La Espa?a a garrotazos, el caos tras el apag¨®n de internet y otros libros de la semana

Muchos edificios hist¨®ricos, monumentos y hasta especies animales se evaporan en tiempo real. Mientras Judith Schalansky trabajaba en su Inventario de algunas cosas perdidas, el Estado Isl¨¢mico dinamit¨® las ruinas de Palmira, en Mosul desaparecieron la gran mezquita de Al Nuri y la del profeta Jon¨¢s, un tercio de la Gran Muralla China se perdi¨® a causa del vandalismo y la acci¨®n de los elementos, la laguna guatemalteca de Atescatempa se sec¨®, dejando a cientos d...

Muchos edificios hist¨®ricos, monumentos y hasta especies animales se evaporan en tiempo real. Mientras Judith Schalansky trabajaba en su Inventario de algunas cosas perdidas, el Estado Isl¨¢mico dinamit¨® las ruinas de Palmira, en Mosul desaparecieron la gran mezquita de Al Nuri y la del profeta Jon¨¢s, un tercio de la Gran Muralla China se perdi¨® a causa del vandalismo y la acci¨®n de los elementos, la laguna guatemalteca de Atescatempa se sec¨®, dejando a cientos de personas sin sustento, y muri¨® el ¨²ltimo macho de rinoceronte blanco del norte. Las p¨¦rdidas son incontables, pero queda el consuelo literario de que nada ni nadie se va del todo si queda una historia que lo recuerde.

La historia oficial se ha encargado, precisamente, de recordar. Pero solamente lo que les conven¨ªa a unos pocos. En su nuevo ensayo, Decapitados, el periodista Peio H. Ria?o parte de esa tesis para analizar el significado y las repercusiones de las recientes decapitaciones de estatuas de esclavistas y tiranos, cuyas cabezas han rodado por las plazas de medio mundo. De las historias olvidadas por ese relato hegem¨®nico, de la letra peque?a de la historia, trata el libro de Enrique D¨ªaz ?lvarez La palabra que aparece, un recorrido por el horror humano a trav¨¦s de los testimonios de los vencidos. En esa lista de perdedores figuraba Mada Carre?o, exiliada de la Guerra Civil espa?ola en M¨¦xico, cuya novela sobre el embarazo En busca del presente ¡ªprecursora de la actual mirada feminista¡ª ve la luz ahora tras gestarse en 1959.

No hay ning¨²n ganador en el Duelo a garrotazos que tan magistralmente represent¨® Goya. En esa pintura se inspira el t¨ªtulo del ensayo biogr¨¢fico de Berna Gonz¨¢lez Harbour Goya en el pa¨ªs de los garrotazos. La vida del artista aragon¨¦s le sirve a la escritora y periodista de EL PA?S de lienzo sobre el que trazar un retrato de Espa?a, con sus repintes y sus claroscuros. Se trata de una mirada local a un mundo global, donde todo y todos estamos conectados en la Red. De ese entramado dependen nuestros trabajos y nuestro ocio, as¨ª como infraestructuras cr¨ªticas como la electricidad, el agua, el transporte, la seguridad, los pagos, la log¨ªstica¡­ ?Qu¨¦ pasar¨ªa entonces si de un d¨ªa para otro se apaga internet? Esther Paniagua se adentra en ese escenario apocal¨ªptico ¡ªque no ficticio¡ª en su libro Error 404.

Puedes seguir a BABELIA en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.