Messi lleva a Argentina otra vez a la final de la Copa Am¨¦rica

Aunque pareci¨® f¨²tbol playa, con tanta arena repartida en el campo de juego del estadio de Nueva Jersey, Argentina avanz¨® a la final de la Copa Am¨¦rica Estados Unidos 2024 y qued¨® a 90 minutos de un nuevo t¨ªtulo. Con la mejor actuaci¨®n en el torneo de Lionel Messi, recuperado en buena parte de la lesi¨®n que lo hab¨ªa disminuido a un papel casi secundario en los partidos anteriores, en especial en los dram¨¢ticos cuartos de final ante Ecuador, el campe¨®n del mundo dio un golpe de autoridad y venci¨® 2-0 a Canad¨¢ en una semifinal pl¨¢cida, casi como si fuera un partido de primera fase. De hecho, en el debut en la Copa, Argentina tambi¨¦n hab¨ªa superado 2-0 al mismo rival.

A los 37 a?os, decidido a vencer a la biolog¨ªa y a la molestia en el aductor derecho que lo persigui¨® en gran parte de la Copa, el actual jugador del Inter Miami convirti¨® su primer gol en el torneo, tras desviar un disparo de Enzo Fern¨¢ndez que igualmente parec¨ªa tener destino de red. Fue a los seis minutos del complemento y remat¨® un partido que Argentina ya ganaba desde los 22 del primer tiempo, cuando Juli¨¢n ?lvarez, el delantero del Manchester City con rostro de boy scout pero instinto asesino en el ¨¢rea, hab¨ªa marcado el 1-0.

¡°Con algunos jugadores, como con [?ngel] Di Mar¨ªa, son las ¨²ltimas batallas y las estamos disfrutando al m¨¢ximo. Que la selecci¨®n argentina est¨¦ en una final es impresionante, una locura, muy dif¨ªcil, incre¨ªble, y lo estamos disfruntando¡±, dijo despu¨¦s del partido Lionel Messi, quien adem¨¢s destac¨® el contexto de ¡°una Copa muy dif¨ªcil, con selecciones muy duras, canchas dif¨ªciles y muchos viajes¡±.

La selecci¨®n de los Lioneles, Messi y Scaloni, convertida en un ministerio de felicidad para un pa¨ªs en eterna crisis, naturaliz¨® lo m¨¢s dif¨ªcil del f¨²tbol: ganar, ganar y seguir ganando. Campe¨®n del mundo en Qatar 2022 y tambi¨¦n defensor del t¨ªtulo continental que conquist¨® en Brasil 2021, la Albiceleste intentar¨¢ en la final del pr¨®ximo domingo en Miami ¨Cla casa del 10, justamente- un r¨¦cord que s¨®lo consigui¨® Espa?a entre 2008 y 2012: tres t¨ªtulos seguidos, dos continentales y una Copa del Mundo.

El rival de Argentina se definir¨¢ este mi¨¦rcoles en una atrapante semifinal en Charlotte, Carolina del Norte, entre Colombia y Uruguay, ambos hasta ahora -junto a la Albiceleste- los mejores equipos del torneo. Para Messi y sus muchachos tambi¨¦n supondr¨¢ una exigencia desconocida en su paso por Estados Unidos: por un peculiar fixture dise?ado por la Conmebol, Argentina evit¨® los dos grupos con los equipos m¨¢s peligrosos. Una inocua Brasil, de hecho, qued¨® eliminada por la brava Celeste de Marcelo Bielsa.

Pero as¨ª como la Conmebol festeja que Messi y Argentina est¨¦n en la final, la FIFA deber¨¢ tomar nota para la Copa del Mundo de selecciones 2026 -y tambi¨¦n para el Mundial de clubes 2025- que no puede repetir una de las postales ya caracter¨ªsticas de esta Copa Am¨¦rica: como en tantos otros campos de juegos emparchados entre c¨¦sped natural y sint¨¦tico, el estadio de Nueva Jersey ¨Ccompleto por 80.000 espectadores- se pareci¨® a un arenero infantil. O a un campito en el barrio para amigos.

En cada pase, la pelota levantaba una estela de arena, ni hablar cuando los jugadores barr¨ªan el c¨¦sped. M¨¢s all¨¢ de afectar al nivel de juego, lo cual no es menor para el espect¨¢culo, tambi¨¦n implica un peligro para la salud de los jugadores. Casualidad o no, el propio Messi se lesion¨® en este estadio en el segundo partido de Argentina, ante Chile.

Sin brillar pero con personalidad y solidez, el campe¨®n del mundo barri¨® algunas -o muchas- de las dudas que hab¨ªa dejado ante Ecuador, cuando Emiliano Dibu Mart¨ªnez debi¨® recurrir a su especialidad en los penales. Parte del segundo o tercer pelot¨®n mundial, Canad¨¢ -un equipo con m¨¢s f¨ªsico que talento- intent¨® incomodar a la Argentina a partir de la velocidad de algunos de sus jugadores, en especial de Alphonso Davies, del Bayern M¨¹nich, pero s¨®lo lo consigui¨® en el inicio del partido.

En puntas de pie, Argentina se parece a esos cazadores que se permiten especular y jugar con sus presas. Bast¨® un muy buen pase de Rodrigo de Paul para que ?lvarez le ganara en velocidad y viveza a Derek Cornelius, defensor del Malmo FF de Suecia, y definiera entre las piernas de Maxime Cr¨¦peau, arquero del Portland Timbers, para convertir un 1-0 que se pareci¨® un jaque mate.

Con algunas buenas sociedades entre Messi y ?ngel Di Mar¨ªa, que anunci¨® su retiro de la selecci¨®n despu¨¦s de la Copa Am¨¦rica, Argentina no necesit¨® su mejor versi¨®n para llevar las riendas de la noche, en especial a partir del mediocampo entre Enzo Fern¨¢ndez y De Paul, ambos de buen nivel. Aunque ni la Albiceleste ni Messi est¨¢n cerca de lo que mostraron en Qatar 2022, esta vez al partido le sobraron 30 minutos, una superioridad poco habitual en cualquier partido de selecciones, en especial en una semifinal de Copa Am¨¦rica, un torneo mucho m¨¢s duro de lo que puede pensarse.

Al final de la noche, cuando Argentina ya estaba en otra final, los jugadores se abrazaron en mitad del campo de juego y empezaron a cantar, como si fueran simpatizantes, ¡°El domingo cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar¡±. A las obras completas de Messi en la selecci¨®n parecen quedarle un ¨²ltimo cap¨ªtulo, o ante¨²ltimo, si es que tambi¨¦n se decide a jugar el Mundial 2026. Las finales vuelven a llamar al 10.

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