Angel Olsen encuentra la luz

Desde la terraza puede verse el mar. Tambi¨¦n un pu?ado de palmeras, y la pista de tenis que hay dentro del recinto en el que se encuentra su apartamento. Su apartamento es un apartamento de alquiler porque Angel Olsen (San Luis, Misuri, 35 a?os) est¨¢ estos d¨ªas lejos de su casa en Asheville (Carolina del Norte), lo que quiere decir que est¨¢ lejos de su gata Violet. ¡°Estamos ensayando aqu¨ª¡±, dice. Aqu¨ª es Los ?ngeles. Cuando Olsen descuelga la videollamada queda algo m¨¢s de una semana para el lanzamiento de su sexto ¨¢lbum, Big Time (Jagjaguwar / Everlasting, 2022), que suena a una personal¨ªsima americana, a una suerte de country folk de ra¨ªz setentera altamente luminoso. ¡°Oh, s¨ª, durante la pandemia escuch¨¦ mucho a Stevie Nicks. Escuch¨¦ sus discos country, y un mont¨®n de otros discos de los setenta, J. J. Cale y cosas as¨ª¡±, dice.

Simplemente le apeteci¨®. ¡°No pod¨ªa soportar nada que sonase m¨ªnimamente oscuro¡±, dice a continuaci¨®n. No tarda en recordar que hace un a?o que perdi¨® a sus padres. ¡°Es curioso, las canciones de este ¨¢lbum las escrib¨ª antes de que murieran, pero de alguna forma condensan lo que pienso desde entonces. Que hay que apreciar las peque?as cosas, y vivir el momento¡±, asegura. Sus padres siempre fueron mayores. La adoptaron cuando ten¨ªa tres a?os. En casa eran ocho. Desde peque?a estuvo obsesionada por c¨®mo deb¨ªa haber sido su infancia. Lleg¨® a investigar c¨®mo era la vida en los treinta y en los cincuenta. Por entonces ya quer¨ªa ser una estrella del pop. Aunque luego lleg¨® al instituto y decidi¨® que le gustaba infinitamente m¨¢s el punk rock. Empez¨® a tocar la guitarra y el piano. Se meti¨® en una banda que, dice, sonaba a lo que entonces hac¨ªan No Doubt.

Su mete¨®rica y brillant¨ªsima carrera ¡ªseis discos ¨²nicos, de un sonido hipn¨®tico y mutante: en apenas 10 a?os ha pasado de cantautora a estrella indie mundial de profundo y majestuoso calado, con discos como My Woman (2016) y All Mirrors (2019) a la cabeza de una producci¨®n con aspecto de animal salvaje y dolorosamente bello¡ª empez¨® entre bambalinas: figuraba como voz de apoyo del prol¨ªfico e imparable Bonnie Prince Billy. Pero Half Way Home (2012), su primer disparo, la coloc¨® al frente de un algo que estaba por formarse, un songwriterismo femenino de profund¨ªsimas ra¨ªces en universos propios que orbitaban ¨²nicamente alrededor de s¨ª mismos, y en el que tambi¨¦n militan Phoebe Bridgers, Lucy Dacus y Julien Baker. Aunque fue ella, en alg¨²n sentido, la que abri¨® ese camino. ¡°S¨ª, es cierto, el disco es luminoso. Porque creo que soy otra¡±, dice.

¡°Tenemos que vivir cada momento como si fuera el ¨²ltimo. Nada es tan horrible como parece. Porque nada es definitivo. Todo puede cambiarse¡±

?En qu¨¦ sentido es otra? ¡°He madurado. No s¨¦, tengo 35 a?os. Soy infinitamente m¨¢s consciente de que la muerte est¨¢ ah¨ª, en alg¨²n lugar, y de que tenemos que vivir cada momento como si fuera el ¨²ltimo. Nada es tan horrible como parece. Porque nada es definitivo. Todo puede cambiarse¡±, contesta. ?Y es eso consecuencia de la pandemia? ¡°En parte, s¨ª. Y en parte tambi¨¦n, creo, tiene que ver con hacerse mayor, ser consciente de lo que tienes y de lo que vas a perder¡±, a?ade. Sue?a mucho, dice a continuaci¨®n. ¡°Y anoto mis sue?os. Siempre me avisan de cosas. Es fascinante. Ahora que estoy con la banda, sue?o a menudo que llego al estudio y no hay nadie. O que no puedo o¨ªrlos. Tengo miedo porque todo es nuevo¡±, dice. Hay una canci¨®n en el ¨¢lbum titulada ¡®Dream Thing¡¯ en la que narra un sue?o real, y una discusi¨®n que dura 25 a?os.

¡°So?¨¦ con alguien que hac¨ªa mucho que no ve¨ªa y estaba ah¨ª, ante m¨ª, mucho despu¨¦s, y yo lo recordaba como hab¨ªa sido entonces, pero ya no era la misma persona, ?y ad¨®nde hab¨ªa ido aquel otro ¨¦l? La canci¨®n habla de ese otro t¨² que sigue viviendo en la cabeza de los dem¨¢s si no vuelven a verte¡±, cuenta. Sus canciones son a veces peque?os relatos, poemas. ?Lectora voraz? ¡°Quiero creer que s¨ª¡±, contesta. ¡°Y tambi¨¦n escribo cosas que no son canciones. He escrito mucho ¨²ltimamente. Me encant¨® Segunda casa, de Rachel Cusk. Me gusta much¨ªsimo Joan Didion. En general, toda la literatura que parte de un mon¨®logo interior me fascina¡±, dice. Aunque insiste en que los sue?os tienden a ser el material principal de sus canciones. ¡°Creo que es la forma en que me comunico con mi inconsciente¡±, asegura. De ni?a le encantaba irse a dormir porque pod¨ªa so?ar.

Angel Olsen?

Big Times?
Jagjaguwar /Everlasting

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