La inflaci¨®n argentina sube en noviembre menos de un 5% por primera vez en nueve meses

Argentina celebra hasta las malas noticias. En medio de la fiebre mundialista, el 4,9% de subida del IPC registrado en noviembre ha perforado por lo bajo todas las previsiones, m¨¢s cercanas al 6%. El dato ha sido un bal¨®n de ox¨ªgeno para el Gobierno de Alberto Fern¨¢ndez, que necesitaba con urgencia una ralentizaci¨®n de la inflaci¨®n de cara al cierre del a?o. El interanual sigue de esc¨¢ndalo, en el 92,4%, y la suma desde enero es de 85,3%. Es el m¨¢s alto de la regi¨®n, despu¨¦s de Venezuela, pero a esta altura est¨¢ claro que al menos no llegar¨¢ al 100% cuando termine diciembre, como se esperaba. As¨ª de mal est¨¢ la econom¨ªa argentina.

El 4,9% de inflaci¨®n de noviembre es el m¨¢s bajo desde marzo, cuando se dispar¨® hasta el 6,7%. En julio, en medio de la tormenta que sigui¨® a la renuncia del ministro Mart¨ªn Guzm¨¢n, art¨ªfice del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional firmado en enero, el IPC trep¨® hasta el 7,4%. Y se mantuvo por encima del 6% hasta octubre. Para noviembre, el ministro de Econom¨ªa, Sergio Massa, hab¨ªa prometido una cifra que empezar¨ªa ¡°con un cinco¡±. Los analistas privados esperaban, sin embargo, un n¨²mero por encima del seis. El 4,9% fue una sorpresa.

La subida estuvo apalancada por las subidas en el rubro ¡°vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles¡±, producto de la pol¨ªtica de reducci¨®n de los subsidios estatales a la energ¨ªa, un compromiso que el Gobierno asumi¨® ante el FMI para reducir el rojo fiscal al 2,5% del PIB en 2022 y al 1,9% el a?o pr¨®ximo. El respiro vino por el lado de los alimentos, que tras meses de estar por encima del promedio del IPC terminaron noviembre con una subida del 3,5%. Es un rubro que preocupa especialmente al Gobierno, por el impacto que tiene entre los m¨¢s pobres.

Hac¨ªa all¨ª concentr¨® la artiller¨ªa Massa, que a falta de una pol¨ªtica antiinflacionaria que apunte a los problemas estructurales, negoci¨® acuerdos de precios con todos los sectores posibles. Solo durante la ¨²ltima semana, firm¨® con empresas de alimentos y supermercados, telefon¨ªa celular, calzado y laboratorios. El ministro intenta que los aumentos se mantengan alrededor del 4% al menos hasta marzo. La moneda de cambio fue la promesa de que habr¨¢ d¨®lares para pagar importaciones, el bien m¨¢s escaso de la econom¨ªa argentina. ¡°Entramos en un proceso de descenso de la inflaci¨®n¡±, dijo la vocera del presidente, Gabriela Cerruti. ¡°No es una cuesti¨®n de n¨²meros, lo notamos cuando vamos al supermercado¡±, agreg¨®.

Para el ministro Massa bajar la inflaci¨®n es un desaf¨ªo econ¨®mico, pero tambi¨¦n electoral. Para que el peronismo tenga alguna posibilidad en las generales de 2023 deber¨¢ domar el ¨ªndice.

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