¨ªtica¡± en Venezuela tras las elecciones presidenciales
El presidente de Colombia ha recibido un texto, elaborado por su embajador en Caracas junto a diplom¨¢ticos de otros pa¨ªses, que enviar¨¢ en breve a Nicol¨¢s Maduro para que lo acepte
Gustavo Petro visit¨® a Nicol¨¢s Maduro hace unos meses en Caracas. El presidente de Colombia puede ser muy franco y directo cuando no quiere perder el tiempo, pero la actitud de Maduro en el Palacio de Miraflores, el edificio neocl¨¢sico en el que descansa el poder casi absoluto del sucesor de Hugo Ch¨¢vez, no invita a la precipitaci¨®n. Ah¨ª dentro se despliega el arte de la diplomacia en toda la extensi¨®n de la palabra. El chavismo es especialmente sensible y cualquier adjetivo de m¨¢s o de menos puede echar al traste una conversaci¨®n. En cualquier caso, Petro le vino a decir a Maduro que la situaci¨®n pol¨ªtica en Venezuela era insostenible y que si quer¨ªa su apoyo, el de Lula da Silva y Gabriel Boric deb¨ªa emitir una se?al de normalidad democr¨¢tica. ¡°Yo propongo un pacto por la paz¡±, dijo Petro, seg¨²n fuentes consultadas por EL PA?S. Maduro no se lo pens¨® mucho y respondi¨®: ¡°Haga la propuesta y la miramos¡±.
Petro y Lula, presidente de Brasil, se encontraron en Bogot¨¢ y hablaron de este asunto. Lula dio su ok. Petro lo anunci¨® p¨²blicamente unas horas despu¨¦s en rueda de prensa conjunta, donde habl¨® de una suerte de ¡°plebiscito¡± paralelo a la votaci¨®n que garantizase que se respetar¨ªan los derechos de todos los candidatos despu¨¦s de las elecciones presidenciales del 28 de julio, unos comicios que se si celebran con garant¨ªas democr¨¢ticas existe la posibilidad real de que la oposici¨®n venza al chavismo. Desde ese momento en el que Petro lanz¨® esa idea, el embajador colombiano en Caracas, Milton Rengifo, se puso manos a la obra. Su labor ha durado semanas. Fruto de ese intenso trabajo naci¨® un borrador que ha sido enviado a Bogot¨¢ y que ya han visto el propio presidente, su mano derecha Laura Sarabia y el canciller, Luis Gilberto Murillo, de acuerdo a dos fuentes que han confirmado este hecho.
?Qu¨¦ queda ahora? Enviar esa propuesta a Maduro y que ¨¦l la valore. En las circunstancias actuales parece poco probable que el chavismo se comprometa a firmar algo as¨ª. En la pr¨¢ctica supone asegurarle a la comunidad internacional que si la oposici¨®n gana las elecciones ellos abandonar¨ªan el poder sin retorcer la Constituci¨®n venezolana ni ejercer represi¨®n ni violencia. En estos ¨²ltimos meses, el Gobierno de Maduro, que controla la rama judicial, entre otras muchas, ha emitido se?ales ambiguas. Por un lado, ha permitido que compita Edmundo Gonz¨¢lez, un diplom¨¢tico de 74 a?os que representa a la l¨ªder de la oposici¨®n, la muy popular Mar¨ªa Corina Machado. Por otro, encarcela a seguidores de Machado y, en un acto que tiene algo de infantil, cierra restaurantes y hoteles que han atendido a Machado durante su gira por Venezuela. Algunos son puestitos humildes en los que se venden arepas.
El documento, en un principio, estaba redactado con la intenci¨®n de que fuese un plebiscito que se votase el mismo d¨ªa de la elecci¨®n. Estaba compuesto por una serie de preguntas que, en esencia, resolv¨ªan la conflictividad pol¨ªtica del pa¨ªs. Es un asunto de dos v¨ªas. Por un lado, si gana el chavismo se compromete a no perseguir a la oposici¨®n, como ha hecho intermitentemente durante estos a?os. Y si lo hace la oposici¨®n, no habr¨¢ represalias contra el oficialismo ni persecuciones judiciales. Se pondr¨ªa en marcha una palabra que espanta al chavismo pero que siempre est¨¢ presente en cualquier conversaci¨®n: La Transici¨®n.
Sin embargo, en la Canciller¨ªa colombiana piensan que no hay tiempo material para organizar algo de ese calibre y que lo mejor es que las partes, principalmente Maduro y Gonz¨¢lez Urrutia, se sienten y firmen un acuerdo pol¨ªtico. Rengifo consult¨® rectores de universidad, analistas clave de la realidad venezolana y representantes de los empresario -los nombres de las personas que participaron no se va a explicitar por temor a que sufran represalias-. Adem¨¢s de a las embajadas de Brasil, Chile y M¨¦xico. Rengifo no quiso participar en esta informaci¨®n. Sin embargo, este peri¨®dico ha sabido que el documento que ¨¦l redact¨® incluye cinco puntos que abordan aspectos sobre las sanciones, las inhabilitaciones de cara los pr¨®ximo comicios, la reinstitucionalizaci¨®n del pa¨ªs y la defensa del Esequibo, as¨ª como el seguimiento de la implementaci¨®n -muchos de estos puntos ven¨ªan recogidos en el acuerdo de Barbados pero no han terminado de implementarse-. De firmarse este acuerdo, los venezolanos lo refrendar¨ªan en una consulta popular el mismo d¨ªa de las presidenciales. El Consejo Nacional Electoral podr¨ªa maniobrar t¨¦cnicamente con este nuevo escenario si se acuerda antes del 10 junio, unas seis semanas antes de la fecha de los comicios, de acuerdo a expertos electorales consultados.
El texto que pasa de mano en mano estos d¨ªas en la Casa de Nari?o, la residencial presidencial colombiana, puede ser un documento clave en un proceso de cambio. O, de no aceptarlo Maduro, convertirse en algo irrelevante. En Venezuela ahora se juega a todo o nada.
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