Milei abrir¨¢ su presidencia con una oleada de privatizaciones
El ultraderechista argentino, que tomar¨¢ posesi¨®n el 10 de diciembre, adelanta que vender¨¢ la petrolera YPF, la empresa de energ¨ªa Enarsa y los medios de prensa p¨²blicos
El presidente electo de Argentina, Javier Milei, ha iniciado este lunes una transici¨®n llena de obst¨¢culos. Apenas pudo dar los nombres de algunos de sus futuros ministros y suspendi¨® el encuentro que ten¨ªa acordado con el presidente, Alberto Fern¨¢ndez, disconforme con detalles como el lugar y los invitados para la foto. El encuentro se produjo, finalmente, esta ma?ana, en la residencia oficial de Olivos, donde Milei vivir¨¢ a partir del 10 de diciembre a las afueras de la ciudad de Buenos Aires. El presidente electo s¨ª ha adelantado alguna de las que ser¨¢n sus primeras medidas. Emprender¨¢, dijo, apenas asuma, una ola de privatizaciones que arrancar¨¢ con la petrolera YPF, la empresa de energ¨ªa Enarsa y el conglomerado de medios p¨²blicos.
El l¨ªder de la nueva ultraderecha argentina tiene tres semanas para armar su gabinete, pero no le sobran colaboradores. Su partido, La Libertad Avanza, carece de figuras suficientes para ocupar los cargos m¨¢s altos de la Administraci¨®n; depende de aquellos que pueda aportar la fuerza del expresidente Mauricio Macri, su nuevo aliado.
Milei teme adem¨¢s que mientras prepara su asunci¨®n, el Gobierno saliente tome medidas que lo perjudiquen. Tiene motivos para ello. Su rival en la segunda vuelta, Sergio Massa, que tambi¨¦n es ministro de Econom¨ªa, le advirti¨® durante la noche de la derrota que ahora era su responsabilidad mantener a raya la inflaci¨®n, hoy en un 142% interanual. Massa dio a entender incluso que estaba dispuesto a renunciar, ahora que su trabajo como ministro-candidato estaba terminado.
Milei avanz¨® poco en los asuntos de gesti¨®n, pero abund¨® en definiciones pol¨ªticas. Durante la ma?ana del lunes, recorri¨® las radios locales repitiendo una a una las que ser¨ªan sus primeras medidas de Gobierno: privatizaciones, control de la protesta social y dolarizaci¨®n. ¡°Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado, va a estar en las manos del sector privado¡±, dijo. No es la primera vez que Argentina emprende una ola privatizadora: en los a?os noventa, el peronista liberal Carlos Menem no dej¨® empresa p¨²blica sin vender, en un largo proceso que coron¨® con la petrolera YPF, cuando estaba a d¨ªas de entregar el poder en 1999. En 2012, el gobierno de Cristina Kirchner renacionaliz¨® la empresa, que estaba en manos de Repsol. Milei apunt¨® justamente contra YPF, que prometi¨® usar ¡°como puente para la readecuaci¨®n del sistema energ¨¦tico¡±, y Enarsa. ¡°La transici¨®n dura m¨¢s o menos dos a?os¡±, uno m¨¢s del plazo que imagina para la dolarizaci¨®n de la econom¨ªa, su bandera en la lucha contra la inflaci¨®n. ¡°Eso puede llegar a hacerlo en un a?o y una vez que est¨¢n sancionadas las leyes¡±, dijo.
La profundidad de los cambios que propone Milei ya recuerda a la ¡°cirug¨ªa sin anestesia¡± que Menem aplic¨® cuando la hiperinflaci¨®n devastaba al pa¨ªs en 1990. En aquel momento, muchas de las medidas generaron descontento social, con protestas y huelgas. Milei tom¨® nota de aquella experiencia y advirti¨® que est¨¢ preparado para enfrentar a aquellos ¡°que se opongan al cambio por defender sus privilegios¡±. No se refer¨ªa a ¡°la casta pol¨ªtica¡±, la misma que prometi¨® combatir durante la campa?a, sino a los empleados y funcionarios que podr¨ªan quedar desempleados. El presidente electo revel¨® que ya se puso en contacto con el alcalde electo de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, para ¡°mantener el orden en las calles¡±. ¡°Cuando hay un delito, se lo reprime. Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada. El que las hace, las paga¡±, dijo. Los cambios ser¨¢n ¡°dr¨¢sticos¡±, advirti¨®, y no tolerar¨¢ desmanes.
Contener eventuales protestas ser¨¢ solo uno de los desaf¨ªos que enfrentar¨¢ el nuevo Gobierno. Milei deber¨¢ apurar un armado pol¨ªtico que alimente el m¨²sculo de la gobernabilidad. Tendr¨¢ apenas 38 de 257 diputados y necesitar¨¢ de la treintena que pueda aportarle el expresidente Macri para ser competitivo. Enfrente se encontrar¨¢ con los 108 legisladores del peronismo, el partido que desde la oposici¨®n tendr¨¢ adem¨¢s el control del Senado. El kirchnerismo, pese a la derrota en las urnas, dispondr¨¢ de la llave para bloquear o aprobar leyes y ratificar decretos presidenciales. El ultra no tendr¨¢ otro remedio que negociar cada ley con dirigentes a los que lleva meses tildando de ¡°mugre¡±, ¡°ladrones¡± y ¡°zurdos (izquierdistas) de mierda¡±.
Milei no tendr¨¢ tampoco apoyo pol¨ªtico en los territorios: su partido no tendr¨¢ ni un solo gobernador provincial, en un mapa que estar¨¢ dominado por peronistas, radicales (socialdem¨®cratas) y fuerzas locales que suelen vender sus votos al mejor postor, seg¨²n la necesidad. Esta dispersi¨®n opositora complicar¨¢ los acuerdos de un dirigente que no ha dado muestras de vocaci¨®n negociadora.
Guerra contra la inflaci¨®n
La econom¨ªa es, con todo, el incendio m¨¢s grande que deber¨¢ atender Milei. Tiene, adem¨¢s, poco tiempo para el ensayo y error. El lunes fue festivo en Argentina y no hubo mercado de divisas. Este martes se sabr¨¢ c¨®mo reciben los inversores locales el cambio de mando. La mirada estar¨¢ puesta en la cotizaci¨®n del d¨®lar blue, aquel que sube y baja libremente de acuerdo con la oferta y la demanda. El viernes, cerr¨® rondando los 1.000 pesos por unidad; mantenerlo bajo control ser¨¢ el principal desaf¨ªo durante la transici¨®n. Si el ministro Massa decide finalmente echarse a un lado, la econom¨ªa quedar¨¢ sin timonel. Milei no tom¨® bien las advertencias del por ahora ministro, tanto que al final decidi¨® posponer la reuni¨®n con el presidente Fern¨¢ndez para avanzar en la transici¨®n. ¡°Que se hagan cargo de la responsabilidad hasta el final del mandato, el 10 de diciembre¡±, dijo Milei.
En el frente externo, al menos, su triunfo cay¨® bien. Las acciones de las empresas argentinas que cotizan en Wall Street se dispararon entre un 4% y un 36%, con especial inter¨¦s en las vinculadas a la energ¨ªa y el sector bancario. La m¨¢s beneficiada fue justamente la petrolera YPF, que ahora est¨¢ en venta. Los bonos de la deuda argentina tambi¨¦n subieron entre tres y seis puntos. En el frente pol¨ªtico, los dirigentes regionales de la ultraderecha se abrazaron a Milei, al que consideran la punta de lanza de un resurgimiento de la ola conservadora que alguna vez lideraron Donald Trump en Estados Unidos y Jair Bolsonaro en Brasil. Fue justamente Bolsonaro quien mostr¨® el mayor entusiasmo con la difusi¨®n en redes de la comunicaci¨®n que mantuvo con el argentino mediante una llamada de video. El brasile?o acept¨® la invitaci¨®n de Milei a su investidura. ¡°Eso es perfecto, es un gol de mitad de cancha¡±, le dijo el argentino, que considera al presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva un representante del ¡°comunismo internacional¡±.
El triunfo de Milei por m¨¢s de 10 puntos porcentuales sobre Massa no solo ha movilizado a la ultraderecha. El peronismo derrotado est¨¢ ahora en terapia intensiva, obligado a rearmarse tras el declive inevitable de Cristina Kirchner, la l¨ªder del movimiento. La vicepresidenta no ha hablado desde la derrota de su candidato. La atenci¨®n est¨¢ puesta en el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, el peronista con el cargo de mayor poder despu¨¦s del presidente. Kicillof es un dirigente de poco m¨¢s de 50 a?os que responde a Kirchner, pero aspira a tener vuelo propio, ahora que Massa est¨¢ malherido. Su basti¨®n es la m¨¢s grande, rico y poblado del pa¨ªs, un territorio ideal para iniciar el proceso de reconstrucci¨®n pol¨ªtica.
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