Hugo Moyano, el sindicalista imbatible al que venci¨® una pelota de f¨²tbol en Argentina

El f¨²tbol es un trampol¨ªn para el poder en Argentina. Pero la necesidad de obtener buenos resultados deportivos lo vuelve un terreno resbaladizo. En ¨¦l patin¨® Hugo Moyano, el sindicalista m¨¢s poderoso desde el regreso del pa¨ªs sudamericano a la democracia.

Fan¨¢tico del f¨²tbol y del boxeo desde ni?o, Moyano fund¨® en 2008 el club Camioneros y en 2014 lleg¨® a la presidencia de Independiente, uno de los cinco grandes de Argentina, donde permaneci¨® ocho a?os. Acerc¨® al negocio a dos de sus hijos, Pablo y Facundo Moyano, y movi¨® los hilos para que quien era entonces su yerno, Claudio Chiqui Tapia, llegase a la presidencia de la Asociaci¨®n del F¨²tbol Argentino (AFA). Peleado hoy con Tapia, Moyano ha quedado asociado a la grave crisis que atraviesa estos d¨ªas Independiente. A sus 79 a?os, el veterano l¨ªder camionero guarda silencio, replegado de nuevo en el sindicalismo y con la mirada puesta en las elecciones presidenciales de octubre.

Moyano fue denunciado hace 15 d¨ªas por presunta administraci¨®n fraudulenta y lavado de dinero en Independiente por su sucesor en la presidencia del club, el periodista Fabi¨¢n Doman. Esta semana, s¨®lo seis meses despu¨¦s de asumir, Doman present¨® su dimisi¨®n de forma inesperada. En declaraciones p¨²blicas se?al¨® que la denuncia contra Moyano enrareci¨® el clima en el club y las amenazas an¨®nimas recibidas desde entonces fueron el detonante para dar un paso al costado y dejar al club de Avellaneda con una deuda millonaria y al borde de los puestos de descenso.

Aun sin citarlo, las amenazas denunciadas por Doman agrandan la leyenda negra de Moyano. Referentes opositores lo han calificado de ¡°mafioso¡±, ¡°violento¡±, ¡°extorsionador¡± y ¡°chorro¡± [ladr¨®n], entre otros insultos, a ra¨ªz de bloqueos a f¨¢bricas cuyos propietarios no se plegaban a las demandas gremiales o de convocatorias a huelgas y cortes de carreteras.

Reacio a las entrevistas, Moyano ha evitado hablar de la renuncia de Doman. Tampoco se ha referido a la denuncia que le interpuso ante la Justicia, una m¨¢s en una larga lista de la que hasta ahora ha salido siempre airoso. Su actividad pasa en estas semanas por recuperar protagonismo en la escena p¨²blica con un gran acto sindical el pr¨®ximo 1 de mayo y numerosas reuniones con altos cargos sindicales y armadores pol¨ªticos.

Moyano naci¨® en 1944 en La Plata, 60 kil¨®metros al sur de Buenos Aires, pero pas¨® gran parte de su infancia en Mar del Plata, la ciudad costera m¨¢s popular de Argentina. Hijo de un camionero y bombero y de una trabajadora fabril, fue el ¨²nico var¨®n de cuatro hermanos.

Tuvo su primer empleo a los 11 a?os: pon¨ªa etiqueta a los embutidos en una f¨¢brica. Despu¨¦s fue repartidor de una carnicer¨ªa y a los 17, a trav¨¦s de su padre, entr¨® en la empresa de mudanzas Verga Hermanos. La disputa por tener un uniforme laboral fue su primer acci¨®n sindical y pocos meses despu¨¦s debut¨® como conductor de camiones y delegado gremial. Fue un camino ascendente que lo llev¨® hasta la secretar¨ªa general del gremio de Camioneros, en 1987, y a controlar la mayor central obrera de Argentina, la Confederaci¨®n General del Trabajo (CGT), en 2004.

¡°Que todo lo que ande sobre ruedas sea de Camioneros¡±, fue el lema del sindicalista estadounidense Jimmy Hoffa que Moyano us¨® como gu¨ªa para la expansi¨®n de su poder. De forma directa o a trav¨¦s de sus hijos, hoy controla la recolecci¨®n de basura, la distribuci¨®n de gasolina y hasta los peajes.

La fuerza de su poder tiene un origen econ¨®mico: m¨¢s del 90% de lo que produce Argentina se transporta por carretera. Desde hace m¨¢s de tres d¨¦cadas, el hombre capaz de paralizar ese tr¨¢fico vital de camiones es el mismo: Moyano. O el Negro, como lo llaman amigos y aliados.

Mariano Mart¨ªn, periodista especializado en sindicalismo y coautor de la biograf¨ªa El hombre del cami¨®n, junto a Emilia Delfino, dice que ¡°a pesar de la edad, de los achaques y de que el poder no lidie con ¨¦l de la misma forma que hace 20 a?os, Moyano seeguir¨¢ siendo un dirigente important¨ªsimo e insoslayable para el Gobierno mientras est¨¦ a cargo del sindicato del que depende el transporte del 90% del PIB argentino¡±. ¡°Mientras no haya una modificaci¨®n sustancial, que nada indica que vaya a suceder en los pr¨®ximos a?os, ¨¦l es el hombre de referencia para negociar¡±, asegura Mariano Mart¨ªn.

Peronista de cuna, Moyano no ha dudado sin embargo en acercarse o plantarse frente a sucesivos Gobiernos con tal de defender sus intereses. La gran sinton¨ªa que mantuvo con N¨¦stor Kirchner y con su esposa y sucesora, Cristina Kirchner, se plasm¨® en importantes espacios ganados en el Poder Ejecutivo: el ¨¢rea de Transporte y la de Obras Sociales (sistema de salud sindical) quedaron en manos de personas leales a Moyano.

Conglomerado empresarial

Su fortuna creci¨® como nunca en esos a?os a trav¨¦s de una pr¨®spera red de empresas controladas por su tercera mujer, Liliana Zulet, hoy en la mira de la justicia. La principal se llama Iarai y gestiona las cl¨ªnicas y geri¨¢tricos de la obra social de Camioneros, que tiene una caja millonaria. Pero forman parte del emporio familiar tambi¨¦n la constructora Aconra, la empresa de seguros Caminos protegidos, la textil Dixey S.A. y la empresa de seguridad Las Mar¨ªas, entre otras muchas.

Investigaciones period¨ªsticas apuntan a que su patrimonio ronda los diez millones de d¨®lares e incluyen entre sus bienes de mayor valor una exclusiva finca de 10.000 metros en Parque Leloir, en la periferia oeste de Buenos Aires.

Moyano se cas¨® tres veces y tuvo siete hijos. Pablo, el primog¨¦nito, es secretario adjunto de Camioneros y cotitular de la Secretar¨ªa General del Trabajo. Paola, la segunda, estuvo casada con Claudio Chiqui Tapia, el actual presidente de la AFA que trajo la Copa del Mundo desde Qatar. Karina, psic¨®loga social, est¨¢ al frente del ¨¢rea de G¨¦nero de Camioneros. Emiliano muri¨® en 2011, a los 36 a?os. Facundo, al frente del sindicato de peajes, fue diputado por el Frente de Todos (en el Gobierno) hasta 2021. Hugo Antonio, abogado, es el asesor legal de una decena de gremios de la CGT. Jer¨®nimo, el ¨²ltimo, es el ¨²nico hijo en com¨²n con Zulet, su actual pareja.

La relaci¨®n con la Casa Rosada se tens¨® a partir de 2011, cuando Fern¨¢ndez de Kirchner fue reelegida con el 54% de los votos. ¡°Cristina entendi¨® que con ese caudal de votos no ten¨ªa que repartir poder y Moyano no es una persona que acepte d¨®cilmente migajas. Cuando se alej¨® Cristina, ¨¦l actu¨® en espejo¡±, dice Mart¨ªn.

Moyano convoc¨® a huelgas generales en 2014 y 2015 y se acerc¨® al Mauricio Macri durante la campa?a electoral con la que el ex alcalde de Buenos Aires lleg¨® a la presidencia. Pero los primeros cortocircuitos no tardaron en aparecer y el sindicalista se convirti¨® en uno de sus m¨¢s f¨¦rreos opositores en las calles.

Meses atr¨¢s, cuando parec¨ªa que Macri iba a buscar la revancha frente a Alberto Fern¨¢ndez, Moyano lo tild¨® de ¡°trastornado¡± y ¡°descerebrado¡± y advirti¨® a los suyos que, de ganar la coalici¨®n opositora Juntos por el Cambio (JxC), buscar¨ªan meterlos presos. A diferencia de su hijo Pablo, alineado con el kirchnerismo, el patriarca de la familia se ha acercado en las ¨²ltimas semanas a los sectores m¨¢s ortodoxos del peronismo.

M¨²ltiples denuncias

En los noventa, la Justicia investig¨® a Moyano por tenencia ilegal de drogas despu¨¦s de haber encontrado al menos 300 gramos de coca¨ªna en su oficina. ?l aleg¨® que la hab¨ªan sembrado y nunca pudo ser inculpado. Una d¨¦cada m¨¢s tarde, enfrent¨® otro juicio por presunto enriquecimiento il¨ªcito y desv¨ªo de fondos del sindicato a las empresas familiares que tampoco prosper¨®. La semana pasada, la justicia archiv¨® otra causa que hab¨ªa sido abierta contra ¨¦l en 2011 por presunto lavado de activos por m¨¢s de un mill¨®n de d¨®lares y la aparente creaci¨®n de una empresa fantasma. De la denuncia por presunta administraci¨®n fraudulenta y lavado de activos como presidente de Independiente por ahora no hay novedades.

Los hinchas del Rojo se han sumado a la lista de enemigos cosechada por Moyano a lo largo de sus seis d¨¦cadas de actividad sindical. Lo acusan de haber robado una fortuna y haber agravado la crisis econ¨®mica del club hasta dejarlo al borde de la bancarrota. Moyano ignora las acusaciones y despu¨¦s de a?os de ir por libre busca tender puentes con dirigentes sindicales. Es una apuesta contrarreloj: fortalecerse todo lo posible de cara al triunfo opositor que vaticinan las encuestas en las presidenciales de octubre pr¨®ximo.

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