¡®Agua y jab¨®n¡¯: m¨¢s que un libro, una constelaci¨®n de genialidades
El inclasificable t¨ªtulo de Marta D. Riezu construye un tratado sobre lo que nos seduce a base de una sucesi¨®n fragmentada de opiniones, citas, pasajes y curiosidades
En el discurso de aceptaci¨®n del Premio Nobel de literatura, Olga Tokarczuk contaba lo siguiente: ¡°Tal vez deber¨ªamos confiar en los fragmentos, ya que son ellos los que crean constelaciones capaces de describir m¨¢s, de una manera m¨¢s compleja, multidimensional¡±.
Seg¨²n la RAE, una constelaci¨®n es un conjunto de estrellas que, mediante trazos imaginarios, forma un dibujo que evoca una figura determinada. Casiopea, Ori¨®n, la Osa Mayor. Algo a lo que no apunta la RAE es que en cada una de ellas duermen otras muchas formas, hip¨®tesis, descartes, posibilidades. Y son estas formas dormidas de las constelaciones, ya sea en la b¨®veda celeste o en otros soportes ligeramente m¨¢s prosaicos como el papel, a la espera de ser descubiertas, alumbradas, lo que las convierte en realidades tan infinitamente sugerentes.
Hay libros que tienen m¨¢s de constelaci¨®n que de libro, como este, Agua y jab¨®n, de la periodista Marta D. Riezu (Terrassa, 1979). Fue publicado primero por la editorial Terranova con una tirada corta que no tard¨® en agotarse, y que no se reimprimi¨®, lo que convirti¨® al libro en un codiciad¨ªsimo objeto. Lleg¨® a haber pujas por ¨¦l en Wallapop ¡ª400 euros se ofrec¨ªan por uno de los ejemplares agotados de Terranova¡ª, y ahora, para nuestra suerte, este milagro que es Agua y jab¨®n ha sido reeditado por la editorial Anagrama. Y digo milagro porque es un libro inclasificable que reh¨²ye cualquier intento de categorizaci¨®n, como ocurre con la propia autora.
El t¨ªtulo procede de una pregunta que le hicieron a Cecil Beaton. Le preguntaron qu¨¦ era la elegancia y respondi¨®: agua y jab¨®n, ¡°que es lo mismo que decir: lo elegante es lo sencillo, lo honesto, lo de toda la vida¡±, apunta Riezu, y estos tres conceptos son una buena manera de adentrarnos en el interior de este libro dividido en tres partes: ¡®Temperamentos¡¯, ¡®Objetos¡¯ y ¡®Lugares¡¯, a los que se a?ade un suplemento de afinidades. Pero un alto aqu¨ª porque las partes son, en realidad, intercambiables, es dif¨ªcil poner fronteras entre ellas, no son m¨¢s que un mero intento de ordenar lo que de por s¨ª no puede ser ordenado.
A trav¨¦s de fragmentos m¨¢s o menos extensos, Agua y jab¨®n es una suerte de gabinete de curiosidades, almanaque de opiniones y genialidades, citas, pasajes preferidos, recopilaci¨®n de amores y odios, fantas¨ªas, experiencias, viajes que nunca terminan. Pero es, en especial, un libro escrito sobre el misterio de estar vivo, sobre el poco, o nulo, control que tenemos sobre lo que nos seduce: ¡°El misterio sigue siendo por qu¨¦ algo muy concreto ¡ªy no otra cosa¡ª despierta nuestro inter¨¦s¡±.
Su anterior libro, La moda justa, es un ensayo cr¨ªtico acerca de todo lo que va mal en la industria de la moda, y tambi¨¦n aqu¨ª se desarrollan reflexiones sobre ello, aunque diluidas en un mosaico de temas infinitamente variados: desde la filosof¨ªa hobbesiana de Peanuts, apuntes sobre la elegancia como actitud vital, la felicidad ¡ª¡±el s¨ªntoma m¨¢s primario de la felicidad es desear la repetici¨®n¡±¡ª, frases para pararse a pensar: ¡°Cada producto cultural va acompa?ado hoy de un dudoso an¨¢lisis ideol¨®gico, paralelo al est¨¦tico¡±. O valiosas advertencias: ¡°C¨®mo detectar a un mediocre: por su gusto por lo extraordinario. Le gusta todo cuanto m¨¢s embrollado mejor: lo centelleante, lo atronador, ese horror indefinido que es lo premium, lo vip, lo in your face, el ¡®ya que pago, que se note¡±.
Lo que hilvana todas estas partes y fragmentos es una manera de mirar ¡ªy de contar¡ª apuntalada sobre el asombro. La escritura de Riezu es siempre punzante, ¨¢cida, elocuente, ir¨®nica, cult¨ªsima, tierna ¡ªque no cursi, nunca cursi¡ª, divertida a veces, reflexiva en otras, y no est¨¢ en su adn excluir temas: uno dir¨ªa que su manera de estar en el mundo es una especie de voracidad intelectual ¡ª¡±no creo mucho en la divisi¨®n entre alta y baja cultura. La curiosidad deber¨ªa ser expansiva e incluyente¡±¡ª.
Se cuela en Agua y jab¨®n la propia biograf¨ªa, su infancia: ¡°Yo ten¨ªa 10 a?os y dos ni?eras: Snoopy y Gianni Rodari¡±; su juventud, sus primeros trabajos, su vida en Terrassa, pero especialmente memorable es el delicado retrato que hace de su familia: ¡°He visto suficientes pel¨ªculas de sobremesa para intuir la fortuna que supone crecer en una familia normal. Qu¨¦ era entonces normal: una casa en la que no se hablaba de sentimientos y nadie dec¨ªa jam¨¢s ¡®te quiero¡±. Y en estos pasajes m¨¢s personales, m¨¢s dolorosos tambi¨¦n, Riezu logra, con gran destreza, ponerle palabras a eso tan complejo que es la p¨¦rdida o la nostalgia por todos esos mundos que vamos dejando atr¨¢s.
¡°Con la edad uno pule su relaci¨®n con lo in¨²til¡±, dice Riezu. Contaba el fil¨®sofo chino Zhuang Zi que todo el mundo conoce la utilidad de lo que es ¨²til, pero pocos conocen la utilidad de lo in¨²til. En estas p¨¢ginas se encuentra ese tipo de inutilidad que es, en realidad, el fundamento de los valores esenciales de la humanidad. Pero en tiempos de necesidad de etiquetas, Agua y jab¨®n no es ni reivindicaci¨®n ni advertencia ni libro. O no del todo. Tiene, como dec¨ªamos, algo de milagroso, de misterio. Pero, sobre todo, de constelaci¨®n. Dan ganas de no terminarlo nunca o, puesto que eso no es del todo posible, de llamar a la autora para preguntarle cu¨¢l es la figura, el dibujo escondido tras esa amalgama de fragmentos. Pero hay que aprender a esperar. Adem¨¢s, el futuro pertenece siempre al terreno de la imaginaci¨®n.
Agua y jab¨®n?
Autora: Marta D. Riezu.
Editorial: Anagrama, 2022.
Formato: tapa blanda (240 p¨¢ginas. 11,90 euros).
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