Cuando la arquitectura es naturaleza
Los trabajos de Julio Cano Lasso y Lacaton & Vassal ven la excelencia arquitect¨®nica como una forma de comuni¨®n con su contexto. Dos citas en Madrid analizan sus acercamientos
Cuatro paredes blancas. Altos cipreses. Un patio en el que crece un ¨¢lamo de hojas plateadas. Glicinias, parras, espliego, violetas y romero¡±. As¨ª describ¨ªa Julio Cano Lasso (Madrid, 1920-1996) su casa-estudio en el barrio madrile?o de La Florida. All¨ª trabaj¨® y vivi¨® durante casi medio siglo. Nunca quiso un estudio grande. ¡°Ni m¨¢s trabajo del que pudiera atender personalmente sin apartarme del tablero¡±, dijo una vez. Hoy cuatro de sus hijos arquitectos le rinden homenaje como comisarios de la exposici¨®n Julio Cano Lasso. Naturalezas, en el COAM de Madrid, que permite entrar en el hacer del arquitecto casi como si entr¨¢ramos en su casa. ¡°Delante del ventanal, una encina extiende sus ramas hasta tocar el cristal. Desde mi mesa la he visto crecer y ya parece cobijarme bajo su ramaje¡±, dej¨® escrito.
De una modernidad cl¨¢sica y realista, Cano Lasso actualiz¨® la tradici¨®n constructiva de los materiales sencillos que se convierten en eternos cuando son tratados de manera artesanal. Esa l¨®gica se encontr¨®, en su trabajo, con la raz¨®n de lo popular y la cultura de la historia. Fue sofisticado e ¨ªntimo en su forma de relacionar arquitectura y naturaleza. Tuvo en cuenta la orograf¨ªa ¡ªla piscina era un hueco en la roca¡ª y los ¨¢rboles le importaron tanto como la ciudad para idear edificios como las excepcionales universidades laborales de Almer¨ªa y Ourense, el Auditorio de Santiago de Compostela o las viviendas de la calle de la Bas¨ªlica, en Madrid.
Despachado hist¨®ricamente como pionero religioso por su inclinaci¨®n a ¡°lo espiritual¡±, se recupera ahora como un humanista que trabaj¨® con lo poco que hab¨ªa en la Espa?a de posguerra y la ambici¨®n de permanecer transform¨¢ndose, como la propia naturaleza. En aquella casa de ladrillo encalado, las sucesivas manos de cal han suavizado las aristas. En los patios permanecen las higueras y los cipreses. La vivienda ha crecido al ser vivida. La naturaleza la ha renovado. Y el legado de Cano Lasso indica inequ¨ªvocamente que lo peque?o es lo grande: ¡°Las violetas crecen en las fisuras porque el viento trae sus semillas, el ladrillo es intemporal porque est¨¢ pensado para mejorar con el tiempo¡±.
¡°Nunca demoler¡±, el mantra del estudio franc¨¦s, demuestra que la l¨®gica ecol¨®gica incluso puede estar hecha de pl¨¢stico
Cano Lasso fue un racionalista naturalista. Desde la urgencia sostenible y la resaca del espect¨¢culo, en su centenario sigue siendo un hombre estoico y clarividente, un cl¨¢sico con futuro. Al igual que en la obra de Cano Lasso est¨¢n las ra¨ªces del trabajo de sus hijos ¡ªla Silicon House de SelgasCano¡ª y la apertura a otros materiales, a una Espa?a m¨¢s abierta y a un tiempo m¨¢s luminoso, en las prioridades de los ¨²ltimos premios Pritzker, Anne Lacaton y Jean-Philippe Vassal (1954 y 1955, respectivamente) hay una puerta a una arquitectura m¨¢s responsable, m¨¢s t¨¦cnica y social que est¨¦tica o espectacular. Por lejanos que parezcan, ambos haceres comparten un respeto com¨²n. ¡°Nunca demoler¡±, el mantra de estos dos franceses, se?ala que la l¨®gica ecol¨®gica no necesita ser de color verde y que puede incluso estar hecha de pl¨¢stico. Sucede en las 530 viviendas del barrio del Grand Parc de Burdeos, que firmaron con Druot y Hutin, y que les valieron el premio Mies van der Rohe en 2019. Por el mismo precio que un aislamiento que asegurara el ahorro energ¨¦tico, esta reforma ampli¨® los pisos 20 metros cuadrados abraz¨¢ndolos con una galer¨ªa con fachada de pol¨ªmeros que act¨²a como un invernadero: repeliendo el sol en verano y aprovech¨¢ndolo en invierno al tiempo que permite la entrada de luz natural.
No demoler, no eliminar, no sustituir. Poner en duda ideas preconcebidas. No acabar un edificio, desnudarlo. Partir de lo que hay: un jard¨ªn, un lugar, un edificio existente o un material. No desperdiciar. Hacer sitio. Lacaton y Vassal barajan estos principios y tratan de materializarlos con estrategias como levantar la vivienda para liberar la parcela (casa en el Cap Ferret), incrustar jardines de invierno (ecobarrio en Saint-Nazaire), construir fuentes en lugar de rehacer un parque (plaza Leon Aucoc, tambi¨¦n en Burdeos) o ampliar los pisos con el mencionado per¨ªmetro aislante. El resultado es m¨¢s espacio, menos desperdicio, nuevas vistas, m¨¢s luz y otra relaci¨®n con la naturaleza. El espacio que se gana bajo los pilotis, en una terraza o en un interior profundo, resulta en estancias flexibles y deja lugar para la vegetaci¨®n y una manera m¨¢s libre de habitar.
Lacaton y Vassal retaron al establishment arquitect¨®nico haciendo hablar a la gente. Con cada memoria publican el coste de los inmuebles. Siempre hablan con los usuarios. En Burdeos, al tratarse de pisos de alquiler, realizaron el costos¨ªsimo trabajo de reubicar a los inquilinos con su plena aquiescencia. ¡°Hab¨ªa gente sola con un alquiler que le arruinaba y familias de cuatro hijos metidas en una habitaci¨®n¡±. Por eso es l¨®gico que el recorrido de la exposici¨®n Lacaton & Vassal, en el Museo ICO de Madrid, incluya poco m¨¢s que informaci¨®n y fotos de archivo. All¨ª est¨¢ todo: no en los edificios, sino en sus habitantes.
La muestra culmina en un espacio donde el vac¨ªo resulta monumental: de los nueve v¨ªdeos que firma Karine Dana, uno entra en la Escuela de Arquitectura de Burdeos y otro en el piso de madame Ramos. ¡°Yo aqu¨ª me siento libre¡±, dice apoyada en su bast¨®n. Los edificios de Lacaton y Vassal no solo est¨¢n preparados para desaparecer tras las plantas. Tambi¨¦n procuran cuidar de la salud del planeta reutilizando materiales y consumiendo menos energ¨ªa. Que pisos de alquiler social tengan vistas y que los inquilinos puedan ver crecer las plantas tambi¨¦n contribuye, despu¨¦s de todo, a una sostenibilidad social.
¡®Julio Cano Lasso. Naturalezas¡¯. COAM. Madrid. Hasta el 1 de noviembre.
¡®Lacaton & Vassal¡¯. Museo ICO. Madrid. Hasta el 16 de enero de 2022.
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