Las nubes de gas y polvo que conocemos como nebulosas planetarias son mucho m¨¢s que estructuras ef¨ªmeras. Descifrando estos despojos estelares podemos entender fen¨®menos f¨ªsicos a los que no tenemos acceso de otro modo
La mayor parte de los planetas que conocemos son viejos porque observar planetas en formaci¨®n no es sencillo. Son los discos donde nacen y crecen los que nos revelan los detalles del proceso
La presencia de un nuevo planeta en los confines del Sistema Solar podr¨ªa explicar el movimiento extra?o de algunos cuerpos de hielo que orbitan m¨¢s all¨¢ de Neptuno
Parece que el escepticismo y la mutabilidad de la ciencia se han revuelto contra ella misma. Necesitamos llegar a donde no nos est¨¢n escuchando: hay vidas en juego
El acceso a informaci¨®n de habitabilidad, marcadores biol¨®gicos y diversidad de otros mundos depende de que podamos capturar la luz de sus atm¨®sferas
Las que conocemos como fuerzas de marea son responsables de fen¨®menos c¨®smicos a todas las escalas como las mareas gal¨¢cticas, la rotura de estrellas, la creaci¨®n de cometas o el alejamiento de la Luna
La formaci¨®n de estrellas a lo largo del tiempo c¨®smico depende del ciclo bari¨®nico: el material fresco de un entorno pr¨¢cticamente vac¨ªo tiene que alimentar de gas a las galaxias
La mec¨¢nica cu¨¢ntica permite ver muy lejos, hacer anatom¨ªa forense de cad¨¢veres estelares y analizar c¨®mo ha evolucionado la qu¨ªmica del universo
Si dos objetos son id¨¦nticos salvo por ser im¨¢genes frente al espejo que no se pueden superponer ?por qu¨¦ la naturaleza, la f¨ªsica fundamental y la vida, elegir¨ªan uno en lugar del otro?
En astrof¨ªsica a menudo afirmamos que somos polvo de estrellas. En realidad somos algo mucho m¨¢s et¨¦reo: el crisol donde se han mezclado sus vientos
La Tierra es el ¨²nico planeta que conocemos que alberga vida, el estudio de sus caracter¨ªsticas nos permite hacer un sano ejercicio de reflexi¨®n del que, bien hecho, quiz¨¢s dependa nuestra propia supervivencia
En un futuro muy lejano solo quedar¨¢n brasas estelares enfri¨¢ndose lentamente junto con el resto del universo, pero, antes de su muerte t¨¦rmica, quiz¨¢s exista la posibilidad que se enciendan por ¨²ltima vez