¡®Ma?a¡¯: c¨®mo construir en directo una arquitectura ef¨ªmera con tecnolog¨ªa medieval

?Quedarse mirando el progreso de una obra p¨²blica es un entretenimiento banal? Ya los jubilados de las legiones romanas del siglo I se pasaban las horas muertas observando la erecci¨®n del anfiteatro de Em¨¦rita Augusta, la M¨¦rida actual, o del acueducto de Segovia. En Ma?a, su nuevo espect¨¢culo, que se representa la semana que viene en FiraT¨¤rrega, Manolo Alc¨¢ntara, premio Nacional de Circo 2021, imanta la atenci¨®n de todos los p¨²blicos construyendo en escena con tecnolog¨ªa medieval una obra de arquitectura ef¨ªmera. Resulta admirable que en esta era, tiranizada por lo urgente, espectadores grandes y diminutos se entreguen sin resistencias a la contemplaci¨®n de un proceso fabril durante una hora.

En el patio del Centro Cultural Conde Duque de Madrid, donde Ma?a se represent¨® hace unos d¨ªas dentro del festival Veranos de la Villa, Alc¨¢ntara y Joan Trilla son un maestro alba?il y un cantero, prestos a poner manos a la obra. Sirvi¨¦ndose de poleas, ruedas dentadas, maromas, p¨¦rtigas y palancas, pero tambi¨¦n de la inercia y la fuerza de la gravedad, entre ambos camaradas levantan una por una utilizando el menor gasto de energ¨ªa posible una serie de cajas de madera (aunque parecen bloques) de aproximadamente metro y medio de alto que son utilizadas como material de construcci¨®n.

Una vez puesta la base de su obra y levantado el andamiaje, los alarifes suben el primer bloque desliz¨¢ndolo sobre una rampa. Luego, Alc¨¢ntara camina sobre un engranaje con cuyo girar se va recogiendo una soga que tira del bloque siguiente hasta elevarlo por encima del anterior. Para que todo resulte a¨²n m¨¢s teatral, una leng¨¹eta colocada en el engranaje produce un chasquido r¨ªtmico, hasta que el sillar queda encajado en su sitio. Entonces, una espectadora de siete a?os exclama: ¡°?Ah, ya s¨¦!¡±, como quien cree haber adivinado ad¨®nde va a ir a parar todo aquello. Est¨¢ sentada al borde de su silla, pendiente de cuanto sucede. Hay un misterio en aquel desorden de bloques asim¨¦tricos y de herramientas esparcidas por el suelo. Pero cuando la inc¨®gnita se despeja, el fenomenal despliegue de inteligencia mec¨¢nica del maestro de obras y la limpieza y claridad de su po¨¦tica siguen manteniendo en todo lo alto el inter¨¦s del p¨²blico.

En su muy elaborado proyecto de ingenier¨ªa, Alc¨¢ntara desarrolla por extenso una idea embrionaria de Rudo, un espect¨¢culo suyo anterior. T y Abscisse, dos piezas para bailar¨ªn y artilugios compuestas por Jordi Gal¨ª, parecen haberle servido de inspiraci¨®n, pero detr¨¢s de ambas est¨¢ el imaginario de Los inventos del profesor Franz de Copenhague, vi?etas delirantes maquinadas por Ram¨®n Sabat¨¦s y por otros historietistas del TBO. En el juego de Ma?a tambi¨¦n resuenan las proezas que Yoann Bourgeois propone a sus int¨¦rpretes en instalaciones en equilibrio inestable. Pocas veces el p¨²blico al completo aplaude con la calidez y la gratitud que mostr¨® el de la tarde del estreno.

¡®Ma?a¡¯. Direcci¨®n: Manolo Alc¨¢ntara. FiraT¨¤rrega (Lleida), 9 y 10 de septiembre. Despu¨¦s sigue de gira en Murcia, Puig-reig, Esparreguera, Getxo, Zaragoza¡­

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