Y la Gran V¨ªa se hizo Broadway
'Mas de 100 mentiras¡¯, ¡®El Rey Le¨®n¡®, ¡®Hair¡¯, ¡®Follies¡¯... El auge de los musicales en la capital se hace patente en un paseo por la Gran V¨ªa y alrededores. Cerca de 20 espect¨¢culos a la vez que atraen a p¨²blico de todas partes
Ha pasado m¨¢s de una d¨¦cada desde que Paloma San Basilio y Jos¨¦ Sacrist¨¢n se subieron al escenario del Teatro Calder¨®n como protagonistas del musical El hombre de la Mancha. Aquel estreno, un 20 diciembre de 1997, marc¨® un antes y un despu¨¦s en la escena madrile?a. Ya no hay que ir a Broadway para ver Evita, Los Miserables, Jesucristo Superstar o El Rey Le¨®n. Hoy Madrid, con cerca de 20 musicales en cartel, es capital musical. Madrid es tambi¨¦n Broadway.
¡°Tras el ¨¦xito de El hombre de la Mancha vimos que la ciudad ten¨ªa capacidad, a pesar del riesgo que supone producir un musical (una inversi¨®n de entre 3 y 3,5 millones de euros de promedio), y fuimos un poco m¨¢s all¨¢ al a?o siguiente con La Bella y la Bestia¡±, dice Julia G¨®mez Cora, directora de Stage Entertainment, la promotora de El Rey Le¨®n. ¡°Desde entonces llegan grandes t¨ªtulos del g¨¦nero, se puede ver casi lo mismo que en el resto del mundo en nuestro idioma, Madrid ya es capital musical, algo impensable hace diez a?os¡±, asegura.
El turismo de musicales reporta entre 200 y 250 millones de euros a la ciudad al a?o
El teatro musical, el arte de contar historias con canciones, se remonta a las tragedias griegas.?Seg¨²n estudios sobre la historia de los musicales, luego estuvieron influenciados por la ¨®pera ligera y la opereta El primer musical de Broadway (con 50 interpretaciones), fue The Elves en 1857. Y ocurri¨® algo ins¨®lito: los espect¨¢culos musicales se convirtieron en un gigantesco im¨¢n tur¨ªstico. Sin ir m¨¢s lejos, el merchandising de camisetas, llaveros y toda clase de objetos que inundan Nueva York con la frase ¡°I love NY¡± en la que el verbo ha sido sustituido por un coraz¨®n, proviene precisamente del t¨ªtulo del musical del mismo nombre, que utiliz¨® ese s¨ªmbolo en su campa?a publicitaria de los setenta.
Los casi tres millones de espectadores que acuden cada a?o para ver musicales suponen el 50% del p¨²blico
Madrid no se ha quedado atr¨¢s y ha reconocido el valor econ¨®mico de los musicales. Seg¨²n los estudios de la promotora Stage Entertainment, basados en encuestas a espectadores, el turismo de musicales reporta entre 200 y 250 millones de euros a la ciudad al a?o, de acuerdo con el gasto de los casi tres millones que acuden a la capital desde fuera y que representan el 50% del p¨²blico. Las ciudades que m¨¢s turismo musical generan son las conectadas con el AVE: Barcelona, Sevilla, M¨¢laga¡ ¡°El desarrollo de los trenes de alta velocidad es una de las claves de su ¨¦xito en Madrid, el turismo interior es vital¡±, corrobora Jos¨¦ Mar¨ªa C¨¢mara, presidente de Drive Enterteinment (M¨¢s de 100 mentiras, Sonrisas y L¨¢grimas y antes Hoy no me puedo levantar y Los 40 el musical), que baraja id¨¦nticos datos: ¡°El 50% de los espectadores son de fuera de Madrid durante el fin de semana y, no menos del 25%, en el curso de la misma¡±, matiza.
Seg¨²n G¨®mez Cora, un 30% del p¨²blico hace depender la compra de su billete de la entrada del musical. ¡°Para la mayor¨ªa es un acontecimiento, vienen por algo especial (cumplea?os, aniversarios, declaraciones de amor...) por eso no podemos fallar¡±, explica.
Curiosamente, destacan, dentro del turismo de musicales, los visitantes canarios: ¡°Esa es la raz¨®n por la que hemos estrenado Sonrisas y L¨¢grimas en Tenerife¡±, agrega C¨¢mara, que anuncia que el espect¨¢culo llegar¨¢ a la Gran V¨ªa en septiembre y lamenta la escasa implicaci¨®n de la administraci¨®n p¨²blica en este fen¨®meno: ¡°No puede ser que la Gran V¨ªa siga estando llena de descuideros y sin un tr¨¢fico ordenado, deber¨ªamos aprender de Nueva York y de como cuidan la calle 42¡±.
Tampoco es balad¨ª el n¨²mero de espectadores que descubren el teatro a trav¨¦s de un musical: ¡°Seg¨²n nuestras encuestas, la mayor¨ªa no hab¨ªa pisado un teatro en su vida, son espect¨¢culos que a¨²nan todas las artes (danza, teatro, m¨²sica, grandes montajes¡) y que acogen un amplio espectro de p¨²blico, aunque sean m¨¢s o menos familiares. El g¨¦nero musical ha servido para popularizar otra vez los teatros¡±, concluye G¨®mez Cora.
Algo parecido le sucedi¨® al actor Jos¨¦ Mar¨ªa Pou, director art¨ªstico del Teatro de la Latina, con su programa sobre musicales de Radio Nacional, La Calle 42, que naci¨® para cubrir tres meses de un verano y la legi¨®n de oyentes que cosech¨® lo mantuvo 15 a?os, de 1985 a 2000. ¡°Cuando yo empec¨¦ con Concha Barral lo de los musicales era una cosa extra?a en este pa¨ªs, eran un hecho extraordinario que se produc¨ªa cada cuatro o cinco a?os¡±, recuerda. ¡°Sin embargo, a las dos semanas, la gente empez¨® a salir del armario y a enviarnos cartas y a pedir los discos que pon¨ªamos y que yo tra¨ªa de Londres o Nueva York en los grandes almacenes... 15 a?os m¨¢s tarde, el musical era un hecho cotidiano¡±, concluye.
Para los actores tambi¨¦n supone un gran cambio y la superaci¨®n de algunos prejuicios, como se?ala Alex Baraona (Tuli en M¨¢s de 100 mentiras): ¡°De pronto se cae la cuarta pared e interact¨²as con el p¨²blico, tienes que entregarte a ¨¦l¡±.
Una veintena de musicales en cartel y los que vienen: Pretty Woman my love, Sonrisas y L¨¢grimas y el Follies de Stephen Sondheim (m¨²sica y letras) y James Goldman (libreto) que Mario Gas estrenar¨¢ en el Espa?ol en enero.
¡°Es posible que haya un auge de musicales, son trabajos serios, que han mejorado el nivel en los ¨²ltimos tiempos, sin embargo, me sobran musicales de franquicia, todos esos que vienen ya avalados por ¨¦xitos de taquilla fuera; y musicales yukebox, que parten del ¨¦xito de un artista (Mama M¨ªa, Queen, Hoy no me puedo levantar, M¨¢s de 100 Mentiras)¡±, dice el cr¨ªtico Marcos Ord¨®?ez. ¡°Para mi mentalidad cl¨¢sica, el verdadero musical es el org¨¢nico, el que viene de un libreto y crea canciones espec¨ªficas para ese libreto¡±. Siempre se puede afinar m¨¢s.
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